Escultura de piedra: historia, tipos, materiales, técnicas Traductor traducir
Si los petroglifos (incluidos los fenómenos culturales inusuales conocidos como cúpulas) representan el arte más antiguo del mundo, entonces la escultura en piedra es el arte móvil (portátil) más antiguo. Por ejemplo, las efigies escultóricas de la Edad de Piedra conocidas como Venus Berehat-Ram (basalto) y Venus Tan-Tan (cuarcita) tienen al menos 200.000 años de antigüedad, y la figurilla de piedra caliza conocida como Venus de Willendorf se ha datado en torno al 30.000 a.C.
Una de las razones por las que conocemos estos ejemplos de arte prehistórico, es que estaban hechos de un material resistente a la intemperie como la piedra. Por supuesto, la talla en madera, y la talla en marfil no son menos tradicionales, pero la madera es un material demasiado perecedero, y el marfil y los huesos de animales sólo son adecuados para ciertos tipos de figuras pequeñas. La piedra -al menos algunos tipos- es fácil de tallar y muy duradera, pero no posee (como el bronce) mucho valor intrínseco. Es cierto que el mármol es mucho más raro y caro que, por ejemplo, la piedra caliza o la arenisca, pero el mármol es un caso especial y se trata por separado, véase: escultura de mármol .
Otro caso especial es el arte megalítico, cuyos relieves escultóricos se solapan con el arte plástico ordinario, pero también se tratan en otro lugar, al igual que las piedras preciosas como el jade (piedra verde), tan ampliamente representado en el arte chino.
Hasta el siglo XX, casi todos los grandes escultores practicaron la talla en piedra antes de pasar a la escultura en mármol o en bronce, y algunos, como el eminente artista irlandés Seamus Murphy (1907-1975), pasaron toda su vida esculpiendo en piedra. La escultura en piedra alcanzó su verdadero apogeo durante los programas de construcción de catedrales y abadías de las épocas románica (c. 1000-1200 d.C.) y gótica (c. 1150-1300), y desde entonces ha ido decayendo gradualmente, con la excepción de la talla de esculturas insólitas en la toba de los moai (c. 1250-1500) de Rano Raraku, en la Isla de Pascua. A pesar de su declive, la piedra, junto con el acero, sigue siendo el principal material para obras a gran escala al aire libre, ejemplificadas por el Women’s Memorial «Titanic» (1931, Washington, D.C.) de Gertrude Vanderbilt Whitney. Véase también: Cómo apreciar la escultura . Para obras más recientes, véase: Cómo apreciar la escultura contemporánea .
Historia
Escultura prehistórica en piedra
Sin contar las anteriores pero más controvertidas efigies, figurillas y grabados planos encontrados en el arte rupestre paleolítico, la primera escultura prehistórica en piedra fue una serie de estatuillas de Venus, que empezaron a aparecer por toda Europa a partir del 30.000 a.C. aproximadamente. Entre ellas se encuentran: Venus austriaca de Halgenberg (también conocida como estatuilla de Stratzing), Venus francesa de Montpasier (esteatita), Venus italiana de Savignano (serpentina), rusa Venus de Gagarino (basalto), y Venus suizas Engen y Monrouse-Neuchâtel (ambas talladas en piedra de azabache).
Un friso de esculturas de piedra en relieve era también una característica popular del arte rupestre paleolítico , ejemplificado por las cuevas de Cap Blanc, Roc de Sers y Roc-aux-Sorcières. También se han encontrado ejemplos de escultura neolítica en piedra en varias partes de Europa central y oriental, como Turquía (véanse los relieves de animales en Gobekli Töpe c. 9000 a.C.) y Serbia (véase Fishbog Lepenski Vir c. 5000 a.C., Museo Nacional, Belgrado). Véase también Arte antiguo .
En China la talla en jade era la forma más prestigiosa de escultura en piedra. Para más información sobre la evolución de la escultura en piedra (principalmente budista) en China, véase: Escala cronológica del arte chino (18.000 a.C. hasta la actualidad).
Escultura antigua en piedra
La escultura egipcia también hizo pleno uso de la piedra en estatuas y relieves - véase, por ejemplo, la estatua de arenisca de Akenatón (c. 1350 a.C..) y la estatua de piedra gris de Psametek custodiada por la vaca Hathor (c. 550 a.C.) en el Museo Egipcio de El Cairo, así como obras monumentales como la Gran Esfinge de Guiza (c. 2575-2465 a.C.).
La piedra también se utilizó ampliamente en el antiguo arte persa, así como en el arte mesopotámico y la escultura mesopotámica . Por ejemplo, el toro humanoide alado y el león (859 a.C.) del palacio de Ashurnasirpal en Nimrud, un ejemplo típico del arte asirio (c. 1500-612 a.C.). Se cree que los albañiles y artesanos de estas antiguas culturas ejercieron una influencia clave en la escultura griega, especialmente en el estilo menos sofisticado de la escultura griega arcaica (c. 650-480 a.C.), como la estatua de piedra caliza conocida como «Auxerre Kore» (c. 630 a.C., Louvre).
A partir de entonces, la mayoría de las obras tridimensionales del arte griego, incluido el Partenón, creadas durante la gloriosa edad de oro de la alta escultura griega clásica (450-400 a.C.), fueron de mármol o bronce. Una excepción fue el Coloso de Rodas , de 30 metros de altura, una enorme estatua del dios Helios construida en la isla de Rodas por Hares de Lindos hacia el 280 a.C., durante la era de la escultura griega helenística . Considerada una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo, estaba hecha de piedra (y tierra) y decorada con placas de bronce. Antes de que su desvencijada construcción se derrumbara en el 226 a.C. tras un terremoto, era una de las mayores esculturas que jamás hayan existido.
El uso de la escultura en piedra estuvo muy extendido durante el Imperio Romano, que hizo pleno uso de temas como bustos retrato del emperador, así como relieves históricos en piedra como la Columna de Trajano (106-113, Roma), de Apolodoro de Damasco; el friso del Ara Pacis Augustae (13-9. A.C.), el friso de la columna de Marco Aurelio (c. 180-193 d.C.) y los relieves del Arco de Constantino (312-15 d.C.). La escultura en piedra también fue un motivo decorativo en los sarcófagos cristianos durante la época del arte paleocristiano (c. 150-550 d.C.).
Escultura románica en piedra
El apogeo de la escultura en piedra se produjo en el periodo 1000-1300, cuando Roma y sus órdenes monásticas se embarcaron en un programa masivo de construcción de iglesias basado en un nuevo estilo de arquitectura eclesiástica conocido como estilo románico. (Véase también: Escultura medieval .) Esto llevó a una enorme demanda de una amplia gama de nuevas estatuas y relieves para decorar cada nueva catedral, iglesia y abadía.
En Francia, los centros importantes del arte románico fueron Cluny, Auten, Vezelay, Toulouse y Moissac. En Italia se encontraban en Como, Módena, Verona, Ferrara, Parma, Pisa, Lucca y las ciudades de Apulia. En España, la escultura románica se centró en León, Madrid y Santiago de Compostela. En Irlanda, las autoridades monásticas erigieron esculturas celtas en forma de altas cruces, la mayor obra de escultura exenta desde el Renacimiento.
Entre los famosos escultores de piedra de la época se encuentran: Francés Ghislebertus (famoso por su obra en la catedral de Saint-Lazare); Maestro de Cabestany (llamado así por su tímpano románico en Cabestany); el español Maestro Mateo (conocido por su Pórtico de la Gloria en la Catedral de Santiago de Compostela); y Benedetto Antelami (conocido por sus obras en Parma y otros lugares).
Para una interesante comparación con la escultura oriental en piedra de la misma época, véanse las inusuales figuras de piedra del templo jemer del siglo XII de Angkor Wat en Camboya y el templo del siglo XI de Kandariya Mahadev en Khajuraho, Madhya Pradesh. La escultura india de Khajuraho es famosa por su contenido explícito «para adultos».
Escultura gótica en piedra
Tras el Románico llegó la edad de oro de la piedra con la arquitectura gótica, ejemplificada por las grandes catedrales francesas de Chartres, Notre Dame de París, Amiens y Reims, con sus altísimas bóvedas, enormes vidrieras, gárgolas, esculturas bíblicas en relieve e hileras de columnas. De hecho, estas asombrosas estructuras contenían la mayor colección de arte religioso tridimensional jamás vista en la historia de la escultura .
Al igual que la versión tridimensional de Miguel Ángel de los frescos del techo y las paredes de la Capilla Sixtina de Roma, los exteriores e interiores de estas iglesias monumentales presentaban una gran variedad de santos, apóstoles, miembros de la Sagrada Familia y varios ángeles y otras figuras evangélicas, además de relieves que representaban el nacimiento de Jesús, la Pasión de Cristo y otros acontecimientos bíblicos.
Famosos escultores góticos, todos ellos tallistas en piedra, como Nicola Pisano (c.1206-1278), líder de la escuela italiana; su hijo Giovanni Pisano (c.1250-1314), autor del retablo de mármol de Arezzo; Arnolfo di Cambio (c.1240 -1310), especializado en escultura sepulcral y arte funerario; y Giovanni di Balduccio (c.1290-1339), conocido por el santuario de San Pedro Mártir en Sant’Eustorgio, Milán. Entre los escultores de piedra del gótico tardío se encuentran André Bonnevier (c. 1335-1400), que sirvió al rey Carlos V de Francia y al duque Jean de Berry; y Claus Sluter (c. 1340-1406), líder de la escuela de Dijon.
Para la comparación con la escultura de mármol, véase David de Miguel Ángel (1501-4, Galleria dell’Accademia delle Arti, Florencia).
Esculturas Moai de la Isla de Pascua
El territorio polinesio de la Isla de Pascua alberga una forma particularmente llamativa y extraordinariamente duradera de arte oceánico: los famosos moai o mo’ai . Se trata de una serie de 887 figuras humanas monolíticas -también conocidas como «cabezas de la Isla de Pascua»- talladas en toba volcánica entre 1250 y 1500. Sus cuencas oculares elípticas, de unos 4 metros de alto, un metro y medio de ancho en la base y unas 14 toneladas de peso, estaban diseñadas para albergar ojos «de coral» con pupilas de obsidiana negra o escama roja. Muchos moai siguen en la cantera de Rano Raraku, pero un gran número ha sido trasladado a plataformas de piedra ) ahu) alrededor del perímetro de la isla. Unos 13 moai son de basalto, 17 de escoria roja quebradiza y 22 de traquita.
Escultura moderna en piedra
Entre los escultores modernos de piedra se incluyen Jean-Baptiste Carpeaux (1827-1875), conocido por su maravillosamente animada «Danza» (1865-9, Musée d’Orsay); Constantin Brancusi (1876-1957), que creó «Beso» (1907, Kunsthalle, Hamburgo); Jacob Epstein (1880-1959), escultor de Defiant «Adam» (1938, Harewood House); Wilhelm Lembruck (1881-1919), creador de «Kneeling Woman» (1911, MoMA); Henri Gaudier-Brzeska (1891-1915), conocido por la obra «Red Stone Dancer» (1913, Tate Gallery); Henry Moore (1898-1986), conocido por la obra «Mother and Child» (1924-5, Manchester Art Gallery); los artistas André Doeren (1880-1954), conocido por «Desnudo de pie» (1907, Centre Pompidou); Modigliani (1884-1920), que siempre prefirió tallar directamente en piedra; y otros. Y hablando de obras monumentales en piedra, consideremos los «Retratos de Presidentes» de Gutzon Borglum en el Monte Rushmore (1941). Curiosamente, en casi todos estos ejemplos de talla en piedra, la forma humana parece emerger de la piedra.
Métodos y materiales
Tipos de piedra
La piedra se presenta en muchas variedades, dando a los artistas una amplia elección en términos de color, calidad y dureza. Las más duras y resistentes a la intemperie son las rocas ígneas formadas por el enfriamiento de roca fundida, como el granito, la diorita y el basalto. También pueden utilizarse piedras sedimentarias como el alabastro (yeso), aunque contienen estratos apreciables. Las piedras metamórficas, formadas por la alteración de rocas ígneas y sedimentarias por temperaturas o presiones extremas, son muy populares entre los escultores: el mejor ejemplo son varios tipos de mármol.
En general, cuanto más blanda es la piedra, más fácil es cortarla. Según la escala MOHS de dureza mineral inventada por el geólogo alemán Carl Friedrich Moos (1773-1839), la esteatita, con una dureza MOHS de aproximadamente 2, es una de las piedras más fáciles de trabajar. Le siguen el alabastro y los tipos más blandos de serpentina, todos con un MOHS de alrededor de 3. Las piedras con un MOHS de 4 son la caliza y la arenisca. Las piedras más duras, con un MOHS de 6, son el travertino, el mármol y el ónice, mientras que el granito y el basalto (ambos de 8) son las más fuertes y duraderas, pero las más difíciles de tallar.
Técnicas de tallado de la piedra
El tallado comienza desmenuzando grandes trozos de roca sobrante (un proceso conocido como «desbastar», «astillar», o «derribar») utilizando un cincel puntiagudo y un cincel de cuña y un martillo de albañil. Después de crear una figura aproximada en la piedra, se hacen marcas más precisas con carboncillo, lápiz o crayón, y luego el escultor utiliza técnicas básicas de martillo y cincel para crear un contorno más claro. Para crear la figura final se utilizan otras herramientas especializadas (por ejemplo, un cincel dentado, un cincel de garra, escofinas y flautas).
Durante el Renacimiento, las principales herramientas del escultor eran: un juego de incisivos ) Gli Scalpelli), incluyendo incisivos planos ) Scalpello), puntiagudos ) Subbia), redondos ) Unghietto), dentados ) Gradina), e incisivos hendidores ) Scapezzatore); un mazo ) La Mazza) utilizado para golpear el cincel. Además, el escultor utilizaba varios martillos diferentes, para golpear herramientas de filo como el cincel, así como la propia piedra.
Además de estas herramientas tradicionales, los escultores del siglo XX tuvieron acceso a martillos neumáticos, así como a otras herramientas eléctricas como la amoladora angular de punta de diamante y numerosos taladros manuales. Hoy en día, de acuerdo con los principios del arte posmoderno, los talladores de piedra pueden utilizar equipos aún más sofisticados, como sopletes de oxiacetileno, láseres y sopletes de calor reactivo. Este último se utilizó para crear el monumento conmemorativo de granito en el monte Rushmore.
Esculturas de piedra famosas
Las estatuas y relieves de piedra famosos pueden verse en algunos de los mejores museos de arte y jardines de esculturas de todo el mundo. Entre las obras maestras figuran:
La Danza (1865-9), Museo de Orsay. Por Jean-Baptiste Carpeaux.
Desnudo de pie (1907) Centro Pompidou. Por André Derain.
El beso (1907) Hamburgerkunsthalle. Constantin Brancusi.
Mujer arrodillada (1911) MOMA, Nueva York. Por Wilhelm Lembruck.
Cabeza (1911-13) Museo Guggenheim, Nueva York. Por Modigliani.
Bailarina con una piedra roja (1913) Tate Gallery. Henri Gaudier-Brzeska.
Hombre con guitarra (1915) MOMA, Nueva York. Jacques Lipschitz.
Cabeza (1915) MOMA, Nueva York. Autor Modigliani.
Cristo Redentor (1922-31) Soapstone, Río de Janeiro. De Paul Landowski.
Madre e hijo (1924-5), Manchester Art Gallery. Henry Moore.
Monumento a la Mujer «Titanic» (1931), Washington, DC. La escritora Gertrude Whitney.
Adam (1938) Harewood House, Reino Unido. Autor Jacob Epstein.
Retratos presidenciales (1941) Monte Rushmore. Por Gutzon Borglum.
Motherland Calls (1967) Hormigón / Piedra, Volgagrad. Y. Vuchetich.
Ushiku Daibutsu, Buda Amitabha (1995) Piedra, Japón.
Templo del Buda de la Primavera (2002) Piedra, hormigón, fundición de cobre, Henan, China.
CHINA ESTTUAS DE PIEDRA
Para las esculturas de piedra chinas más importantes - véanse las estatuas budistas: Arte de la dinastía Tang (618-906) y Arte de la dinastía Song (960-1279).
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