El soberano de Niccolò Machiavelli, análisis Traductor traducir

El Príncipe (traducción al inglés de El Príncipe) fue escrito por Niccolò Machiavelli y publicado en 1532. La dedicatoria de Maquiavelo, con el título "Niccolò Machiavelli to the Magnificent Lorenzo de’ Medici", es una carta de Lorenzo de’ Medici, que era el sobrino de Giovanni de’ Medici (Leo X) y se convirtió en duque de Urbino en 1516. Maquiavelo ofrece su libro con su modestia característica, señalando que es estilísticamente simple e indigno de su audiencia. Maquiavelo describe su libro como un resumen de su "comprensión de las hazañas de los grandes hombres", diseñado para ayudar a Lorenzo de ’Medici a alcanzar la prominencia como príncipe.

Maquiavelo comienza con una breve defensa de por qué él, un mero ciudadano, debería saber más sobre el arte de gobernar que los gobernantes. Utiliza una metáfora para justificarse: una persona parada en una montaña ve mejor el paisaje debajo, y una persona parada debajo ve mejor la montaña. De manera similar, escribe Maquiavelo, “para comprender completamente la naturaleza de los hombres, uno debe ser un príncipe, y para comprender completamente la naturaleza de los príncipes, uno debe ser un ciudadano común”. Oculta en esta declaración está la idea de que el ojo imparcial del observador es una guía más confiable que la experiencia práctica y el mejor medio para perfeccionar el arte de la administración.

La dedicatoria le da al lector una idea de la audiencia a la que se dirige Maquiavelo. Aunque el libro tiene un tono científico, no está destinado a científicos. "El Soberano" está destinado a asesorar, instruir e influir en las mentes de los gobernantes. Inicialmente, era una especie de guía práctica para los aspirantes a príncipes. Solo más tarde, The Sovereign llegó a ser considerado como un importante tratado de filosofía política.

Maquiavelo escribió El Príncipe como una guía práctica para el gobierno (aunque algunos estudiosos sostienen que el libro pretendía ser una sátira y, de hecho, una guía sobre cómo no gobernar). Este objetivo es obvio desde el principio: la dedicación del libro a Lorenzo de’ Medici, el gobernante de Florencia. El "soberano" no es particularmente teórico o abstracto; su prosa es simple y su lógica directa. Estos rasgos enfatizan el deseo de Maquiavelo de dar consejos prácticos y fácilmente comprensibles.

Los primeros dos capítulos describen el alcance del libro. En The Sovereign, estamos hablando de regímenes autocráticos, no republicanos. El primer capítulo define los diversos tipos de principados y príncipes; esto crea un esquema para el resto del libro.

El tercer capítulo detalla cómo mantener principados compuestos, es decir, principados que se han creado recientemente o se han anexado a otro poder, de modo que el príncipe no esté familiarizado con las personas que gobierna. El Capítulo III también presenta los principales temas del libro —política de poder, asuntos militares y buena voluntad popular— de manera concisa.

Los capítulos IV a XIV forman el corazón del libro. Maquiavelo brinda consejos prácticos sobre una variedad de temas, incluidas las ventajas y desventajas de varios caminos hacia el poder, cómo adquirir y retener nuevos estados, cómo lidiar con rebeliones internas, cómo forjar alianzas y cómo mantener un ejército fuerte. Los puntos de vista de Maquiavelo sobre el libre albedrío, la naturaleza humana y la ética están implícitos en estos capítulos, pero estas ideas no aparecen explícitamente como temas de discusión hasta más adelante.

Los capítulos XV a XXIII están dedicados a las cualidades del propio príncipe. En general, esta discusión se lleva a cabo de acuerdo con la visión fundacional de Maquiavelo de que los ideales elevados conducen a un mal gobierno. Esta suposición es especialmente cierta en el caso de las virtudes personales. Ciertas virtudes pueden ser admiradas por sí mismas, pero si un príncipe actúa de acuerdo con la virtud, a menudo perjudica al estado.

Asimismo, algunos vicios pueden estar mal vistos, pero los malos actos a veces son necesarios para el bien del estado. Maquiavelo combina esta línea de razonamiento con otra: el tema de que ganarse el favor de la población es la mejor forma de mantenerse en el poder. Así, la apariencia de la virtud puede ser más importante que la verdadera virtud, que puede verse como un obstáculo.

Las secciones finales de The Sovereign vinculan el libro a un contexto histórico específico: la fragmentación de Italia. Maquiavelo relata su historia y explicación de los fracasos de los gobernantes italianos del pasado, y concluye con una súplica apasionada a los futuros gobernantes de la nación. Maquiavelo argumenta que solo Lorenzo de’ Medici, a quien está dedicado el libro, puede restaurar el honor y el orgullo de Italia.

Información biográfica e histórica.

Niccolò Machiavelli nació el 3 de mayo de 1469 en Florencia, Italia, y su infancia transcurrió sin incidentes, recibió una formación humanista, común a los jóvenes de la clase media del Renacimiento. También estudió matemáticas comerciales durante dos años y luego trabajó en Roma durante los siguientes siete años para un banquero florentino. Después de regresar a Florencia en 1494, fue testigo de la expulsión de la familia Medici, los déspotas oligárquicos que habían gobernado Florencia durante décadas, y el ascenso al poder de Girolamo Savanorola, un fanático religioso dominicano que poco después tomó el poder en la región.

Italia de esa época se convirtió en el escenario de un intenso conflicto político. Las ciudades-estado de Florencia, Milán, Venecia y Nápoles, así como el papado, Francia, España y el Sacro Imperio Romano Germánico, lucharon por el control de Italia. Cada uno de estos poderes intentó seguir una estrategia de enfrentar a otros poderes entre sí, pero también recurrieron a métodos menos nobles como el chantaje y la violencia.

El mismo año que Maquiavelo regresó a Florencia, Italia fue invadida por Carlos VIII de Francia, la primera de varias invasiones francesas que tendrían lugar durante la vida de Maquiavelo. Estos acontecimientos influyeron en la actitud de Maquiavelo hacia el gobierno, proporcionando el telón de fondo para sus subsiguientes llamamientos apasionados a la unidad italiana.

Debido a que Savanorola era crítico con el liderazgo de la iglesia, el Papa Alejandro VI terminó su reinado excomulgándolo en 1497. Al año siguiente, a la edad de veintinueve años, Maquiavelo ingresó al gobierno florentino como jefe de la Segunda Cancillería y Secretario del Consejo de los Diez. para la Guerra. Como canciller, fue enviado a Francia en misión diplomática en 1500. Se reunía periódicamente con el Papa Alejandro y el recién coronado rey Luis XII.

A cambio de la anulación del matrimonio, Luis ayudó al Papa a confirmar a su hijo, César Borgia, como duque de Romaña. Las intrigas de estos tres hombres influyeron en el pensamiento político de Maquiavelo, pero fue Borgia quien hizo más para dar forma a la opinión de Maquiavelo sobre el liderazgo. Borgia era un político astuto, cruel y vicioso, y mucha gente lo despreciaba. Sin embargo, Maquiavelo creía que Borgia poseía los rasgos necesarios para cualquier líder que buscara unificar Italia.

En 1500, Maquiavelo se casó con Marietta di Lodovico Corsini, con quien tuvo seis hijos. Tres años después, el Papa Alejandro VI contrajo malaria y murió. El sucesor de Alejandro VI murió menos de un mes después de asumir el cargo y se eligió a Julio II, enemigo de los Borgia. Julio II luego desterró a Borgia a España, donde murió en 1506.

Mientras tanto, Maquiavelo ayudó a crear y entrenar una milicia civil florentina para reducir la dependencia de Florencia de los mercenarios. Más tarde ese año, se desempeñó como diplomático florentino bajo el Papa Julio, cuyo comportamiento como "papa guerrero" observó de primera mano. En 1512, la familia Medici recuperó el control de Florencia y Maquiavelo fue destituido de su cargo.

Un año después, fue acusado falsamente de participar en una conspiración para restaurar la república, estuvo en prisión durante tres semanas y fue torturado en el potro. Se fue de Florencia a la tranquila ciudad de Sant’Andrea y decidió dedicarse a la escritura. En 1513 comenzó a escribir Discursos sobre los primeros diez libros de Titus Livius, un libro sobre estados gobernados por ciudadanos políticamente activos. No se completó hasta 1521, principalmente porque interrumpió su trabajo sobre los Discursos para escribir El Príncipe.

Maquiavelo deseaba desesperadamente volver a la política. Uno de sus objetivos al escribir El Príncipe era ganarse el favor de Lorenzo de’ Medici, entonces gobernador de Florencia y el hombre a quien está dedicado el libro; Maquiavelo esperaba obtener un puesto como asesor del gobierno florentino. Pero los Medici aceptaron el libro con indiferencia, y Maquiavelo no recibió una invitación para el puesto de oficial. La reacción del público ante el "Sovereign" también fue indiferente al principio. Pero gradualmente, a medida que se difundió la información, el libro comenzó a ser criticado como inmoral, malvado y profano.

Además de Los discursos, Maquiavelo escribió El arte de la guerra y la comedia Mandrake. Después de la muerte prematura de Lorenzo en 1519, su sucesor, Giulio, encargó a Maquiavelo que escribiera la Historia de Florencia, así como varias obras diplomáticas menores. Maquiavelo también escribió La vida de Castruccio Castracani en 1520 y la comedia Clisia. En 1526, Giulio de Medici (ahora Papa Clemente VII), ante la insistencia de Maquiavelo, creó una comisión para estudiar las fortificaciones de Florencia e incluyó a Maquiavelo en ella.

En 1527, los errores diplomáticos del papa Medici llevaron al saqueo de Roma por parte de los mercenarios de Carlos V. Los florentinos expulsaron a su gobernante Medici y Maquiavelo intentó reasumir el cargo que había abandonado hacía tanto tiempo. Pero su reputación se interpuso en el camino de sus ambiciones. Ahora estaba demasiado asociado con los Medici y la república lo rechazó. Pronto la salud de Maquiavelo comenzó a fallarle y murió unos meses después, el 21 de junio de 1527.

Contexto filosófico

El aspecto más revolucionario de The Sovereign es su separación de la política y la ética. La teoría política clásica ha asociado tradicionalmente la ley política con una ley moral superior. En contraste, Maquiavelo argumenta que las acciones políticas siempre deben verse a la luz de sus consecuencias prácticas, no de algunos ideales elevados.

Otra característica sorprendente de The Sovereign es que es mucho menos teórico que la literatura sobre teoría política que lo precedió. Muchos pensadores anteriores formularon ideas hipotéticas sobre estados ideales o naturales, pero Maquiavelo recurrió pragmáticamente a hechos históricos para justificar al "Príncipe" en situaciones reales. El libro está dedicado al actual gobernante de Florencia, y está claro que Maquiavelo quería que las personas influyentes de su tiempo tomaran en serio su consejo. Esta es una guía práctica para el gobernante, no un tratado filosófico abstracto.

El libro de Maquiavelo también es diferente porque trata sobre el libre albedrío. Los pensadores medievales y renacentistas a menudo recurrían a la religión oa los autores antiguos en busca de explicaciones sobre plagas, hambrunas, invasiones y otras calamidades; creían que la prevención real de tales desastres estaba más allá del poder del hombre. En El Príncipe, cuando Maquiavelo afirma que los humanos son capaces de protegerse de la desgracia, expresa una confianza extraordinaria en el poder de la autodeterminación humana y afirma su creencia en el libre albedrío en oposición al destino divino.

Desde su primera publicación, las ideas de Maquiavelo se han simplificado y vilipendiado en exceso. Su pensamiento político suele -e injustamente- definirse exclusivamente en términos de "el Soberano". El adjetivo "maquiavélico" se usa para significar "manipulador", "engañoso" o "despiadado". Pero los Discursos de Maquiavelo, una obra mucho más extensa y desarrollada que El Príncipe, revela temas republicanos de patriotismo, virtud cívica y participación abierta en la vida política.