Pintura de Francis Bacon vendida por un precio récord Traductor traducir

LONDRES -- Un cuadro del artista británico Francis Bacon (1909-1992) «Retrato de un George Dyer que habla» se convirtió ayer en la obra más cara del pintor jamás vendida en una subasta. En la subasta de Londres, el cuadro se compró por 42,19 millones de libras (69, 32 millones de dólares).

El valor estimado de la obra, que representa al amante de Bacon, George Dyer, era de 30 millones de libras. Recordemos que tres meses antes, en una subasta celebrada en Nueva York, el tríptico de Bacon «Three Sketches for a Portrait of Lucien Freud» se vendió por 127 millones de dólares, convirtiéndose así en la obra de arte más cara jamás vendida en una subasta.

Francis Bacon nació en una familia de militares y no pudo recibir una educación sistemática durante su infancia y primera juventud. La decisión de pintar le llegó a los 18 años, tras asistir a una exposición de obras de Picasso. La primera obra conocida del artista data de 1933, pero poco después de una exposición fallida, Bacon destruye la mayoría de sus obras. Más tarde vuelve a la pintura, se relaciona con artistas famosos de Londres, realiza varios viajes para estudiar las obras de los más grandes abstraccionistas y surrealistas. Así, en 1952 Bacon va al sur de Francia, al lugar donde hay un centro de rehabilitación en el que Vincent van Gogh pasó los últimos años de su vida. Allí vive el propio Bacon durante un tiempo y crea una serie de paisajes extraordinarios. Más adelante en su vida, Bacon volvería a las obras de Van Gogh y Velázquez, cuya obra también amaba.