El Vaticano ha lanzado un volumen único de tres volúmenes con fotografías de los frescos de la Capilla Sixtina Traductor traducir

VATICANO. La última vez que se fotografiaron los tesoros de la Capilla Sixtina para las generaciones futuras fue cuando la fotografía digital aún estaba en pañales y palabras como «píxel» sólo las utilizaban los frikis de la informática y los científicos de la NASA. Ahora, tras varias décadas de avances tecnológicos en fotografía artística, tratamiento de imágenes e impresión, se ha hecho posible un proyecto a gran escala que no sólo es para los amantes del arte, sino también para los futuros restauradores. El proyecto lleva cinco años en marcha, durante los cuales se han tomado más de 270 000 fotogramas digitales que muestran los frescos de Miguel Ángel y otros maestros con un detalle asombroso.

Foto: Reuters/Philip Pullella

«En el futuro, esto nos permitirá preservar cada centímetro de la capilla en las condiciones en que estaba en 2017», dijo Antonio Paolucci, ex jefe de los Museos Vaticanos y experto de renombre mundial en la Capilla Sixtina.

Los frescos del techo de Miguel Ángel son mundialmente conocidos, siendo uno de los más famosos la escena en la que Dios tiende la mano para dar vida a Adán. Miguel Ángel terminó el techo en 1512, y la representación «del Juicio Final» detrás del altar entre 1535 y 1541. Todos los frescos de la Capilla Sixtina fueron fotografiados por última vez entre 1980 y 1994, durante una importante restauración, la primera en siglos. Las nuevas fotografías se incluirán en un libro único de tres volúmenes y 870 páginas. La edición está limitada a 1.999 ejemplares y se venderá a bibliotecas y coleccionistas privados a un precio de unos 12.000 euros.

Las fotografías de la Capilla se tomaron durante 65 noches, desde las siete de la tarde hasta las dos de la madrugada. Sólo unas pocas personas conocían este proyecto. Después de capturar todas las obras maestras de la Capilla, incluidos el suelo de mosaico y los frescos de artistas del siglo XV que habían languidecido a la sombra de Miguel Ángel durante muchos años, las fotografías «se cosieron» en las imágenes finales mediante un programa informático.

Más de 220 páginas de libros contienen imágenes a escala 1:1 , incluyendo tanto la escena «de la Creación de Adán», como el rostro de Jesús en el Juicio Final. Cada volumen pesa unos 9 kg y el pliego mide 60 por 130 cm.

«Hemos utilizado un programa informático especial, de posproducción, para obtener la profundidad, intensidad, calidez y tonalidad del color con una precisión del 99,9%», explica Giorgio Armaroli, director de Scripta Maneant, la editorial que ha producido los tres volúmenes. «Los futuros restauradores podrán utilizarlos como referencia», añadió.

Las fotografías muestran claramente todas las pinceladas e incluso los bordes entre las partes del dibujo conocidas como «días» (dado que los frescos se pintan sobre yeso húmedo, los artistas prepararon cada vez un campo lo suficientemente grande como para completarlo en un día). Para la filmación se utilizó un equipo telescópico especial. Toda la información, con un total de 30 terabytes, está ahora almacenada en un servidor del Vaticano.

Anna Sidorova © Gallerix.ru