Breve historia de la música. Traductor traducir

La música hecha por el hombre ha dado forma a nuestro mundo durante decenas de miles de años, mucho antes del advenimiento de la escritura, quizás su pariente más tangible. Y durante miles de años, la gente ha estado tratando de descifrar nuestra respuesta a este tipo de sonido creado.

Los primeros intentos de explicar el poder de la música involucraron las ideas superpuestas de religión y magia. Como las primeras canciones. Es ahora que simplemente podemos descargar música a nuestro dispositivo, y a los primeros fans no les quedaba más que estar presentes personalmente cuando la interpretaban músicos en directo. La pieza musical más antigua que se conserva es el himno a la diosa mesopotámica de la fertilidad, Nikkal, escrito en cuneiforme en una tablilla de arcilla que data de alrededor del 1400 a.

En el antiguo Egipto, India, China, Grecia y Mesopotamia, las canciones que cumplían funciones ceremoniales importantes se conservaron de manera similar en tablillas de arcilla, papiro y, finalmente, en papel. Como gran parte de la música moderna, estas canciones antiguas alababan a los dioses, invocaban poderes sobrenaturales y deificaban a los que estaban en el poder.

Aunque los primeros propósitos de la música fueron probablemente el apaciguamiento y la celebración, las ideas sobre el lugar de la música en la cultura de una civilización variaban mucho.

En la antigua Grecia, un matemático del siglo VI a. Pitágoras afirmó que la música es un reflejo de la armonía cósmica. En su tendencia hacia la simetría y la unidad, argumentó, no es tan diferente de las matemáticas.

Un siglo después, Platón, y luego su alumno Aristóteles, rechazaron esta idea de armonía cósmica y argumentaron que los verdaderos propósitos de la música eran sociales, educativos y personales. Platón argumentó que la música es una excelente herramienta pedagógica y necesaria para el "correcto" funcionamiento de la sociedad.

Por cierto, la idea de la música como influencia corruptora se puede rastrear incluso entonces. Platón argumentó que la música "incorrecta" puede convertirse en una puerta de entrada a la decadencia moral. Incluso escribió que la influencia cultural de la nueva música que se hizo popular en Grecia durante las guerras persas fue la culpable del levantamiento de la generación más joven contra la autoridad y el malestar social en Atenas. (¿No es asombroso cómo las ideas resuenan a través de los milenios?)

En China, Confucio y otros pensadores dividieron la música en formas, algunas de las cuales se consideraban vernáculas y menos valiosas. En India, el Natya Shastra, compilado por el sabio Bharata Muni entre el 200 a. C. y el 200 d. C., se dice que la buena música puede inducir un estado de éxtasis divino en el oyente, sentando así las bases para una tradición de música devocional que continúa para este día.

La idea de la música satánica se remonta a la era de las Cruzadas. Una forma cada vez más violenta de cristianismo echó raíces en Europa y el Levante cuando se libraron guerras entre los guerreros de Cristo y los guerreros del Islam en los siglos XI y XIII. En ambos lados, la música creada y escuchada para el placer sensual fue declarada "vulgar" (de hecho, esta práctica nunca desapareció, en diferentes épocas y en diferentes regiones).

Se creía que ciertas progresiones de acordes estaban asociadas con el mal y Satanás (otro eco que ha llegado hasta nuestros días). Algunos de estos arreglos, incluido el infame "Diabolus in Musica" o "Devil in Music", todavía se usan hoy en día en el horror y el heavy metal, y de otras maneras, con la ayuda de esta inquietante combinación de acordes e intervalos.

Mientras tanto, en el mundo islámico, los sufíes desafiaron las prohibiciones explícitas e implícitas de la música y desarrollaron una filosofía musical de cuerpo y alma que todavía prospera hoy en día en el subcontinente indio, el Levante y África. A través de canciones sobre la paz, el amor y la convivencia, estos místicos alientan a las personas a usar la música para conectarse con Dios.

Sin embargo, durante todo este tiempo, el arte elevado se dividió aproximadamente en dos categorías: piedad o imitación de la naturaleza.

Todo cambió en el Renacimiento, cuando los artistas y filósofos del siglo XV comenzaron a argumentar que el arte elevado también podía tener un objetivo personal: ser un medio de autoexpresión del artista y un reflejo resonante de la vida cotidiana. Después de eso, se abrieron las cerraduras. Cada generación creó sus propios riffs. Los ancianos se quejaron del ruido.

“Demasiado fuertemente sazonado; laberintos infranqueables; extraños vuelos del alma”: estos fueron los veredictos de algunos críticos austriacos modernos sobre las composiciones del joven Wolfgang Amadeus Mozart (nacido en 1756).

“Deplorable… un afrodisíaco de olor rancio. Promueve… reacciones negativas y destructivas en los jóvenes”: Esto es lo que dijo Frank Sinatra (nacido en 1915) sobre Elvis Presley (nacido en 1935).