Sasha Moroz dará una conferencia "Juegos frágiles. Notas punteadas sobre la poética de Bergman" Traductor traducir

21 de diciembre a las 20:00.

Ingmar Bergman es un paradójico. La configuración sutil de sus superficies norteñas es demasiado delgada para que el director sea amado en casa. Su cine, tras haber implantado el alma alegre del teatro, obtuvo volumen y ligereza. Bergman es un provocador. A través de la mecánica: sentimientos, autoría, diálogo (y más ampliamente, existencia), se revela lo que no tiene una palabra. Esta es una doble óptica, psicologismo sin psicologismo. El dramaturgo Bergman, elevándose por encima de la palabra, siempre permanece en una narración excesiva. Después del artista no hay personalidad, solo existen figuras o efectos. Estas son las consecuencias de Bergman. Paradojas del deseo.

Sasha Moroz es estudiante en el Taller de Dirección Individual MIR-5 en el Teatro Eléctrico Stanislavsky, participante en el proyecto Orphic Games, y estudiante graduada en el Instituto de Filosofía de la Academia de Ciencias de Rusia.