Picky bride Pavel Fedotov (1815-1852)
Pavel Fedotov – Picky bride
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Pintor: Pavel Fedotov
Ubicación: The State Tretyakov Gallery, Moscow (Государственная Третьяковская галерея).
Pavel Andreevich Fedotov pintó el lienzo La novia promiscua en 1847. El lienzo cuenta al espectador toda una historia. A ello contribuye el mobiliario deliberadamente rígido de la sala, las expresiones antinaturalmente emotivas de los rostros de los personajes y una cierta comicidad de sus posiciones. En el centro del cuadro, una dama de mediana edad está sentada con elegancia, su rostro muestra una suave indulgencia y una engañosa duda.
Descripción del cuadro de Pavel Fedotov La novia promiscua
Pavel Andreevich Fedotov pintó el lienzo La novia promiscua en 1847. El lienzo cuenta al espectador toda una historia. A ello contribuye el mobiliario deliberadamente rígido de la sala, las expresiones antinaturalmente emotivas de los rostros de los personajes y una cierta comicidad de sus posiciones.
En el centro del cuadro, una dama de mediana edad está sentada con elegancia, su rostro muestra una suave indulgencia y una engañosa duda. Su figura está ligeramente girada hacia su interlocutor, que la toma de la mano. Esta posición indica el extremo interés de la mujer por su galán, que está arrodillado frente a ella. Un hombre jorobado le suplica que se lleve las manos a la cara. Intenta ver si es posible que una dama tan hermosa acepte atar su destino a él.
Aunque va elegantemente vestido -una costosa chaqueta perfectamente confeccionada oculta su enorme joroba en la espalda-, se da cuenta de lo escasas que son sus posibilidades de resolver el caso con éxito. Pero qué equivocado está. Los padres de la mujer observan el proceso; le lanzan miradas con evidente impaciencia y esperanza. Parece que esta novia no es el primer pretendiente para su mano y no tiene elección. No hace más que ganar tiempo antes de aceptar confiar su destino a este feo anciano, que en un arrebato de emoción ha llegado a dejar caer al suelo su brillante sombrero y sus guantes.
La propia mujer se da cuenta de la necesidad del consentimiento. Su cara tiene un color escarlata. Esto delata la abundancia de maquillaje que se ha aplicado en la cara antes de la recepción del novio. Los polvos y el colorete grueso en las mejillas pretenden disimular los cambios de envejecimiento del rostro de la novia y desviar la atención de su piel seca y envejecida.
El autor del cuadro destacó con elegancia el parecido de los futuros esposos. Así como el novio es repulsivo por fuera, su arrogante y egoísta esposa es negra por dentro. Juntos parecen formar una unión perfecta.
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Comentarios: 1 Ответы
А я виже собаку )) Она находится возле спины мужчины
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En el lienzo se observa una escena interior que retrata un momento de tensión y posible rechazo en un contexto burgués del siglo XIX. La composición está dominada por tres figuras principales: una mujer sentada a una mesa, un hombre arrodillado frente a ella y una tercera figura femenina al fondo, parcialmente oculta tras una cortina.
La mujer, vestida con un elegante vestido de color pastel, exhibe una expresión facial que oscila entre la indiferencia y el desdén. Su postura es erguida y distante, mientras que sus manos descansan sobre la mesa sin ofrecer ningún gesto de receptividad hacia el hombre que se postra ante ella. La iluminación focaliza su rostro, enfatizando su actitud reservada.
El hombre, ataviado con un traje formal y sombrero en mano, se encuentra en una posición sumisa y desesperada. Sus manos aferran las de la mujer en un intento visible por implorar o persuadirla. Su inclinación hacia adelante sugiere vulnerabilidad y súplica.
La figura femenina al fondo, aunque menos prominente, añade complejidad a la escena. Su gesto de sorpresa o consternación, con las manos cubriendo su rostro, podría indicar una reacción ante el rechazo inminente o un juicio moral sobre la situación.
El espacio interior se caracteriza por una decoración opulenta y detallada: paredes revestidas en un intenso color carmesí, retratos colgados, un candelabro ornamentado y diversos objetos decorativos que sugieren prosperidad económica. Sin embargo, esta riqueza contrasta con el ambiente de incomodidad y angustia palpable entre los personajes.
Subtextos potenciales: La pintura parece explorar las dinámicas de poder en las relaciones matrimoniales de la época. El hombre, posiblemente un pretendiente, se encuentra en una posición de inferioridad frente a la mujer, quien ejerce control sobre su destino. La escena podría interpretarse como una crítica a los arreglos matrimoniales basados en consideraciones económicas o sociales más que en el afecto mutuo. La indiferencia de la mujer y la desesperación del hombre sugieren un desequilibrio emocional significativo, posiblemente derivado de expectativas no cumplidas o intereses divergentes. La presencia de la tercera figura femenina podría aludir a las convenciones sociales y el papel de los observadores en este tipo de situaciones. El ambiente lujoso, paradójicamente, acentúa la frialdad y la falta de calidez emocional en la interacción.