Rafael – Caída en el camino del Calvario, o El Pasmo de Sicilia Part 1 Prado museum

Descripción del cuadro de Raphael Santi "El transporte de la cruz".

"El transporte de la cruz" es una de las obras más trágicas de Rafael. Transmite no sólo el momento de la vida de Cristo descrito en las fuentes religiosas, sino también la emoción humana que el autor ha transmitido con tanta diligencia. En los ojos de los devas del lado derecho del cuadro se puede leer una sensación de dolor, impotencia, ansiedad y compasión.

En el centro de la imagen, Jesucristo aparece con una corona de espinas, derramando lágrimas y experimentando una increíble agonía. Se desploma en el suelo bajo el peso de la cruz, exhausto, tras lo cual informa a la Santa Virgen de que la caída de Jerusalén es inminente. Cristo vuelve a mirar a su madre, que impotente extiende sus manos en dirección a su amado Hijo, afligida por su suerte. La Virgen María, a pesar de su tremendo sufrimiento, intenta aguantar con valentía, pero no oculta su dolor. Este momento debería ser un ejemplo para todo cristiano, que debería experimentar la angustia de su Salvador tanto como la de la Santa Virgen.

Este cuadro está pintado en un estilo inusual para Rafael. En primer lugar, los héroes del cuadro adoptan poses solemnes, casi teatrales, y los acontecimientos principales no sólo se ajustan al formato del lienzo, sino que lo superan. La paleta de colores de la obra es bastante intensa, dominada por los tonos oscuros en un dúo con el rojo. Este recurso ayuda al artista a transmitir la tragedia de los acontecimientos, subrayando la intensidad y el sufrimiento de las Vírgenes que empatizan con Cristo. Al mismo tiempo, los torturadores de Jesús son representados de forma aún más expresiva, lo que acentúa su rudeza y perfidia. Los estados extremos del alma humana, como el dolor, la impotencia, la empatía y la carga que recae sobre los hombros de los inocentes, son transmitidos por Rafael en uno de sus cuadros más populares.