Welz Ivan – Beginning of winter 900 Classic russian paintings

Análisis de la pintura
La obra presenta una escena invernal con un río serpenteante como elemento central. El agua oscura refleja el cielo nublado y los árboles desnudos que bordean sus orillas. Una fina capa de nieve cubre las riberas, así como los campos adyacentes al río, sugiriendo la transición hacia el frío del invierno.
En primer plano, se observa una pequeña embarcación varada en la orilla izquierda, aparentemente abandonada o fuera de uso durante esta estación. La vegetación circundante es escasa y carece de color vibrante; predominan los tonos grises, marrones y blancos, reforzando la sensación de quietud y melancolía.
El horizonte se difumina en la distancia, con una línea tenue de árboles que sugiere un bosque o una zona rural poco poblada. La luz es suave y difusa, creando sombras sutiles y resaltando las texturas de la nieve y el agua.
La composición general transmite una atmósfera de soledad y recogimiento. La presencia del río puede interpretarse como un símbolo del paso del tiempo y la inevitabilidad del cambio estacional. El bote abandonado evoca ideas de finalización, espera o incluso pérdida. El cielo plomizo contribuye a un sentimiento de introspección y calma, aunque teñido de cierta tristeza. La escena no presenta figuras humanas ni animales, lo que acentúa la sensación de aislamiento y permite al espectador proyectar sus propias emociones en el paisaje. Se percibe una belleza austera en la simplicidad del entorno natural, invitando a la contemplación sobre la naturaleza cíclica de la vida y la fugacidad de los momentos.