Henryk Semiradsky – Chopin playing the piano in the salon of Prince Radziwill
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Comentarios: 2 Ответы
ШОПЕН
1
Тонко плетущиеся нити –
Оснастка мира звуковая.
Шопен – событие событий
В сей жизни, хоть и низовая…
2
Шопен, соната номер два,
Концерт мне первый ближе и мазурки.
И даже если жизнь всего трава -
Ей оправданье эти звуки.
Балтину: Что за заумный бред с потугами на глубокомыслие! "Оснастка... звуковая"? Да еще и "мира"!? "событие событий"? "... хоть и низовая... " – это вообще о чем? "Жизнь всего трава"?! "Ей оправданье... "?
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Alrededor del intérprete, un grupo considerable de personas observa atentamente. Se distinguen figuras sentadas en sillones y sofás ricamente tapizados, así como individuos de pie que parecen formar un semicírculo alrededor del piano. La vestimenta de los presentes denota una alta posición social: trajes elegantes, vestidos con encajes y adornos, joyas visibles.
La paleta cromática es rica y cálida, dominada por tonos ocres, dorados y azules profundos. Los detalles en la decoración – tapices florales, retratos colgados en las paredes, candelabros ornamentados, jarrones con flores– contribuyen a crear una atmósfera de opulencia y refinamiento.
La disposición de los personajes sugiere una jerarquía social implícita. El hombre sentado en el sillón más prominente, con su atuendo claro y su actitud relajada, parece ser la figura central del salón, posiblemente el anfitrión. Las mujeres jóvenes, vestidas con delicados trajes, podrían representar a las hijas o invitadas de honor.
Subyacente a la representación de un momento musical, se percibe una reflexión sobre el papel del arte en la sociedad burguesa y aristocrática. La música actúa como un vehículo para la exhibición social y el establecimiento de vínculos entre los miembros de la élite. El acto de escuchar no es meramente estético; implica también reconocimiento de estatus y participación en un círculo selecto.
La pintura, por tanto, podría interpretarse como una alegoría del mecenazgo artístico y la cultura cortesana, donde la belleza y el talento se convierten en símbolos de poder y distinción social. La mirada atenta de los espectadores no solo se dirige al intérprete, sino también a la propia representación de un estilo de vida privilegiado.