"La isla del obturador" de Dennis Lehane Traductor traducir

«Shutter Island», el thriller psicológico de Dennis Lehane de 2003, investiga cómo el estado mental de una persona puede moldear su perspectiva de la realidad. El prólogo comienza con un extracto del diario del Dr. Lester Sheehan fechado el 3 de mayo de 1993. Sheehan es un psiquiatra jubilado del Hospital Ashecliffe en Shutter Island, pero sigue obsesionado por la peligrosa tragedia de cuatro personas: Edward «Teddy» Daniels, Rachel Solando., Dolores Chanal, and Andrew Laeddis. Ahora que la salud de Sheehan está fallando, se siente obligado a sacar la historia a la luz.

Los acontecimientos de «Shutter Island» tienen lugar a lo largo de cuatro días en septiembre de 1954, y la novela se divide en cuatro secciones que reflejan los acontecimientos de cada día. La historia en sí sigue a Teddy Daniels, un veterano de la Segunda Guerra Mundial y actual alguacil de los EE. UU., quien es enviado a Shutter Island para investigar la desaparición de Rachel Solando, una de las pacientes de Ashecliffe. Teddy se encuentra en compañía de su nuevo compañero, Chuck Aule, un recién transferido de la oficina de Seattle de los alguaciles estadounidenses. Chuck es simpático y encantador, e inmediatamente establecen una relación. Teddy informa a Chuck sobre su caso mientras se dirigen a la isla. Teddy explica que Ashecliffe es un hospital federal reservado para criminales dementes, y todos los pacientes son enfermos mentales y peligrosos. Para hacer la situación más difícil, se avecina una tormenta tropical. La tormenta golpeará la isla a las pocas horas de su llegada y finalmente los atrapará allí durante los próximos cuatro días. Teddy y Chuck llegan al Hospital Ashecliffe y comienzan su investigación. Se encuentran con el Dr. John Cawley, el médico principal, quien explica la situación: en algún momento de la noche anterior, Rachel Solando escapó de su habitación y sigue desaparecida. Teddy y Chuck entrevistan al personal, pero la única pista que descubren sobre el paradero de Rachel es un código escrito que ella deja, al que Teddy y Chuck llaman «La Ley de los Cuatro». Esa noche, Teddy tiene sueños terribles sobre su esposa, Dolores Chanal, quien murió en un incendio en un departamento dos años antes. Su muerte sigue siendo un trauma profundo que Teddy se niega a abordar. Si bien inicialmente parece que él y Dolores tuvieron una historia de amor para toda la vida, a lo largo de la novela, Los sueños de Teddy revelan que su matrimonio se había vuelto inestable antes de su muerte debido al alcoholismo de Teddy y la enfermedad mental de Dolores. Los sueños de Teddy sirven como motivo crítico en "Shutter Island", donde los sueños revelan verdades que la mente consciente se niega a aceptar. Afortunadamente, el sueño de Teddy lo ayuda a descifrar el primer código de Rachel, que revela que hay otro paciente desaparecido en la isla: el misterioso Paciente Sesenta y Siete. Al día siguiente, los alguaciles entrevistan a los pacientes que estaban en la sesión de terapia de grupo de Rachel. La mayoría de ellos son inútiles, excepto Bridget Kearns, que escribe un mensaje de una sola palabra en el bloc de notas de Teddy: «corre». Luego, Chuck le pregunta a Teddy por qué le preguntó a cada paciente sobre un hombre llamado Andrew Laeddis. Teddy confiesa que Laeddis es el pirómano mentalmente enfermo que inició el incendio que mató a Dolores. Teddy está seguro de que está en Ashecliffe a pesar de que no hay registro de él, por lo que Chuck sugiere que revisen el cementerio para ver si podría haber muerto o no. De camino al cementerio, Teddy y Chuck encuentran otra pista de Rachel. Ha apilado rocas en montones y Teddy escribe el código numérico en su cuaderno. El clima empeora rápidamente y Teddy y Chuck tienen que refugiarse en el mausoleo. Mientras está allí, Teddy le cuenta a Chuck toda la verdad de su misión. Un recluso llamado George Noyce le contó a Teddy sobre los experimentos inhumanos e ilegales que estaban ocurriendo en Ashecliffe. Teddy ha sido enviado por un senador de los EE. UU. para investigar las afirmaciones de Noyce y exponer cualquier irregularidad. Chuck le dice a Teddy que cree que se han metido en un montaje. Teddy intenta tranquilizar a su pareja y le promete que se irán de la isla. El huracán deja a los alguaciles varados en Shutter Island. También aprenden que están atrapados en otra batalla. Cawley les dice que el campo psiquiátrico está en guerra. La vieja guardia cree que la cirugía y el confinamiento son el mejor tratamiento para los enfermos mentales, mientras que una nueva ola de pensamiento cree que las drogas psicotrópicas son el mejor medio de tratamiento. Cawley se preocupa por ambos; es psicoterapeuta y aboga por la terapia de conversación. Estas tensiones dentro del campo de la salud mental se desarrollan temáticamente a lo largo de la novela, incluso en su sorprendente conclusión. Teddy y Chuck regresan del cementerio y descubren que Rachel Solando ha reaparecido misteriosamente. Van a entrevistarla y ella confunde a Teddy con su esposo, Jim. Teddy se deja atrapar por su ilusión, pero la ilusión se rompe cuando Rachel de repente se da cuenta de que Teddy es un extraño. Ella lo ataca, lo que desencadena una de las migrañas de Teddy. Cawley le ofrece unas pastillas para aliviar el dolor y Teddy las toma en contra de su buen juicio. Tiene terribles pesadillas esa noche sobre Dolores, y la tensión del insomnio y el estrés comienzan a afectarlo. La tormenta pasa, pero ha causado daños importantes. Teddy y Chuck aprovechan la oportunidad para explorar el Pabellón C, donde se encuentran los pacientes más peligrosos. Una vez allí, Teddy y Chuck se separan: Teddy busca a Laeddis mientras Chuck intenta encontrar los archivos de los pacientes. En cambio, Teddy encuentra a George Noyce, quien le advierte que todo lo que lo rodea es un engaño elaborado por Cawley. Noyce también le dice a Teddy que Chuck trabaja para Ashecliffe. Teddy y Chuck deciden investigar el faro, que según Noyce es la sala de cirugía. En camino, Teddy baja por un acantilado para registrar otro de los códigos de Rachel, pero regresa y encuentra que Chuck no está. En este punto ha caído la noche, por lo que Teddy se refugia en una cueva. Allí conoce a la verdadera Rachel Solando, una ex doctora de Ashecliffe que se vio obligada a huir cuando descubrió los experimentos ilegales del hospital. Ella le dice a Teddy que lo han drogado y le da la lista de síntomas, muchos de los cuales ya está experimentando. Después de hablar con Rachel, Teddy regresa a Ashecliffe en busca de Chuck. En cambio, encuentra a Cawley, quien le dice que llegó solo a Shutter Island. Teddy juega con Cawley para que pueda escapar en medio de la noche, con la intención de tomar el ferry de la mañana al continente. Pero Cawley y el alcaide descubren su plan, por lo que Teddy se dirige al faro, decidido a encontrar la verdad y rescatar a Chuck. Lo único que encuentra en el faro es a Cawley, quien le dice a Teddy que en realidad es Andrew Laeddis. Construye un caso convincente y presenta al Dr. Lester Sheehan, quien ha estado fingiendo ser Chuck todo el tiempo. Cawley explica que Dolores tenía una enfermedad mental y mató a los tres hijos de Teddy, y Teddy, que en realidad es Laeddis, le disparó en el estómago. Incapaz de hacer frente a lo que había hecho, Teddy se volvió loco y fue enviado a Ashecliffe. Pero Teddy es peligroso y, a menos que se dé cuenta de la verdad, recibirá una lobotomía. No es hasta que sueña esa noche que Teddy recuerda toda la historia, y cuando se despierta, admite que él es Andrew Laeddis. Al final de "Shutter Island", los lectores se preguntan si deberían creer la historia de Teddy, que es un alguacil que tropezó con un encubrimiento del gobierno, o la narrativa de Cawley, en el que Teddy es un asesino delirante. El capítulo final no ofrece claridad. Inicialmente, parece que Teddy ha aceptado que es Andrew Laeddis, pero luego comienza a hablar con Chuck, que podría ser el Dr. Sheehan o una alucinación, no está claro, acerca de salir de Shutter Island. En la escena final, Cawley y un grupo de camilleros avanzan hacia Teddy con una camisa de fuerza, aunque Teddy todavía cree que puede escapar.