En Inglaterra, las exenciones fiscales para los propietarios de obras maestras a cambio del acceso público a ellas eran solo un esquema para la evasión fiscal Traductor traducir

En el Reino Unido, los propietarios de 115.000 obras de arte están exentos del impuesto de sucesiones o plusvalías a cambio de su promesa de facilitar el acceso público a sus obras maestras, pero en realidad no es nada fácil ver estas obras.

El régimen fiscal favorable fue diseñado por el gobierno británico en aras del interés público, pero la práctica demuestra que necesita una reforma urgente porque no funciona por sí solo.

Más de 115.000 obras, desde bustos romanos de Tiziano a grandes obras de los prerrafaelitas, figuran en la base de datos del HMRC, raramente publicitada. Sus propietarios están exentos de pagar impuestos de sucesiones o plusvalías siempre que permitan el acceso público a sus tesoros. Sin embargo, la última encuesta muestra que este acceso es, en el mejor de los casos, fragmentario. Ciertamente, los propietarios no deniegan el acceso, pero de cada 30 solicitudes, se conceden un máximo de 5.

Helen Goodman, miembro del Partido Laborista inglés, dijo el otro día que no le sorprendían los resultados de esta encuesta y ya ha iniciado un debate en el Parlamento sobre el tema. «Hay consenso en que tenemos que hacer más, para garantizar el acceso a estas instalaciones. Es realmente, un poco de chantaje, pero tenemos que aumentar la presión sobre la gente».

Según el régimen actual, el impuesto de sucesiones puede aplazarse si el propietario de la obra de arte se compromete a mantenerla en el país y a ponerla a disposición del público. Goodman afirma que «es un compromiso increíblemente pequeño» que los propietarios faciliten el acceso durante no más de 28 días al año.

«Podrías abrir fácilmente tu casa y hacer que tu obra maestra fuera realmente accesible durante esos 28 días, pero nadie lo hace», dijo Goodman. «O no lo hace sistemáticamente. Yo sé esto. Así responden los propietarios a las peticiones puntuales: Ah, sí, puede venir a verla los martes y miércoles de noviembre a febrero».

Mientras tanto, este régimen fiscal preferencial ha costado al erario público más de 1.000 millones de libras en ingresos perdidos en las últimas décadas. Goodman presentó en el Parlamento un cálculo preciso según el cual el Reino Unido estaba pagando 30 millones de libras de menos en impuestos al año, una suma que ascendía a 900 millones de libras en los últimos 30 años de vigencia de la Ley. Antes de 1975, 45.000 objetos de arte estaban exentos del impuesto de sucesiones, lo que el Tesoro estima en una pérdida monetaria de 250 millones de libras. La cantidad total de impuestos no pagados al Tesoro británico asciende, por tanto, a 1.150 millones de libras.

En una página web del HMRC se puede encontrar una base de datos de obras de arte que, en teoría, se podrían ver gratis en casa de su propietario. Sin embargo, como reveló la investigación del periodista, a menudo resulta que la información que figura en el sitio web no es correcta: la dirección indicada resulta no estar actualizada, o la obra se ha trasladado hace tiempo a otra parte del país, o no se contesta al número de teléfono que figura para hacer consultas. A menudo, los propietarios de los cuadros responden que los han prestado a museos o galerías (lo que no siempre es cierto), o le piden que les envíe un correo electrónico con una copia de sus documentos de identidad.

En relación con todo esto, Goodman sugirió duplicar el periodo obligatorio durante el cual las obras de arte deben ser accesibles al público, hacer la base de datos más abierta, incluso, colgando fotos de las propias obras, y, prohibir a los propietarios «prestar» sus obras maestras a las galerías. «Son medidas bastante duras, pero estamos hablando de arte oculto al público, que está causando al Estado pérdidas importantes», dijo Goodman.