Iconos ortodoxos, historia. Traductor traducir
En la Iglesia cristiana ortodoxa, los iconos son representaciones visuales de Dios, santos o diversas escenas de la Biblia. La palabra "icono" proviene de la palabra griega "eikona". De hecho, se remontan a los primeros días de la iglesia.
La iconografía comenzó el día en que Jesucristo presionó un paño contra su rostro e imprimió en él su imagen divino-humana. Según la leyenda, el evangelista Lucas pintó la imagen de la Madre de Dios y los iconos de los santos apóstoles Pedro y Pablo y, posiblemente, otros que no han sobrevivido hasta el día de hoy.
Hay iconos modernos y antiguos. Los ejemplos históricos más valiosos aparecen en las subastas de antigüedades. Bajo ninguna circunstancia se debe tirar el ícono, pero se puede regalar, llevar a una iglesia o donar a una compra de íconos para que se le pueda encontrar un nuevo dueño.
Los íconos son una combinación de pintura y aquellos símbolos y obras de arte que reemplazaron a los íconos durante la persecución religiosa. Un icono no es sólo un retrato, debe recordar a la gente el aspecto espiritual de la persona representada en él. Un icono es una imagen que nos lleva a una persona santa que agrada a Dios, o nos eleva al cielo, o evoca un sentimiento de arrepentimiento, aliento, oración, un sentimiento de que debemos adorar esta imagen. El valor de un icono radica en el hecho de que cuando nos acercamos a él queremos orar delante de él con reverencia. Si una imagen evoca este sentimiento, es una buena señal.
Al recordar a los santos y sus luchas, el icono no representa simplemente al santo tal como apareció en la tierra. No, el icono representa su lucha espiritual interior, muestra cómo logró lo que ahora se considera un ángel en la tierra, un santo celestial. Así se representan la Madre de Dios y Jesucristo. Los iconos deben representar esa santidad trascendente que impregnó a los santos.
En la Iglesia Ortodoxa es costumbre venerar iconos. Al entrar, la gente primero enciende una vela y luego hace una pausa para respetar los íconos que se encuentran frente a la entrada de la iglesia. Tenga en cuenta que "honrar" no es lo mismo que "adoración". Honrar algo es rendir homenaje, y homenajeamos no a la imagen en sí, sino a lo que representa.
Otra función importante de los iconos es centrar la mente en Dios durante los servicios religiosos. Cuando nos sentamos tranquilamente en la iglesia, es muy fácil que nuestra mente se distraiga con cosas superfluas, como lo que prepararemos para la cena, las tareas del hogar y los recados que tenemos que hacer la próxima semana. En lugar de soñar despiertos, mirar los íconos durante la iglesia les recuerda a los feligreses dónde se encuentran. La próxima vez que vayas a la iglesia y te resulte difícil concentrarte, mira los íconos. Esto le ayudará a concentrarse en su servicio religioso en lugar de en su vida fuera de la iglesia.