"La isla de las cicatrices" de Dan Gemeinhart Traductor traducir
Publicada originalmente en 2017, «Scar Island» es una novela de aventuras y acción para niños sobre un grupo de niños con problemas que se quedan sin supervisión en un reformatorio en ruinas en una isla remota. El libro está dirigido a niños de 8 a 12 años, pero el suspenso, los giros en la trama y los temas sociales de la novela también atraen a adultos jóvenes y otros. «Scar Island» es un cuento oscuro, con un final feliz que incluye un mensaje de redención. La novela de grado medio es un libro de Amazon Teachers’ Pick.
«Scar Island» incluye un personaje que habla con un ceceo, y se agregan aclaraciones en esta guía para apoyar la comprensión. El autor Dan Gemeinhart es un ex maestro de escuela primaria y bibliotecario. Ha escrito varios otros libros para lectores jóvenes, incluidos «The Honest Truth» y «Good Dog». Esta guía de estudio hace referencia a la edición de Scholastic Press de 2017. Al comienzo de "Scar Island", Jonathan Grisby, de 12 años, se sienta a bordo de un bote que se dirige a Slabhenge Reformatory School for Troubled Boys. El viejo y salado piloto del barco describe lo triste que es Slabhenge. Le dice a Jonathan que una vez fue un hospital psiquiátrico para "criminalmente locos" y ahora alberga a delincuentes juveniles. Después de llegar a la escuela, el Almirante le ordena que se arrodille sobre un artilugio de madera con un borde afilado que el Almirante llama el Pesar del Pecador. Le ordena a Jonathan que escriba una carta a casa y solo está satisfecho después de su séptimo intento. Cuando Jonathan pregunta por la cena, el Almirante dice que no merece comida después de gastar tanto papel escribiendo una carta. Lo envía a los dormitorios sin cena ni almohada. De camino a la zona de dormitorios, Jonathan pasa por una escalera acordonada con una puerta al pie. Oye un gruñido procedente de la puerta. El asistente del almirante, el Sr. Warwick, lo lleva a una celda estrecha y sin ventanas con un colchón delgado y un cubo como inodoro. Jonathan le pregunta al chico de la celda de al lado si tiene comida. El Sr. Mongley, uno de los hombres del Almirante, escucha a Jonathan susurrar y le arroja un balde de agua. A la mañana siguiente, durante los preparativos del desayuno, Jonathan conoce a Colin Kerrigan, que habla con ceceo y se autoproclama «cleptómano». Mientras prepara la comida con los otros niños, pronto se entera de que la comida es para el Almirante y los demás adultos que dirigen la escuela. Los niños solo se alimentan con avena para el desayuno y deben servir a los adultos y limpiar antes de que puedan comer. Más tarde esa mañana, el clima está nublado y lluvioso cuando los niños se reúnen en el patio para reunirse. Se paran sobre bloques de piedra mientras el almirante da un discurso despotricante, describiendo a los niños como "rostras" en la sociedad y justificando su duro enfoque disciplinario como necesario para enderezarlos. Mientras habla, el Almirante agita una espada en el aire para agregar un floreo a sus palabras. Un relámpago golpea la espada, desciende y electrifica el charco donde se encuentran el Almirante y sus siete hombres. Todos son electrocutados. Después de darse cuenta de que los adultos han sido asesinados, los niños están entusiasmados con la posibilidad de poder irse a casa una vez que llegue el barco de entrega de correo. Cuando ven el barco en el horizonte, Jonathan propone que los niños se queden solos en la isla. Encuentra un aliado en Sebastian Mortimer, quien apoya la idea de Jonathan. Luego, Jonathan diseña un plan para engañar al piloto del bote de entrega de correo con uno de los niños parado en las sombras disfrazado con el abrigo y el sombrero del Sr. Vander mientras el resto descarga el correo. Jonathan y Sebastian también indican a los niños que escondan los cuerpos de los adultos en el congelador. Pronto, Sebastian se declara líder, y cuando Colin sugiere una elección, Sebastian rechaza la idea. Sebastian luego da un discurso donde declara que no habrá reglas. Dice que los niños no son costras, sino cicatrices, que señala que son duras. Declara que toda la isla ahora pertenece a los niños y la llama Scar Island. Jonathan decide explorar la escalera acordonada que conduce a la escotilla. Después de perderse, deambula por los pasillos oscuros y laberínticos del edificio y descubre la biblioteca y al bibliotecario. El bibliotecario dice que nadie debe salir de una biblioteca sin un libro, y le da a Jonathan una copia de «Robinson Crusoe». Jonathan no le cuenta al bibliotecario sobre los adultos muertos y decide mantener la presencia del bibliotecario en secreto para los otros niños. Algunos de los otros niños ven el libro y tienen curiosidad al respecto. Esa noche, le piden a Jonathan que les lea el libro en voz alta y se forma un grupo de lectura. Jonathan señala que los niños necesitarán tener cartas para entregar al barco de correo para evitar sospechas. Sebastián está de acuerdo en que los chicos deben seguir escribiendo cartas a casa. Después de leer la carta de Jonathan a sus padres, Benny (el secuaz de Sebastian) le dice que sabe la razón por la que Jonathan fue enviado a Slabhenge. Dice que vio el expediente de Jonathan en la oficina del almirante. Benny amenaza con revelar el secreto de Jonathan si no hace lo que Benny y Sebastian le dicen que haga. Sebastian se sienta en la silla del Almirante, come sus chocolates y blande la espada del Almirante. Cuando atrapa a uno de los niños sacando chocolates de la habitación del Almirante, le ordena que se arrodille en Sinner’s Sorrow. Colin se opone al castigo y señala que nunca lo votaron. Jonathan regresa a la biblioteca. Le pregunta al bibliotecario sobre la escotilla y el ruido que sale de ella. El bibliotecario explica que la escotilla es una puerta que está frenando el mar. Dice que el mar sube, la isla se hunde, o ambas cosas. El bibliotecario le da a Jonathan una copia de «Treasure Island» antes de irse. Jason, un niño que fue enviado al reformatorio por robar autos, es atrapado escribiendo un mensaje secreto en el reverso de un sobre que revela la situación de los niños y les pide a sus padres que envíen ayuda. Sebastian lo sentencia a 20 minutos en Sinner’s Sorrow. Indignado por los castigos de Sebastián, Colin toma un hacha y destruye el dolor del pecador. Luego huye a las entrañas del edificio y se esconde. A medida que se desarrolla una tormenta y comienza a crecer en intensidad, Jonathan visita nuevamente al bibliotecario y le pregunta sobre el faro. El bibliotecario le dice que está ubicado sobre la oficina del Almirante pero que no se ha utilizado en años. El bibliotecario le da a Jonathan una copia de «El señor de las moscas». Cuando Jonathan regresa de la biblioteca, Sebastian lo acusa de colaborar con Colin. Benny dice que no se puede confiar en Jonathan porque Jonathan inició un incendio que mató a su hermana Sophia. Jonathan solo dice que amaba mucho a su hermana. Sebastian está disgustado por las revelaciones sobre Jonathan y lo llama un «bicho raro». Los otros chicos también lo evitan. Jonathan va a buscar a Colin y lo encuentra escondido en una de las torres del edificio. Le dice a Colin que Benny lo acusó de matar a su hermana y Colin le pregunta a Jonathan qué pasó realmente. Jonathan explica que solía tener una fascinación por el fuego y encendía pequeños fuegos solo para ver crecer las llamas. Su hermana Sophia tomó sus fósforos, preocupada de que se metiera en problemas. Entonces, una noche se produjo un incendio en su casa. Trató de salvar a su hermana, pero el fuego estaba demasiado caliente. Colin dice que fue un accidente, pero Jonathan se culpa por la muerte de su hermana. A medida que empeora la tormenta, Jonathan regresa de visitar a Colin. Sebastian exige saber adónde fue Colin. Jonathan se niega a decírselo y Sebastian lo destierra. Jonathan regresa al escondite de Colin, pero descubren que Sebastian y sus muchachos lo siguieron. Sebastian golpea a Jonathan en la cara cuando entra en la habitación y ordena que inmovilicen a Colin. En ese momento, ven una figura en la puerta. Patrick, el repartidor de correo, ha venido a advertirles sobre la tormenta. Patrick les dice que la tormenta es un huracán de categoría cinco y que la marejada ciclónica podría tragarse la escuela y la isla. Sebastian ignora las advertencias y ordena que aten a Patrick y lo lleven a la sala de calderas. Para el castigo de Colin, Sebastian ordena que lo aten por una noche en una habitación en una parte remota del edificio y rocía migas de galleta y queso sobre su cuerpo para atraer ratas. Cuando los chicos regresan al comedor, descubren que está inundado. La tormenta ahora está reventando ventanas y rompiendo paredes. Escuchan un fuerte estruendo y Jonathan se da cuenta de que la escotilla se ha abierto. Jonathan insiste en que deben rescatar a Colin. Sebastian acepta darle una linterna a Jonathan y envía a dos niños a liberar a Patrick. Después de nadar en la oscuridad a través de los niveles inferiores ya inundados de la escuela, Jonathan logra desatar a Colin. Jonathan luego decide que debe advertir al bibliotecario sobre la tormenta. Cuando llega a la biblioteca, el bibliotecario le dice a Jonathan que debe llevar a los niños al faro, que dice será el único edificio que sobrevivirá a la tormenta porque fue construido sobre la roca original y no sobre arena. Jonathan le ruega al bibliotecario que los acompañe, pero el bibliotecario dice que nunca ha salido de la isla y desea morir allí. Jonathan regresa al comedor y le dice a Sebastian y a los otros niños que deben buscar refugio en el faro. Sebastian se muestra escéptico y Benny le dice que todavía no se puede confiar en Jonathan debido a su pasado. A instancias de Colin, Jonathan, entre lágrimas, finalmente dice que no inició el fuego esa noche, pero aún se culpa a sí mismo porque su hermana usó sus fósforos y aprendió a jugar con fuego de él. Se da cuenta de que fue una mala influencia para su hermana, pero es un pirómano arrepentido, no un asesino. Después de escuchar la historia completa, Jonathan recupera el respeto de los niños. y se dirigen al faro. Se dan cuenta de que necesitan combustible para encender el fuego del faro. Jonathan toma la llave de la oficina del Almirante, que ha estado escondiendo en su bolsillo, y abre la puerta. Encuentran sus archivos de delitos juveniles y los queman para encender el faro. Sebastian revela que la razón por la que nunca escribió una carta a casa fue que era un huérfano que creció en orfanatos y hogares grupales. Los otros chicos perdonan su intimidación después de escuchar su historia. En la última escena, él y Sebastian trabajan juntos para encender el faro para que le indique al mundo exterior que los rescate. Encuentran sus archivos de delitos juveniles y los queman para encender el faro. Sebastian revela que la razón por la que nunca escribió una carta a casa fue que era un huérfano que creció en orfanatos y hogares grupales. Los otros chicos perdonan su intimidación después de escuchar su historia. En la última escena, él y Sebastian trabajan juntos para encender el faro para que le indique al mundo exterior que los rescate. Encuentran sus archivos de delitos juveniles y los queman para encender el faro. Sebastian revela que la razón por la que nunca escribió una carta a casa fue que era un huérfano que creció en orfanatos y hogares grupales. Los otros chicos perdonan su intimidación después de escuchar su historia. En la última escena, él y Sebastian trabajan juntos para encender el faro para que le indique al mundo exterior que los rescate.
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