"¿Quién teme a la muerte?" de Nnedi Okorafor
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«Who Fears Death», publicada en 2010 y escrita por Nnedi Okorafor, es una novela de ciencia ficción postapocalíptica ambientada en una versión futura de Sudán. En este futuro, los Nuru, de piel clara, han esclavizado a los Okeke, de piel oscura. La novela sigue a Onyesonwu (Onye), hija de una mujer Okeke violada por un hombre Nuru. Onye pronto descubre que su padre biológico es un poderoso hechicero y que ella también ha heredado grandes poderes mágicos de su padre y su madre. La novela sigue a Onye mientras descubre sus poderes y emprende un viaje para derrotar a su padre y reescribir el Gran Libro, liberando así a los Okeke y poniendo fin a la violencia entre las dos tribus. En primera persona, Onye narra toda la novela (excepto los últimos capítulos), contando su historia a un narrador invisible mientras espera su futura ejecución.
Sinopsis La primera parte comienza «in medias res», en el funeral de su padre adoptivo. Onye, afligida por el dolor y aún sin entrenamiento como hechicera, coloca su mano sobre el cuerpo de su padre y accidentalmente lo devuelve a la vida momentáneamente antes de que un hombre llamado Aro la detenga. Onye nos lleva de vuelta a su infancia; fue criada en el desierto, sola con su madre, hasta que tuvo seis años; luego se establecieron en Jwahir, un pueblo muy al este del Reino de los Siete Ríos y, por lo tanto, donde los Okeke viven libremente. Sin embargo, Onye es «Ewu», lo que significa una hija mestiza de un Nuru y un Okeke, y por lo tanto todavía está excluida por la sociedad Jwahir. Pronto conoce al herrero del pueblo, Fadil, la única persona que no la trata de manera diferente; poco después, Fadil se casa con su madre, Najeeba. A los once años, para ser aceptada en la sociedad, se somete al Undécimo Rito, o circuncisión femenina, para gran consternación de sus padres. Además, someterse al Rito permite que su padre biológico la encuentre y comience a acosarla y atormentarla a distancia. Sin embargo, se hace amiga íntima de las otras chicas de la ceremonia: Luyu, Diti y Binta. Casi al mismo tiempo, comienzan a sucederle cosas extrañas a Onye: desaparece brevemente durante la ceremonia y descubre que también puede transformarse en animales. Conoce a un chico, Mwita, que está aprendiendo magia con el hechicero del pueblo, el ya mencionado Aro, quien la ayuda a comprender mejor sus poderes y habilidades. Cree que aprender los Puntos Místicos (es decir, aprender a ser hechicera) la ayudará a protegerse de su padre; sin embargo, Aro se niega a enseñarle, tanto por ser niña como por ser «ewu». Sin embargo, cuando su padre enferma, Onye se desespera y ataca a Aro en el mundo espiritual, casi matándolo. Tras verla resucitar a su padre en su funeral, finalmente accede a enseñarle, creyendo que se volverá peligrosa si no aprende a controlar sus poderes. En la segunda parte, tras pasar la iniciación, Onye comienza su entrenamiento con Aro y continúa durante los cuatro años siguientes, gran parte de los cuales la novela omite. A los veinte años, Onye aprende «alu», o el arte de viajar a lugares lejanos, y Aro le muestra imágenes de la violencia del Oeste. Poco después, en el mercado, Onye oye a alguien burlándose de ella; frustrada, responde trayendo la violencia del Oeste al mercado usando sus poderes. Se da cuenta de que debe hacer algo al respecto, lo cual, según Aro, es mejor, ya que los habitantes del pueblo probablemente la expulsarán ahora, y él no podrá detenerla esta vez. Mwita, quien ahora es su novio, y sus amigos deciden acompañarla, por lo que Onye, Mwita, Luyu, Binta, Diti y Fanasi, el prometido de Diti, se embarcan en un viaje al oeste para detener al padre biológico de Onye, Daib. La tercera parte trata del viaje al oeste y las dificultades que enfrentan en el camino. Onye y Mwita tienen experiencia viviendo en el desierto.Pero para los demás, el viaje es más difícil de lo esperado; además, mientras Onye ha usado sus poderes para deshacer el Rito, permitiéndole a ella y a Mwita tener relaciones sexuales, los demás siguen atados por la magia que les impide hacerlo antes del matrimonio, lo que crea una tensión especial entre Diti y Fanasi. Una noche, al pasar cerca de un pueblo, Diti y Binta, furiosas, se escabullen al pueblo para salir a beber y coquetear con hombres; sin embargo, cuando los demás los encuentran, Onye casi es violada por un grupo de hombres que asumen que es una trabajadora sexual porque es «Ewu», y ella responde casi matándolos. Descubren que también hay gemelos en el pueblo, que resultan ser los gemelos de la Ada de Jwahir, uno de los cuales padece escoliosis; Onye intenta curarla, pero en el último minuto, la mujer lo impide, y Onye termina matándola. El siguiente pueblo que encuentran es Papa Shee; Sin embargo, apenas ponen un pie en el pueblo, un brujo consigue que el pueblo persiga a Onye por ser «Ewu». Binta intenta proteger a Onye, pero es asesinada; Onye responde cegando a todo el pueblo. Entierran a Binta a las afueras del pueblo y siguen adelante. Poco después, se encuentran con la mítica Gente Roja, una tribu nómada que vaga por el desierto oculta por una enorme tormenta de arena; mientras permanece con ellos, Onye aprende de su hechicero y aprendiz, Ssaiku y Ting, y tiene una experiencia en la que es deshecha y rehecha por el Creador. Inmediatamente después de ser revivida, Onye viaja a Durfa e intenta matar a su padre biológico, pero este la derrota y la envenena; Ting apenas puede salvarla. Mientras Ting y Ssaiku trabajan para salvar a Onye, Diti y Fanasi aprovechan la oportunidad para escabullirse y regresar a Jwahir, negándose a morir como Binta. Al acercarse al Reino de los Siete Ríos, se topan con aldeas más pequeñas y pobres donde los Okeke están ahora bajo control Nuru. Descubren que la madre de Onye, quien también posee poderes mágicos, ha estado viajando «alu» para anunciar a la gente la llegada de Onyesonwu. Así, se encuentran con Okeke oprimidos que, sin embargo, los ayudan. A medida que se acercan, se encuentran con pueblos donde los Okeke están siendo aniquilados por los hombres de Daib, y se dan cuenta de que deben poner fin a la violencia lo antes posible. Entran en Durfa y encuentran el cuartel general de Daib, que está desprotegido. Mwita usa la magia proporcionada por Ting para dejar a Daib prácticamente sin poderes, pero este muere en el proceso. Onye pone fin a la campaña de guerra asesinando a todos los varones adultos de Durfa; luego, ella y Luyu encuentran una versión especial del Gran Libro para reescribirlo. Luyu muere defendiéndose de los soldados justo cuando Onye reescribe el Libro, borrando así la creencia de que los Okeke son esclavos de los Nuru. Como se profetizó, Onye es capturada y lapidada, pero para entonces sus acciones ya han comenzado a surtir efecto. Al final de la novela,Vemos una versión alternativa de su ejecución, en la que Onye escapa como una bestia mítica que escupe fuego y vuela hacia el este, al bosque, para reunirse con Mwita. Mientras sobrevuela, Nuru, Okeke y «Ewu» coexisten abajo.
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