Moonlit Night. Highway. 1897-1898 Isaac Ilyich Levitan (1860-1900)
Isaac Ilyich Levitan – Moonlit Night. Highway. 1897-1898
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Pintor: Isaac Ilyich Levitan
El cuadro fue pintado en 1897. El artista comprendió el encanto de la naturaleza amable. Su belleza es transparente y su encanto está impregnado de una tristeza especial. Su pintura nos causa una impresión especial. Es muy simple y natural, pero está en esta extraordinaria sofisticación. Es importante que para esta sofisticación Levitan no puso ningún esfuerzo. No sentimos ningún artificio especial.
Descripción del cuadro de Isaac Levitan "Una noche de luna".
El cuadro fue pintado en 1897.
El artista comprendió el encanto de la naturaleza amable. Su belleza es transparente y su encanto está impregnado de una tristeza especial. Su pintura nos causa una impresión especial. Es muy simple y natural, pero está en esta extraordinaria sofisticación. Es importante que para esta sofisticación Levitan no puso ningún esfuerzo. No sentimos ningún artificio especial. Surgió por sí mismo.
En los últimos cuadros de Levitan se nota la mano de un maestro virtuoso.
El cuadro representa el tiempo, bastante pensativo y realmente sombrío. No podemos ver la luna, sólo ilumina la carretera. Por la naturaleza de la iluminación podemos adivinar que la luna no es brillante, sino pálida. El cielo no es tan oscuro como uno podría pensar. Brilla con los reflejos de la luz de la luna. La luz y la oscuridad se entrelazan en el cielo, dándole un encanto especial.
A los lados de la carretera se alzan los increíblemente esbeltos abedules. Sus troncos son prácticamente blancos con sólo ligeros matices de gris. A lo lejos se pueden distinguir ligeramente pequeñas casas. Se puede suponer que allí hay un pueblo. El camino iluminado por la luna es, sin duda, un agradable paseo nocturno. Los espectadores de este cuadro sólo quieren pasear por él, admirando ese maravilloso cielo, sumergidos en esa maravillosa atmósfera de crepúsculo solemne.
Levitan utilizó magistralmente los colores. Todos los colores son bastante fríos, como si fueran transparentes. La naturaleza representada es bastante ordinaria, pero a la luz de la luna que cae sobre ella, algunos mundos se reflejan de forma extraña. Los árboles y la carretera parecen ser de alguna manera inusuales y casi fuera de este mundo, pero al mismo tiempo tan nativos y familiares como sea posible.
La maestría de Levitan - para representar paisajes familiares para absolutamente todo el mundo de una manera completamente diferente. Podía encontrar algo especial en lo ordinario, sentir su nuevo sonido y transmitirlo a los espectadores de sus obras.
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Comentarios: 1 Ответы
мощно!
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La obra presenta una carretera que se extiende hacia un punto de fuga distante bajo el resplandor tenue de la luz lunar. El cielo nocturno domina la composición, ejecutado en tonos oscuros y fríos de azul y gris, con destellos sutiles que sugieren la presencia de estrellas. La paleta es restringida, enfatizando una atmósfera melancólica y solitaria.
A ambos lados del camino se alzan filas de árboles altos y delgados, sus troncos blancos contrastando levemente con las sombras profundas de su follaje. Los árboles no están representados con gran detalle; más bien, son formas alargadas que contribuyen a la sensación de profundidad y misterio. La pincelada es visible, con trazos amplios y expresivos que sugieren movimiento y una cierta inestabilidad visual.
El camino en sí mismo es un elemento central. Su superficie irregular y oscura sugiere uso y el paso del tiempo. Las sombras proyectadas por los árboles crean patrones complejos que añaden dinamismo a la escena. La ausencia de figuras humanas o animales intensifica la sensación de aislamiento y quietud.
Subyacentemente, la pintura parece explorar temas relacionados con la soledad, la introspección y la fugacidad de la existencia. El camino puede interpretarse como una metáfora del viaje de la vida, mientras que la noche representa lo desconocido y los aspectos ocultos de la psique humana. La luz lunar, aunque tenue, ofrece un rayo de esperanza o guía en medio de la oscuridad. Existe una fuerte carga emocional transmitida a través de la atmósfera sombría y el uso limitado del color, evocando sentimientos de nostalgia y reflexión. La obra no busca representar una realidad objetiva, sino más bien capturar un estado de ánimo particular y transmitir una experiencia subjetiva.