Large masquerade in 1722 on the streets of Moscow with the participation of Peter I and Romodanovsky JF Romodanovsky Vasily Ivanovich Surikov (1848-1916)
Análisis de la pintura La escena representada es un desfile o celebración pública que tiene lugar en una calle urbana cubierta de nieve. El foco central lo ocupa una figura sentada en un carruaje ricamente adornado, ataviada con vestimentas suntuosas y una corona, sugiriendo un personaje de alta alcurnia, posiblemente un gobernante o miembro de la realeza. El individuo porta un cetro, reforzando esta idea de autoridad. Lo inusual del cortejo reside en los animales que tiran del carruaje: osos. Estos no son meros caballos decorados, sino osos reales, controlados por figuras masculinas a su lado. Esta peculiar elección introduce una fuerte carga simbólica. Los osos, tradicionalmente asociados con la fuerza bruta y el poder salvaje, podrían representar tanto la dominación sobre la naturaleza como un elemento de excentricidad o incluso intimidación. El entorno urbano es sencillo, con edificios modestos que sugieren una ciudad rusa antigua. La multitud que bordea la calle es variada en cuanto a vestimenta, aunque predominan ropas tradicionales y abrigos pesados, indicando el clima frío. Se observa un grupo de figuras acompañando al carruaje, posiblemente cortesanos o guardias. La paleta de colores es apagada, con tonos fríos que enfatizan la atmósfera invernal. El uso del color rojo en las vestimentas del personaje principal atrae inmediatamente la atención y subraya su importancia. En cuanto a los subtextos, la pintura parece explorar la relación entre el poder, la tradición y lo extraordinario. La presencia de osos como animales de tiro puede interpretarse como una demostración de control absoluto por parte del gobernante sobre todos los aspectos de la vida, incluyendo la naturaleza misma. También podría aludir a rituales o costumbres poco comunes destinados a impresionar o someter a la población. El contraste entre el lujo del carruaje y las vestimentas del personaje principal con la sencillez del entorno urbano sugiere una marcada diferencia social y un posible distanciamiento entre la élite gobernante y el pueblo. La escena, en su conjunto, transmite una sensación de teatralidad y artificialidad, como si se tratara de una puesta en escena cuidadosamente orquestada para proyectar una imagen específica de poder y autoridad.
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Large masquerade in 1722 on the streets of Moscow with the participation of Peter I and Romodanovsky JF Romodanovsky — Vasily Ivanovich Surikov
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Comentarios: 4 Ответы
Петр I умер в 1725 году в 1772 году правила Екатерина II
Исправлено, зафиксировано тут: http://f.gallerix.ru/viewtopic.php?f=19&t=135
КЛАСС! СПАСИБО!!!
ммм
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La escena representada es un desfile o celebración pública que tiene lugar en una calle urbana cubierta de nieve. El foco central lo ocupa una figura sentada en un carruaje ricamente adornado, ataviada con vestimentas suntuosas y una corona, sugiriendo un personaje de alta alcurnia, posiblemente un gobernante o miembro de la realeza. El individuo porta un cetro, reforzando esta idea de autoridad.
Lo inusual del cortejo reside en los animales que tiran del carruaje: osos. Estos no son meros caballos decorados, sino osos reales, controlados por figuras masculinas a su lado. Esta peculiar elección introduce una fuerte carga simbólica. Los osos, tradicionalmente asociados con la fuerza bruta y el poder salvaje, podrían representar tanto la dominación sobre la naturaleza como un elemento de excentricidad o incluso intimidación.
El entorno urbano es sencillo, con edificios modestos que sugieren una ciudad rusa antigua. La multitud que bordea la calle es variada en cuanto a vestimenta, aunque predominan ropas tradicionales y abrigos pesados, indicando el clima frío. Se observa un grupo de figuras acompañando al carruaje, posiblemente cortesanos o guardias.
La paleta de colores es apagada, con tonos fríos que enfatizan la atmósfera invernal. El uso del color rojo en las vestimentas del personaje principal atrae inmediatamente la atención y subraya su importancia.
En cuanto a los subtextos, la pintura parece explorar la relación entre el poder, la tradición y lo extraordinario. La presencia de osos como animales de tiro puede interpretarse como una demostración de control absoluto por parte del gobernante sobre todos los aspectos de la vida, incluyendo la naturaleza misma. También podría aludir a rituales o costumbres poco comunes destinados a impresionar o someter a la población. El contraste entre el lujo del carruaje y las vestimentas del personaje principal con la sencillez del entorno urbano sugiere una marcada diferencia social y un posible distanciamiento entre la élite gobernante y el pueblo. La escena, en su conjunto, transmite una sensación de teatralidad y artificialidad, como si se tratara de una puesta en escena cuidadosamente orquestada para proyectar una imagen específica de poder y autoridad.