Francisco Jose De Goya y Lucientes – The Straw Manikin
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En el lienzo se observa un grupo de cuatro mujeres jóvenes que sostienen una tela pálida y extendida. Sobre esta tela, suspendido en el aire, se encuentra una figura masculina vestida con ropas oscuras y llamativas: pantalones a rayas y un chaleco oscuro. La figura parece ser una especie de espantapájaros o maniquí, aunque su rostro presenta rasgos humanos definidos, lo que genera ambigüedad.
El entorno es un paisaje natural difuso, con vegetación exuberante y una construcción distante que sugiere una residencia señorial. El cielo está cubierto por nubes grises, creando una atmósfera sombría y melancólica. La iluminación es desigual; las figuras femeninas están más claramente definidas que el espantapájaros y el fondo, lo cual centra la atención en ellas y en su acción.
La composición sugiere un juego o ritual inusual. Las mujeres parecen estar colaborando para mantener al hombre suspendido, pero sus expresiones faciales son difíciles de interpretar: no se percibe alegría evidente ni temor, sino más bien una seriedad contenida. La figura del espantapájaros introduce un elemento perturbador y grotesco en la escena. Su posición precaria y su apariencia artificial contrastan con la vitalidad aparente de las mujeres.
Subtextualmente, la obra podría aludir a la fragilidad de la condición humana, la ilusión de control o la representación teatral de la vida. La tela que sostienen las mujeres puede simbolizar una barrera entre el mundo real y el imaginario, o incluso representar la sociedad misma, sobre la cual se equilibra un individuo desprovisto de sustancia. El espantapájaros podría ser una metáfora de la vacuidad, la alienación o la manipulación. La atmósfera general de misterio y ambigüedad invita a múltiples interpretaciones, sugiriendo que la escena representa algo más profundo que una simple representación de un juego infantil. Existe una tensión palpable entre lo natural (las mujeres y el paisaje) y lo artificial (el espantapájaros), lo cual podría reflejar una crítica social o una reflexión sobre la naturaleza de la identidad.