Castiglione:
pintor barroco italiano, grabador Traductor traducir

Giovanni Benedetto Castiglione, conocido como «Il Grechetto», fue uno de los maestros antiguos más versátiles del siglo XVII, explorando tanto el manierismo como el arte barroco. Activo en su Génova natal, así como en Roma, Nápoles y finalmente en Mantua, donde trabajó en la corte de Gonzaga, su pintura barroca abarcó bodegones y pinturas de animales a la manera del maestro flamenco barroco Frans Snyders, así como el estilo naturalista del arte religioso en la tradición del barroco holandés . Otras influencias fueron Rubens, Van Dyck y Bernini.

Pinturas de Giovanni Benedetto Castiglione

Castiglione también era conocido por su dibujo, y desarrolló una técnica de boceto muy viva, utilizando pintura al óleo sobre papel. Fue un importante exponente del grabado, en particular del aguafuerte, en el que se nota la influencia de Rembrandt. A diferencia de la mayoría de los artistas barrocos italianos, Castiglione se mostró extraordinariamente abierto a los métodos y técnicas de artistas extranjeros, lo que contribuyó a su éxito comercial. Su obra siguió siendo influyente hasta bien entrado el siglo XVIII. Entre sus mejores pinturas barrocas se encuentra «Noé conduciendo a los animales al Arca» (1655, National Gallery, Washington).

Biografía

Castiglione vivió en Génova hasta 1632. Entre sus maestros figuran Paggi, de Ferrari y -durante su segunda estancia en Génova, entre 1621 y 1627- Anthony Van Dyck (1599-1641). A continuación se orientó hacia pintores de género de origen flamenco, en particular el alumno de Frans Snyders (1579-1657), Johannes Roos (que vivió en Génova de 1614 a 1638). De él adoptó un tipo de pintura que representaba animales muy cargados, que sugería a Pieter Aertsen (1508-1575) y Joachim Bucelaere (1533-1573). Jacopo Bassano (1515-1592), cuya obra era ciertamente poco conocida en Génova, también debió de influirle.

En esta época se había convertido en un pintor naturalista de la tradición noreuropea, realizando esencialmente escenas de animales, aunque con el pretexto de temas bíblicos, por ejemplo «El viaje de Abraham» (Museo de Arte de Düsseldorf), temas que siguió utilizando a lo largo de toda su carrera.

También realizó grabados (entre ellos varias cabezas con turbante), lo que demuestra que había estudiado las obras de Rembrandt (1606-1669); de hecho, fue el primer italiano que descubrió al virtuoso de Amsterdam. El caravaggismo, por tanto, le llegó a través de la pintura del norte de Europa, y a lo largo de su vida Rembrandt siguió siendo una fuente de inspiración, especialmente en sus obras gráficas.

Roma: primera época (1632-35)

En 1632 Castiglione abandonó Génova para trasladarse a Roma. Pasó allí dos periodos, el primero en 1632-5 y el segundo en 1647-51. Entre estas dos estancias pasó probablemente algún tiempo en Nápoles, donde se le menciona en 1635, y en otras ciudades italianas, sobre todo en Génova (hacia 1645). Durante su primera estancia en Roma se relacionó con el círculo de Nicola Poussin (1594-1665) y su mecenas Cassiano dal Pozzo (1588-1657). Estilísticamente estuvo cerca de Pietro Testa (1612-1650) y Mola, que también vivieron en Roma.

Su estilo se volvió cada vez menos flamenco, y en 1630-5 gravitó hacia el neovenecianismo de Poussin. Su repertorio se amplía, su estilo se vuelve más ordenado y su color más cálido; al mismo tiempo, su composición se vuelve más ligera y su dibujo más fluido.

Desarrolló una técnica de esbozo al óleo sobre papel, probablemente heredada del arte renacentista flamenco y veneciano, que le permitió utilizar colores, como el bermellón, que era el único artista que utilizaba en aquella época. También inventó la técnica del monotipo, que consistía en hacer una sola copia a partir de una plancha de metal con un dibujo a tinta. Estos dos procedimientos le daban una gran libertad, sobre todo para desarrollar efectos de claroscuro .

Génova

A su regreso a Génova, Castiglione pintó grandes composiciones religiosas en un estilo claramente barroco: Adoración de los pastores (1645, iglesia de San Luca); San Bernardo adorando a Cristo en la cruz (iglesia de San Martino en San Pierre d’Arena); Santiago expulsando a los moros de España (oratorio de San Giacomo della Marina).

El primero se caracteriza por el sentido del espacio, y en «San Bernardo» aparece por primera vez el sentido del éxtasis que Castiglione desarrollará más tarde en sus bocetos. Rubens (1577-1640) fue la mayor influencia de Castiglione durante este periodo, como queda patente en el cuadro «Santiago expulsando a los moros», que está tomado directamente de las escenas de caza de Rubens.

Roma: segundo periodo (1647-51)

Durante su segunda estancia en Roma, Castiglione fue repelido por Nicola Poussin (1594-1665), que para entonces se había vuelto demasiado clásico e intelectual para él. A través de las familias Raggi y Fiorenzi conoció a Bernini (1598-1680) y Pietro da Cortona (1596-1669). Bajo la influencia de este último utilizó durante un tiempo la «gran manera» (tomada de la pintura manierista) (Inmaculada Concepción para la iglesia de Cappuccini en Osimo, Minneapolis Institute of Art). Pero la nota dominante en su pintura es fantástica y pintoresca, como en Diógenes (Prado) o Homenaje a Pan (Colección Durazzo, Génova). Estas obras se asemejan a los extraños bocetos de Testa y ejercieron una notable influencia en el pintor napolitano Salvator Rosa (1615-1673).

La corte de Gonzaga: Mantua

El último periodo de su vida, de 1651 a 1665, lo pasó principalmente en Mantua, donde fue pintor de la corte de los Gonzaga. Su pincelada se hizo más libre tras un viaje a Venecia en 1648, influido por los grandes venecianos y por un contemporáneo suyo, Johannes Lys (m. 1629), pero sobre todo debido a su conocimiento del arte de Fetti, su predecesor en la corte de Mantua.

Aunque siguió pintando temas filosóficos y pictóricos, la figura humana se convirtió ahora en el principal centro de interés de sus cuadros ) El descubrimiento de Ciro, National Gallery, Dublín). La influencia latente de Bernini y Rubens se hizo evidente en dibujos como Moisés recibiendo las Tablas de la Ley (Colección Real Británica), reforzando la tendencia barroca ya evidente en Génova en 1645.

Entre 1659 y 1665 trabajó en Mantua, Génova, Parma y Venecia, pero permaneció constantemente al servicio de Gonzaga. Volvió entonces a su estilo anterior de pintura al óleo, produciendo composiciones que a menudo se caracterizan por montones de caza en primer plano y figuras diminutas en la distancia. Pero el manierismo dio paso al Barroco, como demuestran «Los cambistas expulsados del Templo» (Louvre) o «El viaje de los hijos de Israel» (Brera).

Al igual que Bernini y Bernardo Strozzi (1581-1644), Castiglione terminó su carrera con una nota mística, con una serie de dibujos y bocetos de santos franciscanos en éxtasis o de Cristo en la cruz. De este modo, al final de su vida, parece haberse convertido en el líder del movimiento de la pintura mística genovesa que comenzó con Strozzi e incluyó también a Piola y de Ferrari.

A Castiglione le siguieron su hermano Salvatore Castiglione (1620-1676), funcionario de la corte de Gonzaga, y un hijo Giovanni Francesco Castiglione (1641-1710), también pintor, que se convirtió en un talentoso imitador de su estilo.

Legado

Históricamente, Castiglione fue una figura importante en una etapa del desarrollo del arte italiano en la que estaba siendo revitalizado por la pintura flamenca y holandesa. Como pintor barroco, utilizó el estilo a todos los niveles. Poseía una técnica virtuosa que podía emplear tanto en la pintura rústica de género como en la «grandiosa», y era también un dibujante y grabador excepcionalmente bueno.

En el siglo XVIII ejerció una gran influencia sobre Sebastiano Ricci (1659-1734), Giambattista Tiepolo (1696-1770) y sobre todo Jean-Honore Fragonard (1732-1806) («Adoración de los pastores», Louvre). Los cuadros de Castiglione pueden verse en varios de los mejores museos de arte del mundo.