Spitak Cinco minutos de silencio Traductor traducir

10 de diciembre de 2018 En el Centro Cultural de la Embajada de Armenia, con el apoyo de la Fundación de Enciclopedias de Moscú, se lanzó una exposición personal de un miembro de la Unión Creativa de Artistas de Rusia (sección Tetra-Art), cofundador de el proyecto # REVER, Evgeny Zhilyaev “Spitak. Cinco minutos de silencio. "

"Cinco minutos de silencio" es el tiempo al final de cada hora,
cuando todos los tipos de trabajo de rescate se detienen.
Un momento en que todo se congela para escuchar esos
quien mas esta vivo…

Hace 30 años, el 7 de diciembre de 1988, ocurrió una terrible tragedia: un terremoto en Armenia. Este terremoto se llamó el "terremoto de Spitak" en honor a la ciudad, que se hizo cargo de su fuerza principal y fue destruido por la onda de choque de la faz de la Tierra. El terremoto en Spitak fue de 10 puntos.

Evgeny Zhilyaev, el día después de la tragedia, llegó a Spitak como comandante del escuadrón de rescate del Instituto de Física y Tecnología de Moscú.

Gracias a la pasión de Eugene por la fotografía, tuvimos una oportunidad única de ver la crónica de los eventos de esos días.

¡Hoy inclinamos nuestras cabezas a todos los que han encontrado el coraje y la fuerza para venir a Armenia y hacer no solo todos los esfuerzos, sino aún más para salvar a las personas!

Ayudaron a organizar la exposición "en todo el mundo", como es habitual para el pueblo armenio, que no deja de agradecer sinceramente a quienes les extendieron una mano en ese momento difícil.

El proyecto # REVER está profundamente agradecido con la Fundación Enciclopedia de Moscú, la organizadora de esta exposición, y su Presidente Trube Trube, la Embajada de Armenia en Rusia y el Centro Cultural de la Embajada de Armenia por su ayuda y apoyo en la organización de la foto. exposición, patrocinadores de la exposición: FORA -BANK, Asociación de Bancos Rusos y personalmente al Sr. Sergey Alexandrovich Hambartsumyan.

Y también a los participantes de nuestro proyecto que nos ayudaron en el proceso preparatorio. ¡Muchas gracias, Galina Kuznetsova, Andrey Kulkov (Kulkov Andrey), Alex Skomorokh (Alex Skomorox) y Alexander Zaitsev! Chicos, no podríamos haberlo hecho sin ustedes!!

La exposición se puede visitar del 10 al 21 de diciembre en el Centro Cultural de la Embajada de Armenia en 2 Armenian Lane

Exposición “Spitak. Cinco minutos de silencio "se volverá móvil y todos podrán verlo.

Los recuerdos que desgarran el alma no se pueden tener a la mano. Están encerrados en una caja de memoria durante mucho tiempo, pero llega el momento y…

El 7 de diciembre de 1988, los estudiantes del Instituto de Física y Tecnología de Moscú Yevgeny Zhilyaev y Dmitry Nikolsky, al enterarse del terrible terremoto en Armenia, decidieron ir inmediatamente al sitio del desastre para realizar operaciones de rescate.

Y se fueron. Primero, a la Embajada de Armenia, luego a la Sociedad de Amistad Ruso-Armenia. En el instituto, casi todo el día, se redactaron todos los documentos necesarios, se lanzó un grito, se seleccionaron 42 de 400 estudiantes voluntarios. Al día siguiente, un escuadrón de rescatadores, principalmente atletas de alpinismo, "hombres de agua" y espeleólogos fueron a Spitak.

- Nuestra tarea principal era buscar a los vivos entre los escombros… Bueno, los muertos, por supuesto… - recuerda Eugene. - Cuando los objetos se distribuyeron entre las distintas unidades, obtuvimos un molino harinero y una fábrica de azúcar, una fábrica de costura, una escuela y un jardín de infantes. Y en el jardín de infantes, muchos se averiaron, simplemente no podían trabajar allí… ¿Qué hicieron en su lugar? Enviado a otros objetos.

Spitak estaba en el epicentro del terremoto. Las paredes de casi todos los edificios durante el terremoto se formaron como en un castillo de naipes, enterrándose debajo de los que estaban caminando en la transición de un edificio de fábrica a otro, los que se reunieron en la cafetería de la escuela o en las mesitas del jardín de infantes )se acercaba la hora del almuerzo). Según Eugene, fue posible encontrar sobrevivientes en edificios residenciales gracias a… refrigeradores o un piano que pudieran soportar el peso de una pared derrumbada. En las aulas y salas de la guardería, nada impedía las paredes: los niños no tenían dónde refugiarse…

En los primeros días, trabajaron literalmente con palas, manualmente, luego el equipo acudió al rescate, incluido el equipo militar. "Y después de cada hora de trabajo, nos detuvimos durante" cinco minutos de silencio "para escuchar los gritos de ayuda por los escombros…". Y oyeron, y con renovado vigor tomaron palancas y bloques de hormigón para atrapar, atrapar, atrapar. Cinco vidas salvadas se deben al destacamento de Eugene, pero los cuerpos de los muertos no se pueden contar. Los ataúdes para los cuerpos fueron traídos por camiones volquete, y probablemente eran el lugar más limpio en los sitios de trabajo, donde a menudo había que pasar la noche cuando no había fuerzas para ir al campamento. Pasamos la noche en ataúdes…

No hace falta decir que, después del 31 de diciembre, los rescatistas regresaron a Moscú. "La infancia ha terminado", dice Eugene. Muchos de sus asociados en el destacamento, según él, destruyeron por completo todos los negativos y fotos de ese período; es imposible herir heridas que nunca se curaron. Eugene no destruyó, tal vez porque su destino posterior, el militar, se asoció con operaciones especiales y salvar personas, o tal vez porque se convirtió en un fotógrafo profesional y entiende el valor de cada mirada a través de la lente. Sea como fuere, sus tomas en ese momento son únicas en muchos aspectos, porque no quedaban tantos periodistas en el epicentro del desastre y documentos fotográficos de la época.

La exposición de hoy no se dedica solo al 30 aniversario del terrible desastre en Spitak y otras ciudades de Armenia. Está diseñado para recordarnos el coraje y el heroísmo, la fe y la devoción. Sobre aquellas personas que fueron enterradas bajo las ruinas de sus apartamentos y casas, edificios de fábricas y jardines de infantes… Sobre esos niños que nunca se hicieron adultos… Sobre la fe y la devoción de aquellos que, a pesar del dolor y el miedo, llegaron al rescatistas todos los días con la esperanza de encontrar familiares y se negaron a abandonar sus hogares. Sobre el coraje de los niños muy pequeños que simplemente no pudieron evitar ayudar… Sobre el apoyo y la misericordia…

Y hoy tenemos nuestros propios "cinco minutos de silencio", para escuchar voces del pasado, para recordar y agradecer, para vivir y disfrutar el nuevo día, para recordar más claramente qué es la vida humana, cuán frágil e indefensa es los elementos, naturalmente o hechos por el hombre y cómo protegerlo. Por todos nosotros.