Planchado de mujeres, Edgar Degas:
análisis
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Descripción
Nombre: Planchado de mujeres (Repasseuses) (1884)
Artista: Edgar Degas (1834-1917)
Medio: óleo y pastel sobre lienzo.
Tipo: Pintura de género
Movimiento: Impresionismo
Ubicación: Musée d’Orsay, Paris
Para una interpretación de otras imágenes de los siglos XIX y XX, ver: Análisis de pinturas modernas (1800-2000).
Fondo
Edgar Degas, como su amigo. Edouard Manet (1832-83), fue un clasicista en ropa impresionista. Su entrenamiento en el Ecole des Beaux-Arts y su frecuente estudio de Viejos maestros en el Museo Louvre le dio un gusto y talento para pintura de figura, que refinó en una amplia gama de bailarines de ballet, caballos de carreras, desnudos femeninos e imágenes de mujeres trabajadoras. Estas obras figurativas solo cimentaron la reputación de Degas como uno de los mejores pintores de género del siglo XIX Su creencia en clasicismo, junto con su aversión a la pintura espontánea con plein air, uno de los fundamentos características del impresionismo – lo distingue de otros miembros del grupo impresionista. Aun así, todavía puede ser clasificado entre los impresionistas, debido a su gusto por los temas modernos, su pincel suelto y su constante búsqueda para capturar el momento fugaz, aunque a través de una observación cuidadosa y una pintura precisa en el estudio, del cual Women Ironing es Un ejemplo perfecto. Además, Degas participó en 7 de 8 de los Exposiciones impresionistas en París, entre 1874 y 1886. Ver también: Pintores impresionistas: biografías (c. 1840-1920).
NOTA: Las obras importantes de Degas incluyen: La familia bellelli (1858-67) Carrera de caballos frente a los stands (1866-8), La clase de ballet (1871-4), Ajenjo (1876) Retratos en la Bolsa (1879) y Mujer peinándose (1890)
Woman Planchado (también conocido como The Laundresses o Les Repasseuses) en el Musee d’Orsay es una de una serie de cuatro variaciones de esta imagen, con sus dos lavanderas, una bostezando y la otra planchando, que es parte de una serie más grande de mujeres en lavanderías que Degas comenzó en 1869. Durante los siguientes 25 años más o menos, continuó explotando este tema que logró variar cambiando la pose, el escenario y, sobre todo, la iluminación (el juego de luces), que él diversificado tanto como sea posible mediante iluminación artificial, transparencias, reflejos del lavado acostado o secado sobre cuerdas del techo. El tratamiento de Degas de este tema refleja la realismo esa era la moda en la literatura de la época, en libros como Manette Salomon (1867), de los hermanos Goncourt (1867), y sobre todo L’Assommoir (1877) de Emile Zola, que describe en detalle la ropa perteneciente a Gervaise, donde "Clemence estaba planchando la camisa de su trigésimo quinto hombre". Véanse también las pinturas de género de trabajadores rurales de Millet, que incluyen: Los espigadores (1857) y el Hombre con una azada (1862). Para más, ver: Realismo al Impresionismo (c. 1830-1900).
Siguiendo las tradiciones de Pintura realista promovido por Honore Daumier (1798-1879), Women Ironing es una instantánea poco sentimental de la clase trabajadora parisina: una que le da a Degas una amplia oportunidad para demostrar sus talentos observacionales y pictóricos. Con una habilidad consumada, Degas capta el momento fugaz, aunque es cierto que gran parte de la preparación dibujar yace detrás del resultado aparentemente espontáneo: como admitió una vez, "ningún arte fue menos espontáneo que el mío". La primera lavandera, una gran moza, está bostezando y estirándose, con una mano sosteniendo su cabeza y la otra, una botella de vino. Frente a ella no hay ni ropa ni plancha. Ella obviamente está exhausta y abrumada por el calor. Su compañera continúa cansada en su tarea. Los gestos se observan maravillosamente. Nunca un bostezo ha aparecido más natural; nunca se ha presionado un hierro hacia abajo con tanta verosimilitud; y el contraste entre el movimiento elevado de la primera mujer y el movimiento descendente de su colega aumenta el efecto de cada una.
El impacto realista se ve reforzado por el lienzo granulado y sin preparación, mientras que el color Por deliciosa que sea, no embellece a las mujeres trabajadoras más allá de la credulidad. Además, Degas ha rozado los toques desmoronados del pastel de una manera que mantiene un borde de aspereza al permitir que se vea el lienzo en bruto y, por lo tanto, hace que los colores pastel vibren.
Para 1884, el grupo impresionista comenzaba a dispersarse. Manet ya estaba muerto Monet (1840-1926) se había mudado a Giverny, Sisley (1839-99) a Fontainebleau, y Pissarro (1830-1903) a Eragny. Renoir Estaba aquí y allá. Mientras tanto, Degas continuó trabajando en París, produciendo algunas de sus mejores pinturas de género, y una gama de colores increíblemente coloridos. dibujos en colores pastel de bailarines y otras figuras. En 1886, exhibió una impresionante serie de pinturas de mujeres en el baño, que Renoir describió como "una pieza del Partenón", aludiendo a la escultura griega ampliamente reconocida como la principal. arte de la antiguedad clasica.
NOTA: Para ver la historia detrás del impresionismo francés y el grupo de artistas parisinos que lo crearon, vea nuestra serie de 10 partes, que comienza: Impresionismo: orígenes, influencias.
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