Pintura bizantina Traductor traducir

La historia de la pintura bizantina de hoy apenas puede describirse y detallarse. Nuestras ideas sobre ese arte y su vida centenaria solo pueden basarse en la escasa información disponible para museos, registros y archivos. A menudo, esta información no es completa, y a veces es completamente aleatoria.

El tiempo no perdona a nadie, incluidos los archivos que los historiadores y los historiadores del arte trataron de preservar con el tiempo, pero a menudo no pudieron hacerlo, debido a las muchas guerras que sucedieron a Bizancio. La evidencia relativamente confiable del arte bizantino puede servir como monumentos. Las pinturas bizantinas que se conocen actualmente no están en el sentido completo de su distribución del tiempo, y ni siquiera en el sentido de su ubicación territorial, y no en el sentido de agruparse de acuerdo con sus cualidades artísticas, no pueden corresponder a ningún orden. Los mapas antiguos de Egipto, Turquía, los estados que hace algún tiempo eran parte de Yugoslavia, contienen datos sobre monumentos, palacios y tesoros no explotados. ¿Dónde están estas riquezas hoy? Todos los restos accesibles del mundo destruidos por el tiempo, sus huellas dispersas salvadas por el destino histórico y las influencias climáticas con todos los caprichos del vecindario y la selección, lo que necesariamente marca el camino destructivo de la vida y el tiempo.

Y ahora no es de extrañar que la historia de la pintura de Bizancio sea más bien una teoría de la pintura de este estado, que cambió con respecto a esas conclusiones por las cuales se dieron razones para la presencia de monumentos conocidos o recién descubiertos. La disponibilidad en sí misma dependía directamente de los últimos descubrimientos que siguieron a la difusión de la atención de los críticos de arte e historiadores a nuevos territorios más accesibles a la ciencia, a áreas abiertas hasta ahora inaccesibles de Bizancio. En relación directa con esto, la teoría del arte bizantino estuvo influenciada por una era de discusiones muy animadas y fructíferas sobre las mejores mentes del planeta. La historia se ha convertido en un campo fructífero para las construcciones más brillantes y, a veces, efímeras.