Las actividades del Papa Benedicto XVI tenían como objetivo mejorar las relaciones con el mundo del arte. Traductor traducir

El otro día, el Papa Benedicto XVI sorprendió al mundo con el anuncio de su dimisión. Sin embargo, los expertos señalan que quedará en la historia como un líder religioso que hizo mucho por renovar la relación entre la Iglesia católica y el mundo del arte, que considera la belleza como uno de los caminos para el crecimiento espiritual.

Declarado Papa en 2005, Benedicto XVI supervisó los preparativos para la celebración del 500 aniversario del Museo Vaticano por el Papa Julio II, incluida la organización de una colección de cientos «de mecenas», y la apertura del acceso a los visitantes a la Necrópolis descubierta hace varios años bajo el Vaticano. Como jefe del Vaticano, el Papa influyó no sólo en la Iglesia católica, sino también en la historia del arte.

Ya en 2009, el Papa se reunió con un grupo de 250 personas, en su mayoría artistas, arquitectos, escritores y músicos, para renovar la amistad de la Iglesia con el mundo del arte y «transmitir a todos los artistas [его] una invitación a la amistad, al diálogo y a la colaboración», como él mismo dijo en su discurso. En su mensaje, el Papa Benedicto XVI señaló en particular:

«… gracias a vuestro talento, tenéis la oportunidad de hablar al corazón humano, de tocar los sentimientos individuales y colectivos, de evocar sueños y esperanzas, de ampliar los horizontes del conocimiento y de la participación humana. Agradece el don que se te ha concedido y asume plenamente tu gran responsabilidad…. A través de vuestro arte, vosotros mismos debéis ser heraldos y testigos de esperanza para la humanidad. Y no tengáis miedo de acercaros y dialogar con los creyentes, con los que, como vosotros, creen que son peregrinos en este mundo y buscan también la belleza infinita. La fe no quita nada a tu genio ni a tu arte: al contrario, los eleva y los alimenta, los invita a trascender y a contemplar con admiración y emoción la meta última y final, el sol que…. ilumina nuestro momento presente y lo hace bello».

El Papa recordó que los principales artistas del Renacimiento realizaron sus mejores obras bajo el patrocinio de la Iglesia, y sugirió a los artistas contemporáneos que piensen un poco más en la espiritualidad.

En su cargo, el Papa Benedicto XVI ha apoyado varias exposiciones, incluida una muestra de obras del artista judío Marc Chagall. El Papa encargó su retrato oficial al artista alemán Michael Triegel, conocido por sus opiniones ateas.

Anna Sidorova