Napoleon Bonaparte in the Uniform of the First Consul Jean Auguste Dominique Ingres (1780-1867)

Descripción de un cuadro de Jean Auguste Engres, Cónsul Napoleón

Engres no era ni revolucionario, ni conservador, ni romántico. Sobre todo le interesaba la forma. No es una forma ideal, sino que está relacionada con la peculiaridad de los objetos representados.

"Cónsul Napoleón" es el primer retrato napoleónico de Ingres.

El segundo retrato fue pintado dos años después, cuando Napoleón ya era emperador.

Vemos el retrato de un joven con un uniforme de terciopelo rojo. Está de pie, de cuerpo entero, junto a la mesa, con la mano derecha sobre un pergamino. Ya entonces nació el famoso gesto napoleónico: su mano izquierda se oculta tras el borde del uniforme. En el fondo hay cortinas oscuras y a juego que hacen que el momento sea aún más solemne. Desde la ventana se puede ver el castillo.

Ingres fue el primero en reducir el arte a una peculiar visión de artista. Aunque sus lienzos tienen una orientación clásica, su obra fue de gran interés para los artistas de las generaciones posteriores de impresionistas, postimpresionistas e incluso el propio Pablo Picasso.

A Napoleón le interesaba Ingres no tanto como un gran conquistador, sino más bien como una figura histórica capaz de establecer y alcanzar objetivos. En la comprensión del artista de Bonaparte - el héroe de Francia.

Engres nunca fue un pintor-batallista. Por eso el cuadro no representa al general Napoleón, un hombre con una carrera militar única, que ya ha pasado por varias campañas famosas, sino a un Napoleón político, que ha cambiado por completo la vida política del país. Esto se aprecia en la vestimenta civil del cónsul y en sus expresiones faciales, tal y como las transmite el artista.

Hasta cierto punto, el cuadro no tuvo éxito. Engres estaba a punto de enviar el retrato a una exposición, pero para entonces Napoleón había asumido el título imperial. En consecuencia, el cuadro, que lo representaba como cónsul, perdió relevancia.

Hoy en día, el "Retrato del Cónsul" está considerado como una de las mejores representaciones del joven Napoleón.