Enigmas de los iconos hagiográficos
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с 5 Марта
по 29 ИюняДворец царя Алексея Михайловича
Проспект Андропова, д. 39, стр. 69
Москва
En el Museo-Reserva de Kolómenskoye se presenta la exposición "Los misterios de los iconos hagiográficos". La exposición, que se encuentra en el Palacio del Zar Alexéi Mijáilovich, presenta imágenes iconográficas de finales del siglo XV y del último cuarto del siglo XIX de la colección del museo-reserva y de colecciones privadas.

Los iconos hagiográficos aparecieron en Bizancio, los más antiguos que han sobrevivido hasta nuestros días datan del siglo XII. Estas imágenes de santos rusos se difundieron tras la canonización de varios hacedores de milagros bajo el Metropolitano Macario en los Concilios Locales de 1547 y 1549. Al igual que los frescos, cumplían una función educativa: explicaban los detalles de la doctrina e ilustraban los temas teológicos más complejos.
En el centro de un icono hagiográfico, por regla general, se encuentra una imagen del santo de cuerpo entero o de medio cuerpo, alrededor de la cual se encuentran escenas de su vida y milagros. Los acontecimientos de la vida pueden estar divididos por bordes y ubicados en escenas, enmarcando la imagen en el centro como un marco, o representados en el fondo a los lados del santo. Las imágenes de estos iconos son ilustraciones del texto de las vidas: pueden ser tanto fuentes canónicas como literatura apócrifa.
Los visitantes de la exposición en el Palacio del Zar Alexéi Mijáilovich podrán conocer los episodios tradicionales de la vida de los santos y aprender a "leer" correctamente el icono hagiográfico. La iconografía se complementa con monumentos librescos y gráficos, elementos de vestimentas litúrgicas, iconos de cobre fundido, tallas de madera y tallas de nácar.
En la exposición se presentan imágenes antiguas de San Nicolás el Taumaturgo, el profeta Elías, San Juan Bautista, el gran mártir Jorge, la gran mártir Paraskeva, la gran mártir Bárbara, la mártir Anastasia la Romana, los beatos Procopio y Juan de Ústyug, la venerable María de Egipto, San Demetrio de Rostov, así como iconos hagiográficos poco conocidos de San Atanasio de Alejandría, los santos Cosme y Damián, los santos no mercenarios y la gran mártir Marina de Antioquía.
Mención especial merece el icono de San Onofre el Grande, que narra la vida del santo anciano eremita. El monumento fue creado en el taller del Monasterio Solovetsky y originalmente se encontraba en la iglesia local, fundada en 1666. En 1976, la imagen fue restaurada en el Centro Grabar. Los expertos llegaron a la conclusión de que el pintor de iconos representó las paredes y la iglesia del Monasterio Eritsky como el Monasterio Solovetsky de piedra blanca, y el carro del zar Narsit como el carruaje de Pedro I. El emperador visitó Solovki en 1702 junto con su hijo, el zarévich Alexei.
Para la exposición “Los misterios de los iconos hagiográficos” se ha grabado una audioguía que está disponible de forma gratuita para los visitantes.