Christ carrying the Cross (follower) Hieronymus Bosch (1450-1516)

Descripción de El Bosco en la Cruz

El Bosco es uno de los maestros del Renacimiento del Norte cuyo estilo sigue siendo difícil de definir para los especialistas. Se dice que era un loco o un sectario. Que con sus cuadros describía la magia negra que practicaba o presenciaba. O que era un surrealista, que salpicaba las imágenes en el lienzo directamente desde el subconsciente: su nombre aparece a menudo junto al de Salvador Dalí.

En cualquier caso, los cuadros del Bosco están pintados con la técnica "alla prima", que consiste en aplicar la pintura al lienzo en una sola capa, en lugar de varias, sin largas esperas, y están llenos de monstruos, interpretaciones poco evidentes y significados profundos. Para algunas personas, inspiran admiración. Para algunos, asco.

"Carrying the Cross" es uno de sus cuadros de temática religiosa. Sólo tiene un plano, lo más aproximado posible. Da la impresión de ser un fotograma cinematográfico estático de una espeluznante película de animación sobre la subida de Cristo al Calvario. Sólo se distinguen los rostros, y los rostros son poco comunes.

Las narices hipertrofiadas, las bocas abiertas, la falta de dientes, la rabia, el asco, la condescendencia, la burla... provocan repulsión y ganas de apartarse. Hay entre ellos un ladrón arrepentido que quiere morir, cuyo rostro parece ya muerto, gris, y otros dos ladrones, que gritan furiosos, odiando al mundo entero. Están los fariseos y los sacerdotes, y en toda la horrenda bacanal sólo Cristo con la cruz sobre los hombros y Santa Verónica con el paño parecen normales.

Sus rostros son brillantes, sus rasgos están llenos de serenidad y paz, sus ojos están cerrados, protegiéndolos de la abominable acción que ocurre a su alrededor.

El momento mismo de este ascenso, el de llevar la cruz, es un triunfo de la insensatez, la mezquindad, el odio, la envidia, el orgullo, el amor propio y la codicia, lo que se entiende perfectamente en la pintura del Bosco.