Nostalgia. Entre el ajetreo y el bullicio Traductor traducir

La palabra "nostalgia" proviene de las palabras griegas nostos, que significa "volver a casa", y algos, dolor. Volver al pasado es un intento de comprender creativamente el presente, una búsqueda de la verdad perdida.

La nostalgia, en general, es una conexión entre la memoria y la imaginación, es en este contexto que Vadim Leukhin aborda el tema de la nostalgia, vistiendo recuerdos incorpóreos en fragmentos brillantes de pintura densa sobre lienzo. La fragmentación se convierte en el elemento principal de su estilo, donde el espacio mítico de la nostalgia, la retrotopía, se forma a partir de fragmentos de recuerdos.

Sus personajes son más a menudo niños, que juegan descuidadamente en las calles tejidas a partir de fragmentos del paisaje urbano soviético: casas, autobuses, máquinas de riego, fuentes, espacios verdes. Su paleta se compone de colores locales vivos y alegres que crean contrastes de planos que se asemejan a la restauración del encolado profesional, a las ondas del tiempo o a las interferencias visuales que impiden percibir el espacio tridimensional del cuadro como una “ventana al mundo”., la realidad de lo imaginario.

La fragmentación para Leukhin es un elemento de crítica a la nostalgia, mostrando que nuestros recuerdos no son integrales, sino que se componen de partes separadas que crean imágenes idílicas del pasado. Su espacio se convierte en un sueño, el mundo de la infancia, que permanece inaccesible para el espectador.

Estilísticamente, Leukhin está cerca de Eric Bulatov, quien le enseñó cómo diseccionar la parte del paisaje de la imagen con franjas de color. Sin embargo, sus técnicas compositivas fueron repensadas en el espíritu de la pintura metafísica de Giorgio de Chirico y el "nuevo" realismo de Edward Hopper. El espacio de Leukhin se asemeja a la solemnidad desierta de planos contrastantes en los paisajes urbanos de De Chirico, donde el sueño y la realidad se borran. El misticismo fantasmal de las pinturas en prosa del pasado de Leukhin se refiere al maestro del paisaje estadounidense, Edward Hopper, quien, con la ayuda del color, crea la impresión de una mirada especial del artista, una atmósfera hipnotizante y desorientadora. Lo social y objetivo en Bulatov fue reemplazado por lo poético y personal en Leukhin. Su estilo es reconocible, no lo confundirás con nadie.

Vadim Leukhin es uno de los jóvenes artistas destacados y solicitados de San Petersburgo. Graduado de la Academia Estatal de Arte e Industria. Stieglitz y en la Fundación ProArte con especialización en Nuevas Tecnologías en el Arte Contemporáneo, prefirió utilizar las tecnologías tradicionales, descubriendo la posibilidad de utilizarlas para hablar de problemas contemporáneos y conexiones entre el pasado y el presente.

Las nuevas obras presentadas en la exposición no son solo imágenes familiares, características de la infancia, recuerdos y sueños del pasado, que aparecen a través del ajetreo y el bullicio de nuestro tiempo, sino también una ligera nostalgia por la era de esperanzas vividas ahora y la plenitud de conciencia que vive simultáneamente el pasado y el presente.