Lorenzo Ghiberti: escultor renacentista temprano, orfebre Traductor traducir
El escultor, diseñador y orfebre florentino, Lorenzo Ghiberti, fue uno de los más importantes. Viejos maestros del Renacimiento temprano . En el escultura del quattrocento período, en Florencia, fue reemplazado solo por su alumno Donatello (1386-1466). Poseía una buena comprensión de las formas antiguas, aunque los críticos alegan que estaba influenciado en exceso por el idioma gótico internacional y carecía de la profunda apreciación del arte clásico que posee Donatello y sus dos grandes contemporáneos: el pintor Masaccio (1401-1428) y el arquitecto Filippo Brunelleschi (1377-1446).
Sin embargo, Ghiberti fue una de las grandes figuras de Escultura renacentista , mejor conocido por sus dos conjuntos de relieves escultóricos hechos para las puertas del Baptisterio de Florencia, una tarea que lo ocupó durante gran parte de su vida: el primer conjunto durante el período (1403-24) y el segundo conjunto, el -llamado "Puertas del paraíso" durante el período (1425-52). Fue, sin lugar a dudas, un colaborador muy influyente en los primeros tiempos. Renacimiento Florentino , y su trabajo fue venerado por artistas y público por igual.
Biografía
Su autobiografía (la primera escrita por un artista occidental) comienza con su debut profesional en 1400, cuando dejó Florencia para Pesaro para pintar murales para Pandolfo Malatesta. Había sido entrenado en orfebrería en el taller-taller de Bartoli di Michele, conocido como Bartoluccio.
Ghiberti regresó a Florencia en 1401 al recibir noticias de la competencia anunciada por el Arte di Calimala (gremio de tela) para la comisión de una nueva puerta de bronce para el Baptisterio, para que coincida con la completada por Andrea Pisano en 1338. Implicaba lanzar un espécimen panel en relieve sobre el tema bíblico del sacrificio de Isaac. El florentino Filippo Brunelleschi (1377-1446), el destacado escultor de Siena Jacopo della Quercia (1374-1438), y Ghiberti estaban entre los siete finalistas. Ghiberti, el más joven, ganó; Una comparación entre su alivio de la competencia y el de Brunelleschi (los dos únicos que sobrevivieron: ambos en el Museo Nazionale, Florencia) sugiere que merecía hacerlo. Artísticamente más maduro que el de su rival y técnicamente más avanzado, ya establece su gusto por las figuras all’antica (a la manera antigua): la figura desnuda de rodillas de Isaac deriva de un torso antiguo. De hecho, el relieve combina una mezcla de influencia clásica y gótica que, en diversas medidas, persistiría en su arte hasta el final.
Cuando finalmente se firmó el contrato para la nueva puerta del Baptisterio en 1403, se estipuló un programa del Nuevo Testamento de 28 paneles de quatrefoil , dispuestos cuatro en una fila. El trabajo, que fue interrumpido por otras comisiones, abarcó dos décadas. El taller de Ghiberti aumentó de tamaño durante este período. En 1407 estaba empleando a 11 asistentes, y luego agregó más: Donatello (1386-1466), Paolo Uccello (1397-1475), Michelozzo y Benozzo Gozzoli entre ellos. Fue el taller de escultores más grande e influyente de Florencia durante la primera mitad del siglo XV.
Alrededor de 1415, la mayoría de los relieves de quatrefoil se habían lanzado. El marco que los rodeaba se hizo después. Había 48 cabezas de profetas en sus esquinas (muchas derivadas de la escultura romana), y las jambas de bronce y el dintel estaban foliadas con flores silvestres, conos de pino y avellanas. No fue hasta abril de 1424 que finalmente se instaló la puerta norte del Baptisterio. Ghiberti, que lo había comenzado de joven, ahora tenía más de 40 años.
Mientras tanto, había realizado otras comisiones: diseños para vidrieras (para Catedral de Florencia ), mitras papales y joyas. Tres gremios florentinos le habían encargado que produjera tres estatuas de bronce para los nichos exteriores de la iglesia gremial de O San Michele: Juan el Bautista (1413-14); San Mateo (1419-22); y San Esteban (1425-29). El primero de ellos era predominantemente de estilo gótico internacional; el segundo fue clásico (influenciado por Donatello y Nanni di Banco); y el tercero sintetizó los dos. Técnicamente, los tres muestran el dominio inigualable de Ghiberti de fundición a gran escala en bronce.
Varios relieves de bronce poco profundos pertenecen a los mismos años: los dos relieves de la Fuente Bautismal de Siena (1420-7), la placa de la tumba de Leonardo Dati (1425-7; S. Maria Novella, Florencia) y el santuario de los santos Protus, Jacinto y Nemesio (Museo Nazionale, Florencia). Su creciente logro pictórico culmina en los cuatro soberbios relieves del santuario de San Zenobio (1432-42; Catedral de Florencia); la naturaleza clásica de esto escultura en relieve refleja la visita de Ghiberti a Roma (1425-30). La visita influyó profundamente en el nuevo estilo que desarrolló durante la década de 1430, como se ejemplifica en la nueva puerta del Baptisterio de Florencia encargada por el Arte di Cali mala en 1425 (ocho meses después de la instalación de la puerta norte).
Ghiberti afirmó que le habían dado carta blanca sobre el diseño de la nueva puerta, pero es posible que el programa del Antiguo Testamento fuera elaborado por humanistas florentinos. En cualquier caso, la nueva puerta abandona el patrón de quatrefoil de su predecesor. Las puertas miden aproximadamente 9 pies por 4 pies, y consisten en diez paneles de alivio cuadrados. Cada ala, consta de cinco paneles, y está rodeada por un marco adornado con 24 cabezas de profetas en redondeles, alternando con 24 estatuillas en nichos, con cuatro figuras reclinables arriba y abajo. Miguel Ángel Se dice que apodó la nueva puerta " Las puertas del paraíso ", aunque la historia puede ser apócrifa.
Aparte de su tamaño, es su calidad pictórica y complejidad narrativa lo que diferencia a los nuevos paneles de los de la puerta norte. Muestran una perspectiva tanto lineal como aérea, reforzada por una gradación de alto relieve en primer plano a relieve superficial en el fondo, correspondiente a la disminución en el tamaño de las figuras. Ghiberti explicó su sistema de perspectiva en su autobiografía. También enfatizó que sus narraciones eran "abundantes en figuras", una preocupación gótica internacional. Lo que omitió decir es que muchas de estas figuras, en contraste con su repertorio all’antica anterior, se derivaron de relieves de sarcófagos romanos visibles en Roma. Ghiberti ciertamente debe haber hecho dibujos de ellos. Sin embargo, es paradójico que su estilo, a pesar de los prolíficos préstamos antiguos, nunca logre el clasicismo de Donatello, que asimiló el antiguo sin imitarlo tan directamente.
Los diez paneles de las "Puertas del Paraíso" tardaron diez años en emitirse (c.1428-37), pero el trabajo en la persecución y los marcos continuaron en la década de 1440. No fue sino hasta 1452, después del proceso final de dorado, que las Puertas del Paraíso, el mejor logro de Ghiberti, se instalaron en la entrada este del Baptisterio. Tres años después, Ghiberti estaba muerto.
Dejó un floreciente taller (del cual Vittorio, su hijo menor, se hizo cargo), una distinguida colección de antigüedades y, en manuscrito, una historia vernácula incompleta y una teoría de las artes figurativas, su Comentario en tres partes. El primer libro trata sobre arte antiguo, el segundo sobre arte moderno, mientras que el tercero fragmentario está dedicado a problemas teóricos. El libro dos representa un intento pionero de un artista para describir los logros de sus predecesores y así articular la época que ahora designamos como Renacimiento temprano.
El estado de Ghiberti en el siglo XV. Arte renacentista sigue siendo polémico: para algunos es uno de sus padres; para otros es un escultor gótico tardío, superado en su vida por el implacablemente progresista Donatello. Indudablemente, Donatello eventualmente erosionó el temprano liderazgo incuestionable de Ghiberti en la escultura florentina. Sin embargo, la carrera de Ghiberti ejemplifica el nuevo papel del artista en la sociedad posfeudal, por lo que considerarlo simplemente como un campeón reaccionario del gótico internacional (el estilo que tan influyente ha influido en su juventud) es bastante inexacto. Los comentarios muestran cómo lidió con los problemas pictóricos fundamentales que subyacen a un verdadero estilo renacentista (como perspectiva lineal ), y las "Puertas del Paraíso" muestran los esfuerzos que hizo para resolverlos.
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