Arte petrino, bajo el zar Pedro el Grande Traductor traducir

Introducción

El zar más grande de Rusia, Pedro el Grande (gobernado 1686-1725) logró dar un gran impulso a Arte ruso a pesar de las enormes preocupaciones militares. Le dio gran importancia a arte fino, incluyendo, más obviamente, arquitectura, así como pintura (incluida la pintura de libros), escultura y diversas formas de grabado. También pagó un estipendio a numerosos Artistas rusos adquirir las habilidades necesarias en academias de arte fuera de Rusia. Tenía la intención de establecer un departamento de arte especializado en la Academia de Ciencias de Rusia, pero la muerte intervino. Lo básico estética del arte petrino con Pedro el Grande fue la creación de una cultura más moderna, combinando ideas occidentales y tradicionalismo ruso. En general, abarcaba una amplia gama de productos seculares y arte religioso – un cambio significativo de los principios y cánones oficiales de Pintura medieval rusa ejemplificado por el Escuela de pintura de iconos de Novgorod (c.1100-1500) y el Escuela de pintura de moscú (1500-1700), en el que Arte cristiano Fue el género dominante.

Arquitectura petrina (c.1686-1760)

El amor de Peter por arquitectura, heredado tanto de los Narishkins como de los Romanov, se conmemora en su inmenso legado, la ciudad de San Petersburgo, "la Venecia del Norte", un proyecto que encarnaba toda su filosofía cultural y política. No se erigió ningún edificio en la ciudad sin su aprobación de su diseño arquitectónico y, para disminuir el riesgo de incendio, la mayoría de las estructuras debían ser de piedra o ladrillo. Todos sus palacios fueron construidos a la vista del mar, mientras que se prestó atención detallada a sus jardines que estaban llenos de obras clásicas. escultura de piedra. Lamentablemente, gran parte de la arquitectura construida o concebida por Peter y sus sucesores inmediatos fue destruida durante el siglo XX.

Petrine Architects

Todos los principales arquitectos del reinado de Pedro, a excepción de Michael Zemtsov (1688-1743) que se convirtió en Supervisor de los Palacios Imperiales, eran extranjeros, en su mayoría franceses, italianos y alemanes. Ellos incluyeron:

Los seguidores de Rastrelli fueron tan numerosos y su estilo siguió siendo dominante durante tanto tiempo que estableció en Rusia una escuela de arquitectura distinta. Algunos de los arquitectos rusos más eminentes que trabajaron a su manera incluyeron: SIChevakinski (1713-83), AVKvassov (fechas desconocidas), AFKokorinov (1726-72) y el Príncipe DVUkhtomski (1718-80). Fue Ukhtomski quien, en 1749, estableció en Moscú uno de los primeros colegios de arquitectura de Rusia que contaba entre sus alumnos: VIBazhenov (1737-99), MFKazakov (1737-1813) e IEStarov (1743-1808).

Escultura Petrina

Peter fue uno de los grandes del siglo XVIII. coleccionistas de arte. Adquirió objetos de todo tipo, desde muebles hasta Pintura holandesa del siglo XVII, desde joyas preciosas hasta curiosidades como las losas de ámbar que compró al Rey de Prusia, y que Rastrelli usó en una fecha posterior como paneles en Tsarskoe Selo. También recolectó Escultura rusa. No era un carpintero malo, a Peter le gustaba especialmente talla de madera y patrocinó la colección de estatuas, tanto antiguos como modernos, por sus parques y jardines. Sin embargo, es sorprendente descubrir que nunca parece haber hecho ningún esfuerzo serio para desarrollar el arte de la escultura en Rusia, y que le debía los servicios del único gran escultor de su reinado a un engaño del cual fue víctima.

Conde Carlo Bartolomeo Rastrelli el Viejo (1675-1744)

Este escultor generalmente se conoce como Rastrelli el viejo, en contraste con su hijo, Bartolomeo Rastrelli (1700-71), quien se convirtió en uno de los mejores arquitectos de Rusia. De origen veneciano, Carlo Bartolomeo Rastrelli llegó a San Petersburgo desde París en 1716 para trabajar como arquitecto. Volvió a su ocupación original de escultor solo después de que Leblond había convencido a Peter, ahora nadie puede decir si con justicia, que los planes de Rastrelli para Peterhof y Strelna eran impracticables y que no estaba lo suficientemente calificado para estar a cargo de cualquier empresa de construcción.

Las esculturas que Rastrelli había producido en Occidente habían sido muy admiradas, pero sus obras rusas son, con mucho, las mejores. El vigor y la fuerza mostrados en sus estatuas de Petersburgo están ausentes en las anteriores, y esta nueva contundencia debe atribuirse al efecto que Rusia y su notable zar tuvieron sobre él. El resultado fue algo tan nuevo y enérgico que justifica la clasificación de Rastrelli como artista ruso en lugar de occidental.

A la llegada de Rastrelli, Peter todavía estaba tan absorto en sus jardines y parques que su embellecimiento se convirtió en la tarea principal de Rastrelli. Como resultado, gran parte de su tiempo se dedicó a la producción de adornos de jardín y fuentes de bronce. Todos se caracterizan por su gran tamaño, su finura de proporción y por su modelado delicado pero muy profundo, que produjo una interacción tan marcada de luz y sombra que rara vez ha sido paralela en la escultura de jardín.

Bustos de retratos

A pesar de la calidad decorativa de la mayoría de su trabajo, Rastrelli se destacó en el retrato, y su bustos de retratos son notables por su preocupación y comprensión de la psicología. Además, muestran el mayor dominio técnico y la fidelidad más cercana al modelo vivo. La importancia que Rastrelli atribuyó a la exactitud en el retrato se ve confirmada por el hecho de que logró tomar una máscara del Zar durante su vida, en lugar de esperar, como era costumbre, hasta después de la muerte.

Dos de los retratos de Peter de Rastrelli han sobrevivido. El más conocido es un busto de bronce que data de 1724, el otro es una estatua ecuestre. En ambos, los detalles del vestido del zar están cuidadosamente indicados, en el busto el exquisito encaje de los volantes contrasta llamativamente con el satén de las cintas de las órdenes del zar y la suavidad de la capa con bordes de piel. En ambos, la actitud arrogante de Peter se ajusta a esa actitud tan puesta de moda por Luis XIV que a principios del siglo XVIII la consideró esencial en toda semejanza real. Sin embargo, esta artificialidad se desmiente en cada una de las esculturas de Rastrelli por la extraordinaria vitalidad y la expresión característica de la cara. El gran escultor francés, Etienne Maurice Falconet (1716-91), estaba tan abrumado por la animación y la sinceridad del busto que copió la cabeza, tanto en lo que respecta a su pose como a su expresión, en el soberbio estatua ecuestre de Pedro, que ejecutó a las órdenes de Catalina II, y que ahora se encuentra en la Plaza del Almirantazgo en Leningrado.

El busto de Rastrelli del Príncipe Menshikov es igualmente convincente y logra combinar los detalles decorativos con la veracidad y la comprensión psicológica. Nos ayuda a darnos cuenta de que había mucho en el carácter de este hombre hecho a sí mismo para explicar las trágicas vicisitudes de su vida.

El cuarto trabajo principal de Rastrelli es una figura de la emperatriz Anne con su Blackamoor en la asistencia. Una vez más, el lujo de la vida de la corte de Petersburgo está admirablemente indicado por la agrupación de las figuras y la magnificencia de la ropa de la zarina. Sus rasgos burdos y su mente insensible se presentan en sorprendente contraste con esta sofisticación material, y la figura ofrece un ejemplo sorprendente de la forma en que el arte puede amplificar o iluminar la historia escrita.

Pintura petrina

Aunque las esculturas eran raras en los días de Pedro, pinturas de retratos ya se había establecido completamente. Muchos permanecieron primitivos, pero en su conjunto el arte de pintura se había liberado de las tradiciones de pintura de iconos y se había vuelto francamente naturalista. Los retratos producidos en la corte fueron en su mayoría por eminentes extranjeros. Sin embargo, dos nombres rusos se destacan incluso en esta fecha temprana, Matveev y Nikitin , y su trabajo no se compara muy mal con el de algunos de los extranjeros empleados por Peter. Ambos hombres se beneficiaron de una educación occidental en Art º, que no fue disfrutado por los numerosos artistas que trabajaron fuera de San Petersburgo. El trabajo de prácticamente todos estos permaneció sin firmar.

Andrew Matveev

Andrew Matveev (1701-1739) fue enviado por Peter a Holanda en 1716. Cuando regresó a Rusia solo dos años después de la muerte del zar, es decir, en 1727, a menudo se le clasifica como artista del reinado de Pedro II, pero, ya que el último zar tuvo poca influencia en el arte; y desde las fotos de batalla de Marveev y otras obras de pintura de historia, así como su pintura mural, lleva la impronta del gusto de Pedro el Grande, él realmente pertenece a la época del gran reformador. Su arte de retrato está bastante logrado, aunque es su sinceridad lo que le da su mayor atractivo. Esta cualidad es especialmente destacada en su retrato de sí mismo y su esposa, que tiene algo del encanto de una primera época. Gainsborough al respecto Además de sus retratos, fue, a diferencia de la mayoría de los pintores rusos occidentalizados más tarde, también responsable de una serie de iconos. Su muerte relativamente temprana le robó a Rusia un pintor muy prometedor.

John Nikitin

John Nikitin (1690-1741), el segundo pintor ruso destacado de la época, era un personaje más complejo. Estudió en Italia desde 1716 hasta 1720, y su habilidad y talento fueron tan evidentes incluso durante su etapa de estudiante que Peter deseaba que pintara el retrato del Rey de Sajonia para demostrar que Rusia Viejos maestros No siempre fueron inferiores a todos los artistas occidentales. Lamentablemente, esta propuesta no parece haberse cumplido. Bajo su apariencia de moda, y a pesar de su gran éxito, Nikitin siguió siendo un artista sincero y que busca la verdad, y los retratos de incluso sus modelos más modernos tienen una calidad íntima que va mucho para mejorar el valor de sus imágenes. Sin embargo, en la década de 1730, sin tener en cuenta su popularidad, se permitió dudar si naturalismo podría justificarse por motivos éticos. De ninguna manera seguro de sí mismo en el entorno no acostumbrado que Peter había creado, Nikitin se unió patéticamente a un grupo de personas opuestas a la occidentalización de Rusia e insistió en pintar solo al estilo de los íconos del siglo XVII. Esto provocó el disgusto de la emperatriz Ann, pero Nikitin se mantuvo firme y, como resultado, fue exiliado a Siberia. Elizabeth demostró más comprensión; Al ascender al trono, perdonó al pobre buscador de la verdad, y Nikitin se dirigió a San Petersburgo solo para morir antes de llegar a la capital. Para más, ver: Pintura rusa: siglo XVIII.

Grabado de petrina e ilustración de libro

Una gran cantidad de artistas empleados por Peter estaban involucrados en grabado, mayormente dedicados a dibujar mapas e ilustrar libros. Además de ilustración Requerido por el texto, estos artistas embellecieron generosamente los volúmenes en los que trabajaron con dispositivos decorativos como cartuchos, cintas, guirnaldas de flores, figuras alegóricas, emblemas y letras finas. Estos son invariablemente encantadores, y por puro diseño pueden clasificarse con los mejores grabado y productos gráficos de la Europa contemporánea.

Chemesov , Skorodumov y Utkin fueron los tres principales grabadores de la época. El impacto de su trabajo sobre los campesinos condujo a la producción del lubki, el equivalente ruso de los cap-books de Inglaterra. Estas ilustraciones son igualmente deliciosamente viriles y decorativas. Se imprimieron en bloques en folletos individuales y, junto con el icono, formaron la única decoración pictórica en una cabaña rusa. Sin embargo, más importante que la aparición del lubki es el hecho de que estos grabadores sentaron las bases de la magnífica Rusia. arte Grafico, que alcanzó su mejor nivel solo a principios del siglo pasado. A partir de entonces, los libros rusos, ya sean de fecha pre o posrevolucionaria, ocupan un lugar destacado, y sus viñetas, capítulos, artículos de cola y documentos finales establecen un estándar inigualable en Europa en cuanto a la calidad. del diseño se refiere. Ver también: Pintura rusa (siglo XIX) .

Se pueden ver ejemplos de escultura y pintura de Petrine en algunos de los mejores museos de arte en Rusia, incluido el Museo del Hermitage En San Petersburgo.