"Raymie Nightingale" de Kate DiCamillo Traductor traducir

«Raymie Nightingale» es una novela de grado medio de 2016 escrita por Kate DiCamillo, dos veces ganadora de la Medalla Newbery. La novela fue finalista del Premio Nacional del Libro en el año de su publicación. Ambientada en Florida en el verano de 1975, cuenta la historia de Raymie Clark, de 10 años, mientras se enfrenta a la pérdida y forma una profunda amistad que la ayuda a ella y a sus nuevos amigos de maneras inesperadas.

Raymie Clark está decidida a ganar el concurso Little Miss Central Florida Tire como una forma de atraer a su padre, que acaba de fugarse con una higienista dental. Ella cree que si gana el concurso su padre verá su rostro en el periódico, se dará cuenta de su terrible error y regresará a casa. Para ganar el concurso, Raymie necesita presentar un talento ante los jueces. Con el apoyo de la amable secretaria de su padre, la Sra. Sylvester, Raymie decide aprender a girar la batuta y se inscribe en lecciones de giro con la ex campeona de batuta Ida Nee. En el patio trasero de Ida Nee, Raymie conoce a Beverly Tapinski y Louisiana Elefante, dos jóvenes que también están tomando lecciones y participando en el mismo concurso. Beverly ya es una experta en el juego y sólo está tomando lecciones ante la insistencia de su madre abusiva. El padre de Beverly la abandonó y se mudó a Nueva York cuando ella era joven. Sin ningún interés real en ganar, Beverly está decidida a sabotear el concurso, tanto para salir de él como para vengarse de su madre. Beverly se ha escapado dos veces antes, intentando llegar a Nueva York. Es una joven intrépida y astuta, pero con el tiempo los demás ven a la amiga leal bajo su dura coraza protectora. Louisiana, una huérfana, vive en la pobreza con su excéntrica pero amorosa abuela. A pesar de sus trágicas pérdidas, Luisiana es optimista, imaginativa y esperanzada. Según Luisiana, sus padres eran famosos trapecistas que murieron cuando su barco se hundió. Su imaginación fantástica la ayuda a afrontar las tragedias del pasado. Su principal objetivo es sacar a su abuela y a ella misma de la pobreza ganando el premio en metálico del concurso. Raymie, que es una niña ansiosa y sensible, sufre más pérdidas después de que su padre se va. Su devastada madre lucha por sobrellevar la ausencia de su padre, dejando a Raymie sin apoyo en casa. Luego, su querida vecina anciana, la señora Borkowski, con quien Raymie podía hablar de todo, muere de un ataque al corazón. El otro modelo adulto en la vida de Raymie, su entrenador de salvamento, abandonó la ciudad unos meses antes. Raymie, al igual que Louisiana y Beverly, se queda en busca de orientación y apoyo. Ida Nee está lidiando con sus propios problemas y no tiene paciencia con las tres chicas. Ella sale furiosa de cada lección frustrada, dejando solo al improbable trío. Las niñas forman una fuerte amistad y, a medida que el vínculo crece, Louisiana llama a su pequeño grupo "los Tres Rancheros". Además de realizar un talento, el concurso requiere que cada concursante realice una buena acción. Raymie decide que su buena acción será leerles a los residentes ancianos de un asilo de ancianos. Lleva su libro de la biblioteca, «La vida de Florence Nightingale», a la residencia de ancianos Golden Glen. El primer residente al que Raymie intenta leer no tiene interés en el libro, por lo que Raymie reúne todo su coraje y decide leerle a Alice Nebbley, otra residente a quien Raymie ha escuchado gritar y pedir ayuda. Las ansiedades de Raymie la superan, y deja caer el libro en la habitación de Alice antes de huir de Golden Glen presa del pánico. Raymie, que tiene demasiado miedo de aventurarse a regresar por su cuenta, recluta a Beverly y Louisiana para que la ayuden. Beverly recupera el libro y revela su lado más suave, mostrando bondad y compasión hacia Alice. Mientras Beverly está en la habitación de Alice, Louisiana libera a un pájaro enjaulado que se encontraba en el asilo de ancianos. Esta es la primera de varias misiones que los Tres Rancheros emprenden juntos. La próxima misión es rescatar a Archie, el querido gato de Luisiana. Luisiana cree que Archie está vivo en el Edificio 10, un refugio para exterminios. A pesar de estar convencidos de que han puesto a dormir a Archie, Beverly y Raymie acuerdan ir a una misión de rescate con Luisiana. Las chicas se encuentran después de medianoche e irrumpen en el refugio, trayendo un viejo carrito de compras para transportar a Archie. Dentro del deprimente refugio, las chicas encuentran solo un perro callejero y muchas jaulas vacías. Louisiana tiene el corazón roto pero todavía cree que Archie está vivo. Las niñas rescatan al perro, un perro callejero maloliente con un buen ojo y orejas caídas que instantáneamente se une a las niñas. Demasiado cansado y triste para caminar, Louisiana se sube al carrito de compras junto con el perro, y Raymie y Beverly comienzan a empujar el carrito a casa. En la cima de una colina, con vista a su ciudad, Raymie y Beverly pierden el control del carro. El carrito de la compra rueda colina abajo y, al llegar abajo, catapulta a Luisiana y al perro a un estanque. Raymie sabe que Luisiana no sabe nadar y sin dudarlo se lanza para rescatarla. En ese momento, Raymie se da cuenta de su propósito en la vida. Se siente como Raymie Nightingale, fuerte, segura de sí misma y capaz de salvar a su amiga. Las niñas llevan a Louisiana al hospital, donde las conocen la abuela de Louisiana y las madres de Raymie y Beverly. Beverly adopta al perro y, como predijo Louisiana, el gato Archie también aparece sano y salvo. Mientras Louisiana se recupera en el hospital, Raymie cuenta la historia completa a los periodistas que se enteraron del rescate. La historia se publica en el periódico junto con la foto de Raymie. El padre de Raymie ve la foto y, tal como ella estaba anhelando, llama. Sin embargo, en cuanto escucha su voz, se da cuenta de que ella no tiene nada que decir, y él tampoco. Si bien las chicas se han ido conociendo a un nivel más profundo, tanto Beverly como Raymie han decidido abandonar el concurso para apoyar a Louisiana. La animan a cantar en el concurso en lugar de hacer girar la batuta. Louisiana gana el concurso y el premio en metálico que tanto necesitaba, pero las tres chicas han ganado el premio más grande de todos: la amistad incondicional. La próxima misión es rescatar a Archie, el querido gato de Luisiana. Luisiana cree que Archie está vivo en el Edificio 10, un refugio para exterminios. A pesar de estar convencidos de que han puesto a dormir a Archie, Beverly y Raymie acuerdan ir a una misión de rescate con Luisiana. Las chicas se encuentran después de medianoche e irrumpen en el refugio, trayendo un viejo carrito de compras para transportar a Archie. Dentro del deprimente refugio, las chicas encuentran solo un perro callejero y muchas jaulas vacías. Louisiana tiene el corazón roto pero todavía cree que Archie está vivo. Las niñas rescatan al perro, un perro callejero maloliente con un buen ojo y orejas caídas que instantáneamente se une a las niñas. Demasiado cansado y triste para caminar, Louisiana se sube al carrito de compras junto con el perro, y Raymie y Beverly comienzan a empujar el carrito a casa. En la cima de una colina, con vista a su ciudad, Raymie y Beverly pierden el control del carro. El carrito de la compra rueda colina abajo y, al llegar abajo, catapulta a Luisiana y al perro a un estanque. Raymie sabe que Luisiana no sabe nadar y sin dudarlo se lanza para rescatarla. En ese momento, Raymie se da cuenta de su propósito en la vida. Se siente como Raymie Nightingale, fuerte, segura de sí misma y capaz de salvar a su amiga. Las niñas llevan a Louisiana al hospital, donde las conocen la abuela de Louisiana y las madres de Raymie y Beverly. Beverly adopta al perro y, como predijo Louisiana, el gato Archie también aparece sano y salvo. Mientras Louisiana se recupera en el hospital, Raymie cuenta la historia completa a los periodistas que se enteraron del rescate. La historia se publica en el periódico junto con la foto de Raymie. El padre de Raymie ve la foto y, tal como ella estaba anhelando, llama. Sin embargo, en cuanto escucha su voz, se da cuenta de que ella no tiene nada que decir, y él tampoco. Si bien las chicas se han ido conociendo a un nivel más profundo, tanto Beverly como Raymie han decidido abandonar el concurso para apoyar a Louisiana. La animan a cantar en el concurso en lugar de hacer girar la batuta. Louisiana gana el concurso y el premio en metálico que tanto necesitaba, pero las tres chicas han ganado el premio más grande de todos: la amistad incondicional. La próxima misión es rescatar a Archie, el querido gato de Luisiana. Luisiana cree que Archie está vivo en el Edificio 10, un refugio para exterminios. A pesar de estar convencidos de que han puesto a dormir a Archie, Beverly y Raymie acuerdan ir a una misión de rescate con Luisiana. Las chicas se encuentran después de medianoche e irrumpen en el refugio, trayendo un viejo carrito de compras para transportar a Archie. Dentro del deprimente refugio, las chicas encuentran solo un perro callejero y muchas jaulas vacías. Louisiana tiene el corazón roto pero todavía cree que Archie está vivo. Las niñas rescatan al perro, un perro callejero maloliente con un buen ojo y orejas caídas que instantáneamente se une a las niñas. Demasiado cansado y triste para caminar, Louisiana se sube al carrito de compras junto con el perro, y Raymie y Beverly comienzan a empujar el carrito a casa. En la cima de una colina, con vista a su ciudad, Raymie y Beverly pierden el control del carro. El carrito de la compra rueda colina abajo y, al llegar abajo, catapulta a Luisiana y al perro a un estanque. Raymie sabe que Luisiana no sabe nadar y sin dudarlo se lanza para rescatarla. En ese momento, Raymie se da cuenta de su propósito en la vida. Se siente como Raymie Nightingale, fuerte, segura de sí misma y capaz de salvar a su amiga. Las niñas llevan a Louisiana al hospital, donde las conocen la abuela de Louisiana y las madres de Raymie y Beverly. Beverly adopta al perro y, como predijo Louisiana, el gato Archie también aparece sano y salvo. Mientras Louisiana se recupera en el hospital, Raymie cuenta la historia completa a los periodistas que se enteraron del rescate. La historia se publica en el periódico junto con la foto de Raymie. El padre de Raymie ve la foto y, tal como ella estaba anhelando, llama. Sin embargo, en cuanto escucha su voz, se da cuenta de que ella no tiene nada que decir, y él tampoco. Si bien las chicas se han ido conociendo a un nivel más profundo, tanto Beverly como Raymie han decidido abandonar el concurso para apoyar a Louisiana. La animan a cantar en el concurso en lugar de hacer girar la batuta. Louisiana gana el concurso y el premio en metálico que tanto necesitaba, pero las tres chicas han ganado el premio más grande de todos: la amistad incondicional. Raymie y Beverly pierden el control del carro. El carrito de la compra rueda colina abajo y, al llegar abajo, catapulta a Luisiana y al perro a un estanque. Raymie sabe que Luisiana no sabe nadar y sin dudarlo se lanza para rescatarla. En ese momento, Raymie se da cuenta de su propósito en la vida. Se siente como Raymie Nightingale, fuerte, segura de sí misma y capaz de salvar a su amiga. Las niñas llevan a Louisiana al hospital, donde las conocen la abuela de Louisiana y las madres de Raymie y Beverly. Beverly adopta al perro y, como predijo Louisiana, el gato Archie también aparece sano y salvo. Mientras Louisiana se recupera en el hospital, Raymie cuenta la historia completa a los periodistas que se enteraron del rescate. La historia se publica en el periódico junto con la foto de Raymie. El padre de Raymie ve la foto y, tal como ella estaba anhelando, llama. Sin embargo, en cuanto escucha su voz, se da cuenta de que ella no tiene nada que decir, y él tampoco. Si bien las chicas se han ido conociendo a un nivel más profundo, tanto Beverly como Raymie han decidido abandonar el concurso para apoyar a Louisiana. La animan a cantar en el concurso en lugar de hacer girar la batuta. Louisiana gana el concurso y el premio en metálico que tanto necesitaba, pero las tres chicas han ganado el premio más grande de todos: la amistad incondicional. Raymie y Beverly pierden el control del carro. El carrito de la compra rueda colina abajo y, al llegar abajo, catapulta a Luisiana y al perro a un estanque. Raymie sabe que Luisiana no sabe nadar y sin dudarlo se lanza para rescatarla. En ese momento, Raymie se da cuenta de su propósito en la vida. Se siente como Raymie Nightingale, fuerte, segura de sí misma y capaz de salvar a su amiga. Las niñas llevan a Louisiana al hospital, donde las conocen la abuela de Louisiana y las madres de Raymie y Beverly. Beverly adopta al perro y, como predijo Louisiana, el gato Archie también aparece sano y salvo. Mientras Louisiana se recupera en el hospital, Raymie cuenta la historia completa a los periodistas que se enteraron del rescate. La historia se publica en el periódico junto con la foto de Raymie. El padre de Raymie ve la foto y, tal como ella estaba anhelando, llama. Sin embargo, en cuanto escucha su voz, se da cuenta de que ella no tiene nada que decir, y él tampoco. Si bien las chicas se han ido conociendo a un nivel más profundo, tanto Beverly como Raymie han decidido abandonar el concurso para apoyar a Louisiana. La animan a cantar en el concurso en lugar de hacer girar la batuta. Louisiana gana el concurso y el premio en metálico que tanto necesitaba, pero las tres chicas han ganado el premio más grande de todos: la amistad incondicional.