Gauguin (12) Paul Gauguin (1848-1903)
Paul Gauguin – Gauguin (12)
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Pintor: Paul Gauguin
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Gauguin fue un viajero, un pintor postmodernista francés, de los que reniegan del retrato de la realidad existente que pintaban los realistas, y del movimiento del alma que intentaban captar los impresionistas, y en su lugar crean para revelar unas leyes inmutables del universo inherentes a él. Gauguin viajó mucho en su vida. Hasta los siete años vivió con su madre en Perú, y durante el resto de su vida recordó el descuido, las costumbres, el clima y la añoranza del sur en el corazón.
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Una descripción del cuadro de Paul Gauguin Ah, ¿estás celoso?
Gauguin fue un viajero, un pintor postmodernista francés, de los que reniegan del retrato de la realidad existente que pintaban los realistas, y del movimiento del alma que intentaban captar los impresionistas, y en su lugar crean para revelar unas leyes inmutables del universo inherentes a él.
Gauguin viajó mucho en su vida. Hasta los siete años vivió con su madre en Perú, y durante el resto de su vida recordó el descuido, las costumbres, el clima y la añoranza del sur en el corazón. Ya de adulto, hombre de familia, viajó a Tahití, donde pintó cerca de ochenta lienzos, entre ellos "Ah, ¿estás celoso?", que surgió de una escena que vio en la orilla del mar.
Dos hermanas aborígenes, después de nadar e instalarse en la orilla, conversaban, disfrutando del día soleado y claro y de su propia juventud. De repente, una polémica se abrió paso entre los recuerdos, haciendo que una de las chicas se agachara en la arena y exclamara en voz alta: "¡Ah, estás celoso!". De esta, vista sin querer, pieza de la vida de otras personas y creció un cuadro que Gauguin llamó en su momento el mejor que había pintado.
El espacio del cuadro parece interminable. Las manchas azules y negras del mar se funden con la arena y el árbol que protege a las niñas del sol. Se descartan los vestidos rojos de tono claro. Una de las chicas está tumbada en la arena, cubriéndose perezosamente la barriga con la mano y entornando los ojos, la otra -obviamente exclamando- se sienta mirando a su hermana. Su figura se dibuja con más claridad, una mano sobre la rodilla, una corona de flores blancas en el pelo, una cinta azul entretejida en él.
Las dos chicas están desnudas, pero no se avergüenzan en absoluto. En su mundo no hay nada vergonzoso ni extraño en su desnudez, al contrario, sería extraño entrar en el mar con la ropa puesta. Sus cuerpos tienen un resplandeciente brillo de bronce, y sus rostros tienen todos los rasgos de su pueblo: un perfil aplanado, ojos estrechos.
Comentarios: 1 Ответы
Мега отстой. не профессионально.
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La obra presenta dos figuras femeninas desnudas en un paisaje que sugiere una exuberancia tropical. La figura principal, sentada y con la mirada fija hacia el espectador, destaca por su pose frontal y serena. Porta una corona floral blanca que contrasta con el tono más oscuro de su piel. Su cuerpo es robusto, modelado con pinceladas audaces y sin un detallismo excesivo.
La segunda figura, recostada a su lado, se encuentra en una posición más relajada y vulnerable. La paleta cromática utilizada es cálida, dominando los tonos rojizos, ocres y rosados tanto en las figuras como en el fondo. El tratamiento del color no busca la representación realista sino más bien una expresión emocional y simbólica.
El espacio pictórico se define de manera poco convencional; no hay profundidad marcada ni perspectiva tradicional. Los contornos son definidos pero suaves, contribuyendo a una atmósfera onírica y atemporal. La vegetación densa en la parte superior sugiere un entorno natural salvaje y prístino.
En cuanto a los subtextos, se percibe una idealización de la figura femenina y una exploración de la sensualidad. La mirada directa de la mujer sentada puede interpretarse como una invitación o un desafío al espectador. La composición, con las dos figuras entrelazadas, sugiere intimidad y conexión.
La ausencia de elementos que contextualicen el entorno o la cultura de las mujeres plantea interrogantes sobre su identidad y su relación con el paisaje. Se intuye una búsqueda de lo exótico y primitivo, posiblemente como una forma de escapar de los valores morales y sociales de la sociedad occidental. La simplificación formal y la intensidad cromática sugieren un interés por transmitir emociones y sensaciones más que por representar la realidad objetiva.