Vasily Perov – Savoyard
Ubicación: The State Tretyakov Gallery, Moscow (Государственная Третьяковская галерея).
На эту операцию может потребоваться несколько секунд.
Информация появится в новом окне,
если открытие новых окон не запрещено в настройках вашего браузера.
Для работы с коллекциями – пожалуйста, войдите в аккаунт (abrir en nueva ventana).
Поделиться ссылкой в соцсетях:
No se puede comentar Por qué?
En esta obra, el autor retrata a un joven recostado contra una pared de piedra rugosa y fría. El muchacho, vestido con ropas desgarradas y sucias –una camisa desabrochada, chaleco raído y pantalones remendados– parece sumido en un sueño profundo o quizás en un estado de agotamiento extremo. Un grueso abrigo de piel le cubre parcialmente los hombros, sugiriendo el frío ambiente que lo rodea. Sus zapatos están rotos y gastados, evidenciando una vida de privaciones.
La paleta cromática es terrosa y apagada, dominada por tonos marrones, grises y ocres, reforzando la sensación de miseria y abandono. La luz incide sobre el rostro del niño, resaltando sus facciones delicadas pero demacradas, así como las marcas de suciedad en su piel. Sus ojos están cerrados y su boca ligeramente entreabierta, transmitiendo una vulnerabilidad conmovedora.
En primer plano, se observa un sombrero viejo y deteriorado que descansa a sus pies, junto con lo que parece ser un instrumento musical –posiblemente un violín o similar– apoyado contra la pared. Este objeto sugiere una posible ocupación del joven como músico callejero, aunque su estado actual impide determinar si aún puede ejercerla.
El fondo es difuso y poco definido, mostrando apenas algunos edificios distantes y sombras que acentúan el aislamiento del personaje. La composición se centra completamente en la figura del niño, enfatizando su soledad y desamparo.
La pintura evoca una fuerte carga emocional, invitando a la reflexión sobre las condiciones de vida de los niños más vulnerables y marginados de la sociedad. Se percibe un subtexto crítico hacia la desigualdad social y la falta de oportunidades para aquellos que se encuentran en situación de pobreza. La representación no idealiza al personaje; por el contrario, muestra su realidad con crudeza y realismo, buscando generar empatía y conciencia en el espectador. El gesto del sueño o inconsciencia puede interpretarse como una forma de escape ante las dificultades de la vida cotidiana, o incluso como un presagio de un futuro incierto.