Adoration of the Shepherds Peter Paul Rubens (1577-1640)

Descripción del cuadro de Peter Rubens La adoración de los pastores

El cuadro de Rubens fue el boceto final del gran retablo. Esta creación se caracteriza por un tono particular de color rojizo. También cabe destacar la textura suelta de las pinceladas magistrales del pintor.

Se nota la influencia de la pintura de Venecia en Rubens. En las obras posteriores del artista, esta manera ya no era característica.

Rubens se basó en la famosa obra maestra de Correggio. La influencia del pintor se percibe en la particular dinámica y emoción de las imágenes que crea Rubens. El pintor también adopta la organización del cuadro en forma de dos niveles.

En la cima vemos a los ángeles volando despreocupadamente. En la parte inferior se representan pastores y la propia Virgen María. Está inclinada sobre el pesebre en el que Cristo duerme plácidamente. Los tipos de campesinos son increíblemente peculiares. La iluminación es especial. Rubens parece sacar deliberadamente las figuras de la oscuridad.

Rubens consigue crear las imágenes más vívidas. Toma un tema evangélico. Pero al mismo tiempo, los personajes de su pintura son lo más vivos posible. En esta obra predominan los tonos marrones. Las figuras centrales son destacadas por el artista utilizando trajes brillantes. El azul, el rojo y el blanco son como arrancados por el artista de la oscuridad para crear acentos específicos.

Cada pincelada de Rubens es increíblemente tridimensional. Su lienzo es increíblemente espiritual. Está lleno de un humor alegre y del propio sentido del mundo del artista.

Rubens es un verdadero maestro, que consigue alejarse de la religiosidad del tema. Quieres mirar su lienzo ad infinitum. Cada detalle es importante.

Con él, el artista crea un color especial. El espectador puede sentir la particular alegría del artista. Es testigo de una escena increíblemente conmovedora y quiere compartir sus sentimientos con todos nosotros.