Secretos de la otoplastia:
mitos y conceptos erróneos Traductor traducir
La cirugía plástica moderna ofrece métodos para combatir las imperfecciones externas. Si tienes complejos respecto a la forma y estructura de tus orejas, la otoplastia corregirá las deficiencias. La operación tiene el potencial de eliminar deformidades congénitas o adquiridas, que incluyen “orejas protuberantes”, e implica una respuesta rápida y una rehabilitación rápida.
No todo el mundo es capaz de aceptar la cirugía, por lo que las dudas que surgen antes de tomar una decisión dan lugar a diversas especulaciones. Para realizar con éxito el trámite es necesario estar lo más informado posible sobre todos sus matices. Vale la pena comprender los mitos que acompañan a la corrección. Confirmemos o disipemos los conceptos erróneos existentes.
- La otoplastia implica una recuperación larga y dolorosa. La intervención quirúrgica no implica los procedimientos de recuperación más agradables y la cirugía de orejas no es una excepción. Después de la operación, la hinchazón es evidente, pero pequeña, ya que el evento no provoca una pérdida grave de sangre. Las sensaciones dolorosas ocurren muy raramente y no causan ansiedad o malestar graves. Para una rehabilitación rápida, el paciente sólo necesita colocar un vendaje fijador durante una semana y seguir las recomendaciones del médico.
- No quedan cicatrices tras la operación. Cada caso es único, pero las orejas, así como el cuello, así como el esternón y los hombros son los más propensos a la aparición de marcas queloides y no siempre es posible predecir las consecuencias. Se trata de una disposición individual del cuerpo, que no puede conocerse de antemano. Sólo se pueden hacer suposiciones basadas en la presencia de defectos de naturaleza similar en la carrocería.
- El procedimiento con láser no causa sangrado, a diferencia de la cirugía típica. Hay una cantidad relativamente pequeña de vasos sanguíneos en el área del oído, por lo que la exposición a instrumentos quirúrgicos y dispositivos láser no se acompaña de sangrado severo.
- Ambos métodos de otoplastia conducen a resultados idénticos. La peculiaridad de utilizar un dispositivo especializado permite un impacto más preciso y permite procesar cuidadosamente el cartílago al crear una nueva curvatura de la aurícula, lo cual es importante para un resultado armonioso y estético.
- Los puntos bioactivos se verán afectados. Existe el mito de que es mejor no entrar en contacto con los puntos bioactivos de la zona del oído. Las aurículas tienen varios ganglios nerviosos que son sensibles a las influencias sobre ellas, pero durante la corrección no se ven afectados y después de la otoplastia las causas de los cambios en el bienestar deben buscarse en otros procesos fisiológicos.
- La operación no se recomienda para niños. La cirugía plástica de este tipo está permitida después de los seis años de edad. A esta edad, el cartílago de la oreja es plástico y se adapta fácilmente a nuevas formas. En cualquier caso, es mejor consultar y tomar una decisión final sólo después de consultar con un especialista.
- La corrección del oído afecta la calidad de la audición. Este error no encuentra una explicación objetiva, porque durante la intervención quirúrgica los sistemas encargados de recibir la información sonora permanecen intactos, permitiendo que los sonidos se perciban con la misma calidad que antes de la otoplastia.
- Con la otoplastia es posible restaurar toda la oreja. De hecho, tal posibilidad no existe. La única forma de lograr el resultado deseado será una intervención reconstructiva, que consiste en trasplantar colgajos de piel y formar gradualmente la aurícula. Para crear un órgano completo, se necesitarán varias operaciones con un cierto intervalo temporal para la curación y rehabilitación de las áreas tratadas del oído.
- Después de la cirugía, las orejas se adormecen y pueden cambiar de color. En algunos casos, después de la corrección se produce hiperemia de la piel y disminución de la sensibilidad de las terminaciones nerviosas. Esto se produce por el desprendimiento de la piel del tejido cartilaginoso. Como regla general, un mes después del procedimiento desaparecen; con una rehabilitación de alta calidad, los tejidos arraigan y tienen un aspecto estético.
Antes de inscribirse en una otoplastia, asista a una consulta introductoria con un cirujano plástico, quien le informará sobre las medidas necesarias y opciones de corrección, además de responder a sus preguntas, eliminando dudas y creencias incorrectas: http://sohoclinic.ru/otoplastika
La otoplastia láser es un método moderno y muy eficaz para eliminar defectos de apariencia y corregir la forma de las orejas. En comparación, las opciones alternativas resultan más traumáticas y requieren una rehabilitación a largo plazo.