Grabado:
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El aguafuerte, inventado por el artista alemán Daniel Hopfer (ca. 1470-1536), es uno de los métodos de impresión del huecograbado, junto con el aguafuerte, el mezzotinto y el aguatinta. Debido a su relativa sencillez, el aguafuerte empezó rápidamente a competir con el grabado como medio de impresión . Su principal ventaja sobre el grabado era que apenas requería conocimientos de metalistería y podía ser practicado por cualquier persona con formación en dibujo . El primer aguafuerte data de 1513, obra del artista suizo Urs Graf (1485-1529), pero Alberto Durero (1471-1528) también pintó aguafuertes por la misma época.

El proceso del aguafuerte

En el grabado tradicional, una plancha de metal, normalmente de cobre, zinc o acero, se recubre con una sustancia similar a la cera, resistente al ácido, llamada esmerilado o «tierra», sobre la que el artista dibuja su diseño con una aguja metálica, dejando al descubierto el metal desnudo. A continuación, la plancha se sumerge en ácido. El ácido penetra en el metal, donde queda expuesto al dibujo, lo que produce líneas en la plancha. A continuación, se limpia la plancha de la suciedad y se entinta siguiendo el mismo método que para el grabado. El aguafuerte puede combinarse con otras técnicas de huecograbado. Algunos autores famosos son Rembrandt, que lo combinó con el grabado, y Francisco de Goya, que también utilizó el aguatinta.

Desarrollo del aguafuerte

La técnica básica del aguafuerte fue iniciada por Daniel Hopfer (c. 1470-1536) en Augsburgo, Alemania, que primero la utilizó para decorar armaduras y más tarde la aplicó a la creación de finos grabados.

Otro famoso innovador fue el impresor francés Jacques Callot (1592-1635), que mejoró enormemente la técnica del grabado. Para empezar, inventó el echop, una aguja con punta oval biselada que permitía a los grabadores producir una línea gradualmente ascendente. A continuación, desarrolló una fórmula mejorada para la imprimación de cera utilizada en la plancha de cobre. Gracias a esta mejora, el ácido podía formar líneas más profundas (lo que aumentaba la vida útil de la plancha), además de minimizar el riesgo de que la imprimación penetrara en las zonas equivocadas. Kallo también experimentó con una técnica en la que había que dejar que el ácido penetrara ligeramente en toda la plancha antes de cubrirla con tierra y volver a sumergirla en ácido – un proceso que facilitaba la creación de zonas oscurecidas. Los logros de Callot se publicaron en su manual de grabados y se difundieron por Italia, Holanda, Alemania e Inglaterra.

Grabados famosos

En España Francisco de Goya (1746-1828) – uno de los grabadores más influyentes del mundo – fue el líder indiscutible del movimiento artístico del Romanticismo . En 1799 realizó una serie de 80 aguafuertes titulada «Caprichos», que representan diferentes tipos de comportamiento humano. En 1812-15, tras la guerra napoleónica, realizó una serie de aguafuertes titulada «Desastres militares», que representaban escenas del campo de batalla. Los grabados permanecieron inéditos hasta 1863.

Entre otros maestros del grabado: Albrecht Altdorfer (1480-1538), pionero del grabado en cobre, Parmigianino (1503-1540), el gran pintor manierista de Parma, Claude Lorrain, Rembrandt, Giovanni Benedetto Castiglione y los holandeses Esaias y Jan van de Velde, Hércules Segers, famoso por sus grabados en color del siglo XVII, así como Canaletto, Giambattista Piranesi, famoso por sus «Carceri d’invenzione» (escenas imaginarias de prisiones), los maestros rococó Giovanni Tiepolo, Daniel Chodowiecki y William Hogarth, ya del siglo XVIII. A estos artistas siguieron en el siglo XIX maestros del aguafuerte como Jean-Auguste Dominique Engr (cuya obra célebre es, por ejemplo, «Odalisca» de 1825), Eugène Delacroix, el trágico pintor francés Charles Mérion y, en Inglaterra, Sir Francis Seymour Haden y James McNeil Whistler . En Alemania, la técnica fue defendida por Max Klinger (1857-1920), cuyos grabados de pesadillas influyeron en varios surrealistas.

Esta técnica gráfica se sigue practicando hoy en día, pero nunca ha sido tan popular como en el siglo XVII. En América, entre los grabadores y maestros del aguafuerte más notables figuran Thomas Moran (1837-1926), Stephen Parrish (1846-1938), Henry Farrer (1844-19903) y el paisajista Robert Swain Gifford (1840-1905).

Variaciones del proceso de grabado

Aguatinta : Al igual que el mezzotinto, el aguatinta – es más un proceso tonal que una técnica de grabado lineal. Se trata de una técnica de grabado adaptada para crear efectos más transparentes, como la acuarela. Mientras que la técnica tradicional de grabado utiliza una aguja de dibujo para imprimir líneas en negro (u otras tintas de color), el aguatinta se basa en una resina en polvo resistente al ácido mezclada con una imprimación. Una vez calentadas, las partículas de resina se funden en una plancha metálica sobre la que se aplica la tinta. El resultado (que puede controlarse o modificarse mediante la repetición) es una combinación más sutil de efectos tonales. Se pueden conseguir variaciones de la técnica aplicando papel de lija o mezclando azúcar con una imprimación o tratando la plancha con azufre (para conseguir un «tinte de azufre»).

El pintor rococó inglés Paul Sandby (1730-1809) fue el primer artista más creativo en utilizar este proceso, y el pintor español Goya (1746-1828) empleó el método del aguatinta en casi todos sus aguafuertes. El pintor y grabador John Piper (1903-1992) recuperó la técnica en la década de 1930, y Picasso (1881-1973) utilizó el proceso del aguatinta para sus ilustraciones para Buffon (1936-1942), véase más abajo. Hoy en día, la imprimación al aguatinta también puede aplicarse en capas finas con pintura en aerosol.

Aguafuerte de fondo blando (vernis-mou): se trata de la ejecución de un dibujo a lápiz sobre una hoja de papel colocada sobre una plancha de cobre cubierta de un fondo blando pegajoso «». La imprimación se pega al papel por donde pasa el lápiz. Se cree que Giovanni Benedetto Castiglione (1609-1664) pudo ser el primero en utilizar este procedimiento. El método fue utilizado, entre otros, por los paisajistas ingleses Thomas Gainsborough (1727-1788), John Sell Cotman (1782-1842) y el acuarelista Thomas Girtin (1775-1802).

El fotograbado o cliché-verre se realiza dibujando con un estilete sobre una placa de vidrio imprimada. A continuación, la placa se trata como un fotonegativo y se imprime en papel fotográfico. El grabador y paisajista Jean-Baptiste-Camille Corot (1796-1875) realizó más de 60 grabados fotográficos a partir de 1853, pero la técnica nunca llegó a ser especialmente popular, aunque permite un número ilimitado de impresiones.

El artista romántico inglés William Blake (1757-1827) inventó una forma aún más rara de grabado. Este método, llamado grabado en relieve, exponía las zonas del fondo al ácido, mientras que las zonas que sobresalían se cubrían con un fondo.

Picasso y el aguatinta

Picasso creó 31 grabados con animales entre 1936 y 1942, se trata de ilustraciones, que debían utilizarse en el libro de Buffon sobre historia natural. El encargo fue organizado por Ambroise Vollard, agente de Picasso, pero éste murió en 1939 antes de que se publicara el libro. Es posible que el editor Roger Lacourière, uno de los principales grabadores del siglo XX, introdujera a Picasso en el proceso de añadir azúcar a la preparación del aguatinta. Picasso utilizó este procedimiento para Buffon. También añadió al proceso el revestimiento de acero, una técnica más moderna en la que una plancha de cobre blando se recubre con una fina capa de acero mediante galvanoplastia, lo que refuerza su superficie. De este modo, la calidad de la impresión no se ve afectada por la producción en serie, un problema al que (por ejemplo) Rembrandt habría tenido que enfrentarse en su época.

En la creación de su serie de ilustraciones para Buffon, Picasso comenzó dibujando directamente sobre la plancha de cobre con tinta negra acuosa espesada mediante la adición de gummiarabic disuelto y azúcar. A continuación, el dibujo seco se cubría con imprimación y/o barniz y se sumergía en agua tibia. A continuación, la plancha se limpiaba ligeramente para dejar al descubierto la zona dibujada. A continuación, Picasso aplicaba la imprimación al aguatinta sobre la zona expuesta para crear diferentes tonos y texturas. Los resultados no son exactos, pero sin duda dan variedad. A continuación, se aplicaron partículas grabadas al ácido sobre la plancha y se calentaron. El resultado final – una gama muy variada de colores de impresión.

Nota. Para más información sobre otras formas de impresión artística, véanse xilografías (la técnica de grabado más antigua), litografía (técnica planográfica), serigrafía (popularizada por Andy Warhol) y impresiones giclée (impresora de chorro de tinta).

CONDICIONES DE IMPRESIÓN
Para una explicación de los términos clave relacionados con el grabado, el aguafuerte, la litografía, la xilografía y otras formas de bellas artes impresas, véase: Glosario sobre grabados .

DIFERENTES FORMAS DE ARTE
Para definiciones, significados y explicaciones de las distintas artes, véase «Tipos de arte».