Los héroes de "Electra" dirigidos por Timofei Kulyabin se convirtieron en nuestros contemporáneos. Traductor traducir

MOSCÚ. La apertura de un nuevo espacio escénico en el Teatro de las Naciones: el Pequeño Escenario se convirtió para los espectadores no solo en la aparición de una sala de transformadores de alta tecnología, sino también en una nueva interpretación de la tragedia de Eurípides Electra, que se incluyó en el repertorio de teatro.

El estreno de la obra dirigida por el joven director Timofei Kulyabin se convirtió en una actuación muy inusual, aunque se basa en la traducción clásica del mito griego hecha por el poeta Innokenty Annensky en el siglo XIX. Está bastante claro que el texto está adaptado para el espectador moderno, y de los muchos personajes presentes en la historia, solo los personajes principales de la tragedia permanecieron en el escenario.

Solo el lugar donde se resuelven los problemas de los antiguos héroes griegos, el director eligió lo inusual. Teniendo en cuenta que puede ocurrir una situación similar en cualquier momento, elige el espacio simbólico del mundo moderno como un lugar de acción, un lugar donde personas completamente diferentes pueden encontrarse, con un destino diferente: el aeropuerto. Según Timofei Kulyabin, es este espacio universal el que nos permite hablar sobre la conexión del destino, la elección personal de los héroes y las consecuencias de esta elección.

La pregunta principal planteada en la obra para el público, ¿justifica la voluntad de los dioses el asesinato de una persona? Las imágenes de los héroes son interpretadas por el director sin ambigüedades: ninguna circunstancia externa puede justificar el asesinato. Al discutir la obra, Timofei Kulyabin señaló que entre los dramaturgos griegos, Eurípides fue el primero en intentar culpar a los acontecimientos de una persona al sacarlo de los dioses. Elektra, quien hizo que su hermano se convirtiera en el asesino de su propia madre, se convierte exactamente en el mismo asesino, mientras muere espiritualmente. Este no es el cumplimiento de la tarea asignada a los héroes por los dioses, sino su propia elección.

Ludmila Trautmane