Giovanni Bellini: pintor renacentista italiano, fundador de la escuela veneciana Traductor traducir
Biografía
Uno de los más grandes e influyentes. Viejos maestros de Arte renacentista Giovanni Bellini fue una gran influencia en Pintura veneciana y sobre la transformación de Venecia de un centro artístico menor a una potencia del Renacimiento italiano rivalizando con Florencia y Roma en importancia. En particular, estableció una escuela distinta de Pintura del alto renacimiento, basado en un estilo más suntuoso y colorista. Al emplear pinturas al óleo claras y de secado lento, fue capaz de crear tintes profundos, sensuales, tonos y sombreados detallados, y así producir pinturas y retratos religiosos sobresalientes, así como maravillosos paisajes atmosféricos. El mejor pintor de la Renacimiento en Venecia, sus métodos tuvieron un gran impacto en sus contemporáneos y alumnos, como Giorgione (1477-1510) Sebastiano del Piombo (1485-1547) y Tiziano (c.1485 / 8-1576). Además de esto, creó algunos de los mejores dibujos del renacimiento. Las pinturas famosas de Giovanni Belli incluyen: Transfiguración de Cristo (c.1480, Museo di Capodimonte, Nápoles); Retrato de Jorg Fugger (1474, Galleria Palatina, Palazzo Pitti, Florencia); Éxtasis de san francisco (c.1480, Colección Frick, Nueva York); Alegoría Sagrada (c.1490, Galería de los Uffizi, Florencia); Retrato del dux Leonardo Loredan (1501, National Gallery, Londres); el retablo de San Zaccaria (1505, Venecia); y Madonna of the Meadow (1510, Galería Nacional, Londres).
Formación
Giovanni Bellini nació en Venecia en una familia de Artistas del renacimiento temprano – su padre era Jacopo Bellini (1400-1470), su hermano era Bellini gentil (1429-1507), y su cuñado fue Andrea Mantegna (1430-1506). Al igual que su hermano Gentile, aprendió dibujo y pintura, así como los rudimentos de los aceites, en el taller de su padre. Sus primeros trabajos, principalmente arte religioso – fueron en general pinturas de paneles ejecutado en un estilo bizantino bastante rígido, usando pintura al temple, y transmitió un grado de intensidad religiosa.
Influencia de Andrea Mantegna
Durante este período temprano en la vida de Giovanni Bellini, la mayor influencia en su pintura fue su cuñado, Andrea Mantegna. La Crucifixión de Bellini (1455) en el Museo Correr de Venecia, demuestra cuán bien había absorbido las lecciones de Mantegna, especialmente en el escorzo del cuerpo de Cristo y el tratamiento de las rocas sobre las que se planta la cruz. Al mismo tiempo, la propia personalidad artística de Giovanni emerge fuertemente en la forma en que el drama de la Crucifixión se humaniza por su entorno, con el cuerpo de Cristo en un paisaje fluvial a la luz del amanecer. En la famosa Piedad (1460, Pinacoteca di Brera Milán), el suave mármol de Mantegna es convertido por Bellini en carne sufriente.
los Piedad presagia la obra maestra de la década de 1460-70, el Políptico de San Vicente Ferrer (1464, Venecia, Iglesia de los SS. Giovanni y Paolo). La pintura es notable por su uso de la luz, que brilla de arriba a abajo de las figuras de los santos, describiéndolas con una incisividad y energía que recuerdan algunos aspectos del trabajo de Andrea del Castagno (c.1420-57). La figura de San Cristóbal se encuentra en un paisaje con el sol bajo en el horizonte, contra el sol poniente, las orillas del río se reflejan, en perspectiva, como el cielo, en el agua transparente del río. Es esta pasión por el hombre y la naturaleza lo que separa a Bellini de Mantegna, de quien tomó su uso del espacio, pero no la esquematización y la preocupación de su cuñado por los detalles arquitectónicos.
Influencia de Piero della Francesca
Bellini se sintió atraído hacia el trabajo de Piero della Francesca (1420-92), en el que las leyes de la perspectiva se pusieron al servicio de fines exaltados. La influencia de Piero se puede ver claramente en la Coronación de la Virgen (Museo de Pesaro), que algunas autoridades datan alrededor de 1473 y otras entre 1470 y 1471. El espacio ya no está dividido, como lo está en los polípticos del período, sino unificado por perspectiva lineal, reúne de una nueva manera los edificios, las figuras, el trono y el paisaje. El conocimiento de las obras de Piero della Francesca fue obviamente esencial para esta maduración del arte de Giovanni y, como la llegada de Antonello da Messini a Venecia en 1475 (ver más abajo), fue decisivo para el curso futuro de la pintura veneciana. Fue la conjunción de estas dos circunstancias lo que, alrededor de 1475, trajo el Renacimiento temprano a Venecia y condujo a la obra original del último cuarto de siglo; véanse, por ejemplo, las obras de Carpaccio (1460-1525 / 6), Cima di Conegliano (1460-1517 / 8) y Bartolomeo Montagna (1450-1523). Nota: Para detalles de dibujos de artistas del Renacimiento en Venecia, ver: Dibujo veneciano (c.1500-1600).
Frescos y retablos religiosos
Durante la mayor parte de su carrera de pintura, Giovanni Bellini se concentró en obras de arte religiosas (murales al fresco y arte de retablo), excepto ejemplos ocasionales de arte de retrato, como su famoso Retrato del dux Leonardo Loredan (1501). En 1470, fue nombrado junto con su hermano y otros artistas para producir un ciclo de pinturas decorativas para la Scuola di San Marco. Esto fue seguido por una serie de grandes históricos pinturas al fresco para la Cámara del Gran Consejo en el Palacio Ducal. Desafortunadamente, no hay obras sobrevivientes de la Scuola di San Marco, y todas las de Giovanni (y Gentile) pintura mural en el palacio ducal fueron destruidos en el catastrófico incendio de 1577. El retablo de tempera aún más famoso de Giovanni en la iglesia de S. Giovanni e Paolo fue destruido, junto con Peter Martyr de Tiziano y la Crucifixión de Tintoretto, en un incendio en 1867. Para más información sobre Giovanni El talento de Bellini para la pintura religiosa, ver: Retablos venecianos (c.1500-1600).
Medio de pintura al óleo
Giovanni Bellini fue uno de los primeros pintores venecianos en dedicarse al medio de pintura al óleo. Después de 1475, abandonó el temple y pintó casi exclusivamente en óleos, un medio en el que rápidamente se convirtió en un maestro consumado, en una clase similar a la florentina. Leonardo Da Vinci. La razón probable de esta fascinación por los aceites fue la visita del artista siciliano. Antonello da Messina (c.1430-1479), quien llegó a Venecia en 1475-6, habiendo absorbido las últimas técnicas de pintura al óleo en Nápoles, una ciudad dominada artísticamente por la escuela de Pintura flamenca y por el Renacimiento holandés. Sus pinturas combinaban la habilidad italiana en anatomía y composición, con el realismo holandés, y brillaban con una intensidad intensa. El genio de Giovanni Bellini le permitió transferir estos atributos a sus nuevas obras, mientras le daba a sus figuras una expresión de contemplación pacífica. Como dijo un experto de Bellini: "Algunos artistas inventaron más, pero ninguno perfeccionó tanto". Además, continuó innovando y manteniéndose actualizado, tomando prestados y luego armonizando las ideas de sus alumnos y contemporáneos.
En cualquier caso, la visita de Antonello da Messina galvanizó a Bellini, cuyas pinturas al óleo comenzaron a exudar una nueva luminosidad y riqueza. (Para más información, ver: Retrato veneciano pintura 1400-1600.) Sutil variación tonal se hace más evidente y una nueva calidad atmosférica entra en su trabajo. Por ejemplo, su maravilloso pasado. pintura de paisaje, como se ve en muchas de sus imágenes de la Madonna, lo convierten en el pintor paisajista italiano más importante del Renacimiento temprano. Estos fondos paisajísticos explorados con amor de Giovanni, dominados por verdes profundos y cielos que, claros al amanecer, se tiñen ligeramente al atardecer, son menos sistemáticos en su clasicismo que los de Mantegna. El espectador descubrirá en ellos sentimientos que no tienen nada que ver con el mundo restringido de Mantegna. Por lo tanto, en The Agony in the Garden (c.1460, National Gallery, Londres), que se deriva de la pintura de Mantegna sobre el mismo tema (1457, Museo de Tours), Bellini trae el paisaje a la vida por su vivo sentimiento por el color y la luz., conservando la estructura geológica inspirada en Mantegna.
Pinturas maduras
La resurrección de Cristo (Staatliche Museen, Berlín) puede datarse alrededor de 1480, al igual que San Jerónimo Lectura en el campo (Galería Nacional, Londres) y San Francisco en éxtasis (Nueva York, Colección Frick). En estos trabajos, Bellini continuó expresando formalmente la relación entre el hombre y la naturaleza, llenando el espacio racional de los toscanos con la variedad infinita del paisaje italiano y toda la gama de sentimientos humanos (por ejemplo, el de la maternidad en sus numerosos estudios). de la Virgen y el niño). Además, cada detalle tiene su parte que desempeñar en la disposición general del espacio. En Lamentación sobre el cuerpo de Cristo (c.1485-1500, Uffizi, Florencia) Bellini primero despliega ideas que debía elaborar en un grupo de obras pintadas un poco más tarde. La imagen ha sido descrita como, por un lado, "una pintura en perspectiva estrictamente medida", con planos audaces inspirados en Antonello y, por el otro, como "un espacio ampliado, ya no vacío sino enriquecido con una atmósfera que endulza las relaciones entre los volúmenes ". La distribución perfectamente calculada del espacio en el tríptico Frari (1488, Santa Maria Gloriosa dei Frari, Venecia) revela la influencia de su abstracción y el rigor geométrico de sus volúmenes; Al mismo tiempo, en La Transfiguración (c.1480-5, Museo Capodimonte, Nápoles), una nueva luminosidad llena la composición y suaviza los contornos de los planos. En el universo cerrado del retablo de San Giobbe (1487, Galería de la Academia de Venecia) la luz, llena de sombras y reflejos dorados de la mosaicos, envuelve los volúmenes y humaniza todo lo que Bellini le quitó a Antonello.
La búsqueda de Bellini de un espacio más regular, más solemne y monumental estuvo acompañada por un intento de lograr mayores efectos pictóricos, y sus obras de este período (ver, por ejemplo, el Retablo de Barbarigo (1488, San Pietro Martire, Murano)) prefiguran tendencias del siglo XVI. La serie de pinturas de la Virgen y el Niño, que data de alrededor de 1490, muestra un sorprendente dominio del espacio renacentista y una inventiva aparentemente inagotable comparable a la de los primeros retratos de Tiziano.
De sus diversas estancias en el Véneto, Romaña y las Marcas, Bellini trajo de vuelta una visión de las ciudades medievales amuralladas, rodeadas de colinas fértiles y de ríos atravesados por puentes antiguos, una visión que ofrece la visión más profunda del paisaje italiano. En él se puede seguir el curso del pasado, con campanarios de Rávena que se encuentran al lado de campanarios romanos y torres góticas. Es un paisaje histórico basado completamente en el paisaje natural, en el que la naturaleza misma, como esas colinas dispuestas por la mano del hombre, adquiere un significado que también es histórico. Los colores brillantes y los detalles, derivados de Piero della Francesca, son menos el resultado de una búsqueda de realismo que una conciencia muy viva del mundo. Los volúmenes espaciales parecen producirse naturalmente a partir del juego de luces, mientras que el riguroso plan de perspectiva está oculto por la libre orquestación de tonos.
La alegoría sagrada (c.1490, Galería de los Uffizi, Florencia) anuncia el nuevo siglo. Obras como esta y la Piedad (1505, Academia, Venecia), la Virgen del Prado (1510, Galería Nacional, Londres), El bautismo de Cristo (1500-2, Iglesia de S. Corona, Vicenza) y La San Zaccaria El retablo (1505, Iglesia de S. Zaccaria, Venecia) puede haber inspirado a Durero a etiquetar a Bellini como el pintor veneciano más importante de su época. Los paisajes de Bellini de este período adquieren un lirismo otoñal y las figuras en ellos adquieren una nueva libertad. En el retablo de San Zaccaria parecen cobrar vida en la brillante luminosidad del ábside, mientras que el color, impregnado de sombras y luz, aquí es igual al de Giorgione en su momento más inspirado. (Ver también: Pintura en color tiziano y veneciano c.1500-76.)
Últimos años
Aunque extremadamente ocupado durante los años 1480, 1490 y 1500, la mayor parte de esta producción no ha sobrevivido. En 1507 Gentile Bellini (hermano de Giovanni) murió y legó el importante libro de diseños de su padre Jacopo a Giovanni, con la condición de que completara la imagen inacabada de Gentile San Marcos predicando en Alejandría (1505, Pinacoteca di Brera, Milán). Esta condición se cumplió debidamente.
Las obras de los últimos años de Giovanni Bellini – Madonna and Child Blessing (1510, Pinacoteca di Brera); El retablo de S. Giovanni Crisostomo (1513, Iglesia de S. Giovanni Crisotomo) está estampado con la monumentalidad y las cualidades pictóricas de las obras de sus jóvenes contemporáneos, Giorgione y Tiziano. Bellini, uno de los creadores del nuevo estilo, se adaptó perfectamente a él. Vea: Mujer con espejo (1515, Kunsthistorisches Museum, Viena). Su clasicismo no hizo distinción entre lo sagrado y lo profano y no se vio afectado por el nuevo gusto por los temas clásicos o seculares. Más bien, estos temas le permitieron contrarrestar el clasicismo demasiado sistemático de la nueva generación. De sus Drunkennes de Noé (c.1515-16, Museo Besançon) emerge un apego profundamente joven a la vida, un abandono a la existencia, el rojo fresa de las cortinas, la carne viva y dorada de Noé mientras yace extendido sobre él. su espalda, el tierno verde de la hierba, la copa tocada por la luz polvorienta, se colocan sobre un fondo de enredaderas y follaje otoñal. Su clasicismo sigue siendo el mismo en esta afirmación provocativa y naturalista, que solo en su vejez desarrolló su carácter intransigente. Hay algunos otros ejemplos de una evolución como la de Bellini: un artista que llevó la pintura veneciana desde la falta de vida del final de la era gótica hasta el umbral de la pintura moderna.
Bellini permaneció ocupado hasta el final. Continuó siendo inundado con comisiones hasta los 70 años, y todavía estaba muy involucrado en la supervisión de las pinturas en el Salón del Gran Consejo en el palacio del dux. En 1514 acordó pintar La fiesta de los dioses para el duque Alfonso I de Ferrara, pero murió en 1516.
Reputación y legado
Durante su vida, fue reconocido como el pintor principal de su época, siendo descrito por el gran pintor y grabador alemán. Albrecht Durer (1471-1528), durante su visita de 1506 a Venecia, como "el mejor pintor de todos". El biógrafo renacentista Giorgio Vasari estaba igualmente convencido de la grandeza de Giovanni Bellini.
Giovanni Bellini desempeñó un papel vital en el desarrollo de la Escuela de Venecia, especialmente en su uso del Renacimiento del Norte. estética. Fue pionero en la utilización de pinturas al óleo, permitiendo los colores mejorados y los efectos atmosféricos que más tarde se convirtieron en el sello distintivo de la pintura veneciana, e introdujo elementos de Renacimiento del norte simbolismo religioso Hizo todo esto mientras también mezclaba Arte bizantino con el de la quattrocento . Sus alumnos pueden haber incluido Vittore Carpaccio (c.1465-1525 / 6), e incluyó a Giorgione (1477-1510), Tiziano (1485-1576) y Fra Bartolommeo (1472-1517) (en 1508), así como Vittore Belliniano, Andrea Previtali, Rocco Marconi, Jacopo da Montagna, Rondinello da Ravenna, Girolamo da Santacroce y Benedetto Coda de Ferrara. Para una vista general, vea también: Legado de la pintura veneciana sobre el arte europeo
Para miembros posteriores de la escuela veneciana, ver también biografías de Jacopo Tintoretto (1518-1594) y Paolo Veronese (1528-1588).
Obras seleccionadas de Giovanni Bellini
Las pinturas de Giovanni Bellini se pueden ver en muchos de los mejores museos de arte alrededor del mundo. Aquí hay una pequeña selección de sus obras más importantes.
Términos de pintura
Ver: Díptico (Imagen de 2 paneles); Tríptico (Imagen de 3 paneles); Políptico (multi).
Pinturas más famosas
Otras pinturas
Virgen con el niño (1450-1555) Civico Museo Malaspina, Pavía
Madonna with Child (c.1455) Metropolitan Museum of Art, Nueva York
Cristo muerto apoyado por Madonna / San Juan (1455) Accademia Carrara
Crucifixión (c.1455) – Temple sobre madera, Museo Correr, Venecia
Pieta (1460-5) Pinacoteca di Brera Milán
Cristo muerto apoyado por dos ángeles (Pietà, c. 1460) Museo Correr, Venecia
Cristo muerto en el sepulcro (c.1460) Museo Poldi Pezzoli, Milán
Bendición de Cristo (c.1460) Museo del Louvre, París
La Sangre de Cristo (c.1460) National Gallery, Londres
Virgen con el Niño (1460-1464) Civiche Raccolte d’Arte, Milán
Virgen con la bendición del niño (1460-1464) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Virgen con el niño (Virgen griega, 1460-1464) Pinacoteca di Brera, Milán
Madonna y el niño (1460-1464) Accademia Carrara, Bergamo
Presentación en el Templo (1460-1464) Galleria Querini Stampalia, Venecia
Tríptico de San Sebastián (1460-1464) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Tríptico de Natividad (1460-1464) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Cabeza del Bautista (1464-1468) Musei Civici, Pesaro
Políptico de S. Vincenzo Ferrer (1464-1468) Basílica de los Santos Giovanni
Retablo de Pesaro (1471-1474) Musei Civici, Pesaro
Pieta (1472) Palacio Ducal, Venecia
Cristo muerto apoyado por ángeles (c. 1474) Pinacoteca Comunale, Rimini
Madonna entronizada adorando al niño dormido (1475) Gallerie dell’Accademia
Virgen con el niño (c.1475) Museo di Castelvecchio, Verona
Virgen con el niño (c.1475) Santa Maria dell’Orto, Venecia
Madonna en Adoración del niño dormido (c.1475) Contini Bonacossi
Virgen con el Niño Bendito (1475-1480) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Retrato de un humanista (1475-1480) Civiche Raccolte d’Arte, Milán
Resurrección de Cristo (1475-1479) Staatliche Museen, Berlín
San Jerónimo leyendo en el campo (1480-1485) National Gallery, Londres
Madonna Willys (1480-1490) Museo de Arte de Sao Paulo, Sao Paulo, Brasil
Madonna y el niño (1480-1490) Accademia Carrara, Bergamo
Virgen de los Ángeles Rojos (1480-1490) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Retrato de un joven vestido de rojo (1490) National Gallery of Art, Washington DC
Madonna degli Alberetti (1487) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Madonna and Child (1485-1490) Metropolitan Museum of Art, Nueva York
Retablo de San Giobbe (c. 1487) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Madonna con niño y Sts. Pedro y Sebastián (c.1487) Louvre, París
Tríptico Frari (1488) Santa Maria Gloriosa dei Frari, Venecia
Retablo Barbarigo (1488) San Pietro Martire, Murano
Conversación Sagrada (1490) Museo del Prado, Madrid
Alegorías (c.1490) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Lamentación sobre el cuerpo de Cristo (c.1500) Galería de los Uffizi, Florencia
Anunciador de ángeles y Virgen anunciada (hacia 1500) Gallerie dell’Accademia
Retrato de un hombre joven (ca.1500) Musee du Louvre, París
Retrato de un joven senador (1500) Galería de los Uffizi, Florencia
Bautismo de Cristo (1500-1502) Santa Corona, Vicenza
Jefe del Redentor (1500-1502) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Virgen con el Niño con San Juan Bautista (1504) Gallerie dell’Accademia
Sermón de San Marcos en Alejandría (1504-1507) Pinacoteca di Brera, Milán
Santa conversación (1505-1510) Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid
Retablo de San Zaccaria (1505) San Zaccaria, Venecia
Pieta (1505) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Madonna & Child con SS Peter, Catherine, Luisa, Jerome (1505) S. Zaccaria
San Jerónimo en el desierto (1505) Galería Nacional de Arte, Washington DC
El asesinato de San Pedro Mártir (1507) National Gallery, Londres
Continencia de Escipión (1507-1508) Galería Nacional de Arte, Washington DC
Asesinato de San Pedro Mártir (1509) Courtauld Gallery, Londres
Madonna y Bendición de los Niños (1510) Pinacoteca di Brera, Milán
Virgen con el niño (c.1510) Galleria Borghese, Roma
Joven Baco (c.1514) Galería Nacional de Arte, Washington DC
Retrato de Teodoro de Urbino (1515) National Gallery, Londres
Deposición (c.1515) Gallerie dell’Accademia, Venecia
Drunkennes de Noé (c.1515) Musee des Beaux-Arts, Besancon
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