gericault envy Jean Louis Andre Theodore Gericault (1791-1824)

Descripción del cuadro de Theodore Géricault "Retrato de una loca" (La loca)

Durante siglos, el tema de la privación de la cordura ha atraído a muchos artistas. El cuadro de la loca fue realizado por Théodore Géricault en 1822. Agitado por la premonición de su muerte inminente, Géricault plasma sus experiencias en este lienzo.

La enfermedad mental grave o la pérdida de la cordura es como la muerte en el sentido espiritual. El cuadro representa a una mujer que hace tiempo sufrió este destino. Sus pensamientos vagan lejos de la tierra, desconocidos para una persona sana. Su mente ya no percibe la línea entre la realidad y la ilusión.

Su aspecto recuerda al espectador su enfermedad. La ropa de hospital es la prueba de que la heroína está en una institución para dementes. Debajo de una gorra blanca sobresalen mechones de pelo gris, un rostro picado por profundas líneas de arrugas. Su piel, con una pizca de amarillamiento malsano, abraza sus pómulos delineados y su frente alta. Su mirada carece de expresión y vida, aunque sus ojos, ligeramente hinchados, brillan febrilmente. La apariencia de una sonrisa puede verse en sus labios. Tal vez ahora una mente insana está jugando con ella.

En el pasado, Theodore Géricault pintaba en estilo romántico, pero ¿qué le empujó a crear un lienzo de este tipo? Incorporó su propio miedo a perder la cabeza a la imagen de la infeliz loca. Esto explica su sentido de compasión por la heroína, por su estado mental problemático y rebelde, y el deseo de Géricault de transmitir al espectador la delgada línea que separa a la persona sana de la enferma mental.

A petición de su amigo, el médico de la clínica psicológica, Géricault creó una serie de retratos de locos. La idea principal de estos cuadros era expresar no las manifestaciones externas de las enfermedades mentales progresivas, sino las experiencias interiores de los enfermos.