92 obras de arte robadas hace más de una década se exponen en un castillo de Pas de Calais Traductor traducir

La historia parece increíble. El miércoles 22 de mayo, la policía anunció que un registro había descubierto un gran número de obras de arte (al menos 92, según la nueva información publicada el jueves 23 de mayo) que habían sido robadas entre 2009 y 2013 de las cámaras acorazadas del Museo Sandelin de Saint-Omer, Pas-de-Calais (Alta Francia), así como de iglesias cercanas. Pero lo más intrigante de todo es el lugar donde se encontraron: a sesenta kilómetros de la ciudad, se exponen en un castillo abierto al público.

Los objetos desaparecidos fueron descubiertos por un aficionado a la cerámica que, durante una visita al castillo Sercamp de Frevin (Pas-de-Calais), se fijó en una base de barómetro de cerámica que sabía que pertenecía al museo Sandelin, con el que se puso inmediatamente en contacto. El conservador del museo, Romain Saffre, se desplazó entonces al lugar y descubrió con sorpresa que muchos de los objetos y obras -cuadros, estatuillas, medallones, porcelanas y un abanico antiguo- que habían adornado el castillo guardaban un asombroso parecido con los que habían desaparecido de las bóvedas del museo. Esta desaparición se descubrió durante un inventario realizado en 2013. La ciudad de St-Omer presentó entonces una denuncia y se aceleró la investigación policial.

200 obras siguen desaparecidas

El tesoro más valioso encontrado fue desvelado el 23 de mayo, junto con otros siete objetos, en una rueda de prensa dirigida por el conservador del museo, Sandelin: se trata de una «magnífica arqueta de bronce dorado del siglo XVIII» decorada con «escenas en miniatura dibujadas con extrema finura» y valorada en varios cientos de miles de euros.

Un hombre sospechoso de estar implicado en el robo ha sido detenido y la investigación (a la que se ha sumado un agente de la Oficina Central francesa de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Bienes Culturales) sigue su curso. Hasta el momento, se han devuelto 46 obras y objetos al museo y a las iglesias de San Sepulcro y San Denis, también situadas en St Omer. Según el conservador Romain Saffre, de los 280 objetos desaparecidos de las bóvedas del Museo Sandelin y de las iglesias cercanas, aún faltan unos 200.

El castillo de Sercamp dice no saber nada del robo y espera a que la investigación siga su curso. Este edificio protegido, situado en un parque de 33 hectáreas, se describe en su sitio web como una antigua abadía cisterciense (antes de la Revolución Francesa) que luego se convirtió en fábrica de tejidos de lana, residencia de los barones Furman y cuartel general del mariscal Foch en 1915. Del 1 de mayo al 30 de septiembre se pueden visitar su recinto y sus veinte salas amuebladas y decoradas, entre las que se encuentran «el dormitorio de Foch» y varios salones, algunos decorados con paneles de madera antiguos.

El propietario es Serge Dufour (nacido en 1955), guía turístico y aficionado a la historia. Compró el castillo en 2012 con su socio Patrick Bertreux (fallecido en 2021) y lo restauró poco a poco, siendo objeto de varios artículos en la prensa local.

A finales de 2021, el sitio web actu. fr publicó un artículo que describía «las luchas cotidianas» de este propietario de castillo (que, aunque en las fotografías se parece en todo a Serge Dufour, responde al extraño nombre de Eric Du Four), su «sacerdocio» y su «vida nada fácil», la vida de un hombre apasionado que se dedica a un negocio «poco rentable» y que «sangra» para «preservar el patrimonio» - el mantenimiento del castillo cuesta 50.000 euros al año, que están lejos de cubrir los 3.500 visitantes anuales. «A través de una serie de transacciones, préstamos y donaciones, Eric Du Fur ha conseguido devolver el encanto de antaño a muchas habitaciones decoradas con elementos del siglo XVIII», reza el pie de foto de ese artículo.