Italia puede decir adiós al Museo de Arte Moderno Traductor traducir

Muchos museos italianos atraviesan una grave crisis debido a los importantes recortes del presupuesto cultural. El último caso son los graves problemas que atraviesa el museo de arte contemporáneo del siglo XXI de Roma, Maxxi. Inaugurado hace poco más de dos años, su dirección está presentando graves denuncias contra el Ministro italiano de Bienes Culturales.

El museo no ha recibido los once millones de euros prometidos para el periodo 2012-2014 debido a lo que, según el Ministerio, es un «agujero» en su propia financiación. La clave para solucionar el problema, según la dirección del museo, está en los patrocinadores privados e institucionales, que actualmente no tienen preferencias decentes por parte del Estado.

El Museo de Arte Contemporáneo para el Siglo XXI de Roma, diseñado por la arquitecta iraquí Zaha Hadid, abrió sus puertas en noviembre de 2009 y es el primer museo público nacional dedicado al arte contemporáneo. Está gestionado por la Fundación Maxxi «» bajo la dirección del arquitecto Pio Baldi. Afirma con orgullo que el nuevo centro de exposiciones es un indudable éxito de público: 450.000 visitantes solo en 2011, autofinanciado al 50%, a pesar de la reducción del 43% de la financiación pública con respecto a 2010.

Muchos creen que el Maxxi va bien porque «autofinanciar la mitad del presupuesto no tiene precedentes en Italia», según el ex ministro de Cultura y presidente del partido centrista UDC, Rocco Buttiglione, contrario a la decisión del Ministerio de nombrar a un comisario para dirigir el museo.

El problema de la reposición de las cuentas del Maxxi se habría resuelto con patrocinadores institucionales y privados. El potencial de los museos es grande en este aspecto, pero el problema es que en Italia no existe una política, como en otros países, que fomente dicho mecenazgo con exenciones fiscales tangibles.