La apariencia de la pintura de iconos 
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Una de las características distintivas de la pintura rusa es el predominio absoluto del icono, no solo durante el período de la antigua Rusia, sino también prácticamente a lo largo de la Edad Media. Las características de este tipo de pintura incluyen el simbolismo de la imagen de la pintura de iconos, así como el hecho de que la imagen no tiene iconos tridimensionales. La composición no se despliega, sino a los lados. La falta de profundidad se hizo para separar el mundo del icono de la vida cotidiana.
Era plano, tenía una perspectiva inversa, lo que significaba quietud y atemporalidad. El ícono tenía que ser capaz de leer, estaba lleno de significado para un hombre medieval. La Iglesia Ortodoxa nunca permitió pintar iconos de personas vivas y exigió la estricta observancia del canon. Estos patrones deberían separar claramente el mundo de las tierras altas de lo longitudinal, lo terrenal. El fondo de oro condicional simbolizaba la luz divina. Toda la imagen estaba impregnada de esta luz, las figuras no proyectaban sombra, porque en el Reino de Dios no hay sombras. Los íconos fueron llamados "teología en colores". Se suponía que todo en ellos dirigía los pensamientos de los creyentes al mundo de la montaña.
La historia de la pintura de iconos ha conservado algunos nombres de artistas. La creatividad medieval gravitó al anonimato, porque era importante no el nombre del maestro, sino el tema de la imagen. No debemos olvidar que el trabajo sobre el ícono fue a menudo colectivo. La estricta canonización de la pintura llevó al hecho de que había una gran dependencia de los modelos bizantinos, lo que obstaculizó el desarrollo de la pintura en contraste con la arquitectura. Mosaicos y frescos de la Catedral de Santa Sofía en Kiev confirman esto. Pero allí también se hicieron murales puramente seculares. En el lado sur de la nave central de la Catedral de Santa Sofía en Kiev hay un fresco que representa a las hijas del Príncipe Yaroslav el Sabio, y en el norte, sus hijos. En el lado occidental está la imagen del propio príncipe con un modelo del templo en sus manos. En las paredes de las escaleras, se muestran episodios de la vida de la corte: concursos en el hipódromo, espectáculos de circo, figuras de bufones, músicos, caza de osos, leopardo, lobo. Por lo general, se representan técnicas de caza rusas (no bizantinas). Un lugar especial en la Catedral de Santa Sofía está ocupado por adornos.
"Pintura brillante": el mosaico sale con la puesta de sol de Kievan Rus. Para los príncipes, era demasiado caro. En tiempos de fragmentación feudal (siglos XII-XV), las escuelas de arte locales comenzaron a formarse. Durante este período, se pueden distinguir dos tendencias en el desarrollo de la pintura. Debido a la creciente influencia de la iglesia, la censura del cumplimiento del canon se está endureciendo. Esto puede explicarse por la creciente lucha con las tradiciones paganas. Las imágenes de los santos se están volviendo más severas y abstractas.
Al mismo tiempo, cuanto más lejos del púlpito metropolitano estaba el príncipe, más fuertes eran los elementos populares en la pintura. Entonces, por ejemplo, Novgorod se caracterizó por una tendencia a la simplicidad y visualización de la imagen. Los íconos eran muy coloridos, lo que parecía ser más apropiado para el arte popular. En el siglo XIII. Incluso los fondos dorados dieron paso al rojo, azul y amarillo. Para la decoración, a menudo se usaba un adorno geométrico. En el siglo XIV, aunque los novgorodianos ya habían desarrollado una pintoresca escuela local, fueron influidos en gran medida por Teófanes el griego (1340 - 1405). Pintó la Iglesia de la Transfiguración de Nuestro Salvador en Novgorod.
La iconografía de Pskov también mostró sus propias peculiaridades: la composición es a menudo asimétrica, el color es sombrío, los fondos son amarillos, había varios temas en el mismo tablero que no siempre estaban conectados. Los Escritos del Norte, ejecutados por los pintores íconos Kholmogor, Vologda, Veliky Ustyug, Kargopol, a menudo son ineptos en la ejecución, pero los mejores están marcados por la ingenua expresividad y la belleza decorativa.
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En la pintura de Vladimir-Suzdal, la imagen de Deesis (la oración de la Madre de Dios y de Juan el Bautista antes de Cristo por los cristianos) fue de gran importancia. Aquí el tema principal de la pintura de iconos fue la salvación de la raza humana. La figura central siempre ha sido la figura de Cristo. La deesis de la Catedral de la Asunción del Kremlin de Moscú, ejecutada a mediados del siglo XII, se considera una de las primeras. La escuela de Moscú comienza a tomar forma, por supuesto, más tarde que la de Novgorod. Desde el siglo XV Básicamente, se escribieron iconos para iconostasios, se ampliaron. Para estos íconos, tal vez incluso el simbolismo excesivo es característico, porque deberían haber sido percibidos desde la distancia.
Escritor de texto: MVSokolova