"El turista accidental" de Anne Tyler Traductor traducir
«El turista accidental» de Anne Tyler es una novela de ficción literaria que sigue la historia de Macon Leary, impulsada por el personaje, que debe navegar por la vida tras la muerte de su hijo y la disolución de su matrimonio. «El turista accidental» se publicó originalmente en 1985 y fue finalista del premio Pulitzer. «El turista accidental» es la décima novela de Anne Tyler y una de sus obras más reconocidas. Esta guía de estudio sigue la edición de bolsillo de Berkley publicada en 1986.
Macon Leary es un escritor con base en Baltimore que crea guías de viaje para personas que deben viajar por negocios pero que no quieren que les molesten molestias o experiencias inesperadas. Macon es un experto en encontrar las soluciones más cómodas y convenientes para los problemas promedio. Mientras regresa de unas vacaciones en la playa, la esposa de Macon, Sarah, le informa que quiere el divorcio. Ha pasado un año desde que su hijo, Ethan, fue asesinado inesperadamente, y los dos se han afligido de maneras muy diferentes. Después de que Sarah se muda, Macon reestructura su casa, creando una multitud de sistemas y artilugios para maximizar la comodidad y la conveniencia. Cuando llega el momento de que Macon se vaya en su próximo viaje de trabajo, va a abordar al perro de la familia, Edward. Se entera de que Edward está en la lista negra del veterinario por morder a un trabajador la última vez que fue abordado. Desesperado, Macon encuentra a otro veterinario, donde conoce a Muriel Pritchett. Muriel es habladora y buena con los perros. Ella acepta dejar que Macon aborde a Edward y propone que le dé lecciones de obediencia a Edward. Macon se niega y se va de viaje. Cuando regresa, se compromete con más sistemas para administrar la casa. Cuando estos sistemas fallan, Macon tiene un accidente que le rompe una pierna. Macon se muda con sus hermanos, Rose, Charles y Porter, mientras su pierna se cura. Los hermanos Leary son tan peculiares como Macon con sus hábitos, rituales y tendencias organizativas. No contestan el teléfono, comen papas al horno con frecuencia y juegan al mismo juego de cartas inventado que han jugado desde que eran niños. Los hermanos de Macon se quejan del comportamiento de Edward, pero Macon se esfuerza por hacer algo al respecto porque Edward le pertenecía a Ethan. Finalmente, después de ser mordido en la mano, Macon se acerca a Muriel, quien ha tratado persistentemente de que Macon la contrate desde que se conocieron. Muriel es genial con Edward y ayuda a Macon a enseñarle a Edward cosas como sentarse, quedarse quieto y caminar con correa. Edward lucha por aprender a acostarse, por lo que Macon llama al veterinario. El empleado le informa a Macon que Muriel está fuera ese día porque su hijo está enfermo. La próxima vez que Macon ve a Muriel, le pregunta cómo está su hijo y ella pierde los estribos porque se suponía que él aún no sabía nada de su hijo. Macon despide a Muriel en la misma escena porque ella castiga duramente a Edward. A medida que la pierna de Macon sana, lucha por superar el dolor por la muerte de Ethan y su separación de Sarah. Cuando Sarah invita a Macon a cenar, él le propone tener otro bebé para resolver sus problemas maritales. pero Sarah, en cambio, le dice a Macon que quiere el divorcio y cita su reacción aparentemente insensible después de la muerte de Ethan y la falta de consuelo para ella como su razón. Después de que Macon se quita el yeso, vuela a Nueva York para trabajar. Visita un restaurante en un rascacielos, donde tiene un ataque de pánico después de darse cuenta de que se ha distanciado de todos los que alguna vez le importaron. Llama a casa para pedir ayuda a pesar de que sus hermanos están lejos y se entera de que Edward se está portando mal y ha acorralado a Charles en la despensa. Macon no tiene a nadie más a quien llamar para ayudar a Charles y llevarse a Edward, así que llama a Muriel y le pide ayuda. Muriel no solo accede a rescatar a Charles, sino que también consuela a Macon y lo convence de su pánico. Cuando Macon regresa de Nueva York, permite que Muriel comience a entrenar a Edward nuevamente y los dos comienzan a pasar mucho más tiempo juntos. Muriel le cuenta a Macon todo sobre su vida y su hijo, Alexander. Ella invita a Macon a cenar en su casa, pero Macon tiene miedo de hacerlo, pensando que se sentirá como si estuviera encontrando sustitutos para Sarah y Ethan. Cuando Macon va a entregarle una carta a Muriel para explicarle por qué no quiere cenar con ella, ella lo sorprende con su ternura, y Macon se sincera sobre su dolor por Ethan y la forma en que se ha distanciado de todos. Muriel invita a Macon a dormir en su cama y él le permite llevarlo a su habitación y arroparlo. Macon comienza a pasar mucho más tiempo con Muriel y Alexander, cena con ellos, ayuda a Alexander con su tarea y se une a ellos. en casa de los padres de Muriel por Navidad. La relación de Macon con Muriel lo cura y lo ayuda a distanciarse menos de las personas que lo rodean. Se muda con ella y llega a conocer a la gente de su calle mejor que a sus propios vecinos. Forma un vínculo especial con Alexander, enseñándole a arreglar artículos para el hogar y llevándolo a comprar ropa. Eventualmente, las tendencias de Muriel comienzan a desgastar a Macon. Le molesta su mal uso de las palabras, su persistencia, sus inseguridades y su caos. Muriel intenta convencer a Macon de que la lleve a Francia, pero Macon le dice que no. Muriel le presenta a Macon un calendario para el año en curso para mostrarle que ha elegido un día de boda para ellos. Macon le dice que no está interesado en volver a casarse porque cree que solo las parejas perfectas se casan, lo que genera una discusión y más tensión entre la pareja a medida que pasa el tiempo. Después de encontrarse con Sarah en una boda, Macon descubre que Sarah se acerca cada vez más a él durante un viaje a Canadá. Sarah lo llama a todas las ciudades, al principio preguntando si puede volver a mudarse a su casa porque su contrato de arrendamiento está por terminar, y luego solo queriendo hablar sobre el clima. Ella insinúa que quiere volver a estar con Macon y le dice que desearía estar con él en Canadá. Cuando Macon aterriza de regreso en Baltimore, conduce a casa de Sarah en lugar de conducir a la casa de Muriel. Reavivan su relación, para gran angustia de Muriel. Macon y Sarah comienzan a reconstruir sus vidas, compran muebles nuevos y vuelven a armar la casa después de que una tormenta de nieve la dañó durante la ausencia de Macon. Cuando Sarah no está cerca, Macon se encuentra deseando hablar con alguien. Él llama a Muriel para preguntarle sobre las inyecciones para la alergia de Alexander, y Muriel lo regaña por tener la audacia de contactarla sobre Alexander después de abandonarlos. Cuando Macon se va a Francia, Muriel aparece en su mismo vuelo, habiendo reservado el mismo hotel. Muriel insiste en que Macon la necesita, y Macon siente que Muriel no estará muy preparada para viajar a París. Macon hace todo lo posible por evitar a Muriel, y ella se las arregla bien sin él. Eventualmente accede a cenar con ella en un Burger King en París, donde Muriel le cuenta a Macon sobre la gente de su calle. Ella le pide que se acueste con ella, pero Macon se niega. Después de varios días en París, Macon inicia excursiones de un día a otras ciudades. Cuando va a invitar a Muriel a unirse a él, tira la espalda y queda incapacitado. Llama a su editor para informarle del retraso, y la noticia llega a Sarah, que se presenta en París para cuidar de Macon. Ella le informa a Macon que vio a Muriel y él le dice que ella lo siguió a Francia por su propia voluntad. Sarah se emociona por tener una segunda luna de miel con Macon mientras están en Francia. Una noche, le pregunta a Macon por qué no hizo nada para evitar que Muriel subiera al avión con él. Macon no tiene una respuesta y se da cuenta de que nunca ha tomado decisiones importantes en su vida por su cuenta. Todo lo que le ha pasado ha sido el resultado de aceptar pasivamente las cosas. Se queda despierto toda la noche pensando y finalmente decide regresar con Muriel, dándose cuenta de que ella es mejor para él.
- «Redhead by the Side of the Road» by Anne Tyler
- «A Spool of Blue Thread» by Anne Tyler
- «The Acharnians» by Aristophanes
- «The Acts of King Arthur and His Noble Knights» by John Steinbeck
- «The Adoration of Jenna Fox» by Mary E. Pearson
- «The 7 Habits of Highly Effective People» by Stephen R. Covey
- «The Adventures of Augie March» by Saul Bellow
- «The 7 Habits of Highly Effective Teens» by Sean Covey
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